Episodio 2: EL SÍNDROME DE ABSTINENCIA: QUÉ ESPERAR Y CÓMO SOBREVIVIR

Episodio 2: EL SÍNDROME DE ABSTINENCIA: QUÉ ESPERAR Y CÓMO SOBREVIVIR

Hola y bienvenido de vuelta a RIENDAS. Soy Gina Vega. En nuestro primer episodio, hablamos de soltar la culpa para tomar la responsabilidad. Hoy, vamos a hablar de uno de los primeros y más grandes dragones que hay que enfrentar en este camino: el síndrome de abstinencia. Si la sola idea te da miedo, quédate. Este episodio es una guía práctica para atravesar la tormenta.

Primero, entendamos qué está pasando en tu cuerpo. El síndrome de abstinencia, también llamado "mono", no es un castigo, es una reacción.

Imagina que durante mucho tiempo, tu cuerpo y tu cerebro se acostumbraron a funcionar con una muleta química. Todos sus sistemas se adaptaron a la presencia de esa sustancia. Cuando de repente se la quitas, es como si el cerebro gritara: "¡Oye! ¿Y mi combustible? ¡No sé cómo funcionar sin él!".

Ese caos interno es el síndrome de abstinencia. Es tu cuerpo recalibrándose y sanando. Es una señal de que estás volviendo a tu estado natural.

Los síntomas varían mucho dependiendo de la sustancia y de cada persona, pero generalmente se dividen en dos áreas:

  • Físicos: Puedes sentir temblores, sudoración, náuseas, dolores de cabeza, insomnio o un agotamiento extremo.

  • Emocionales: Es muy común sentir una ansiedad intensa, irritabilidad, cambios de humor bruscos, dificultad para concentrarte o una profunda tristeza.

Sé que suena abrumador, pero recuerda esto: es temporal. Es una fase con un principio y un fin. No durará para siempre.

Ok, ahora vamos a lo práctico. ¿Cómo sobrevivir a esto, hora por hora, día por día? Aquí tienes un kit de primeros auxilios para la abstinencia.

Primero y más importante: Habla con un profesional. Para algunas sustancias, la abstinencia puede ser peligrosa. Un médico te dirá si necesitas desintoxicación supervisada. No te saltes este paso, la seguridad es lo primero.

Segundo: Hidratación y Nutrición básica. Tu cuerpo está en una batalla. Dale las armas más simples. Bebe mucha agua, tés de hierbas o caldos. No te preocupes por comidas gourmet; come lo que puedas tolerar: fruta, pan tostado, sopa. El objetivo es darle energía, no estresarlo más.

Tercero: Permítete descansar. Vas a sentir un cansancio que nunca antes habías experimentado. Tu cuerpo está trabajando horas extra para sanar. Duerme si puedes. Si no, simplemente acuéstate. Cancela todo lo que no sea esencial. Tu único trabajo en estos días es cuidarte.

Cuarto: Distracción para las olas de ansiedad. Cuando sientas que la ansiedad o el deseo de consumir te ahogan, necesitas un ancla. Ten una lista a mano:

  • Ponte audífonos y escucha música muy alta.

  • Métete a la ducha, alternando agua fría y caliente.

  • Mira videos cortos y divertidos.

  • Llama a alguien y dile: "Solo necesito hablar de otra cosa por 5 minutos".

Quinto y último: Conecta. El aislamiento es el mejor amigo de la adicción. Oblígate a conectar, aunque sea mínimamente. Un mensaje de texto a un amigo, una llamada a tu padrino o simplemente estar en la misma habitación que un ser querido. No tienes que hablar de lo mal que te sientes, solo sentir que no estás solo.

Recapitulemos: Consulta médica, hidrátate, descansa, distráete y conecta.

Estos primeros días y semanas no se tratan de ser productivo o feliz. Se tratan de sobrevivir. Cada hora que pasas sin consumir es una victoria monumental. Estás desmontando una jaula, ladrillo por ladrillo, y eso requiere un esfuerzo enorme.

Sé amable contigo mismo. Sé paciente. Lo que sientes ahora es la prueba de que tu cuerpo está luchando por ti, por tu libertad. Estás en medio del proceso de curación más importante de tu vida.

Gracias por tu valentía al escuchar. Si estás pasando por esto, no estás solo. Toma uno de los consejos, solo uno, y aplícalo ahora mismo.

Soy Gina Vega, y te espero en el próximo episodio de RIENDAS, donde hablaremos sobre cómo identificar tus "triggers" o disparadores.

Enviadme un correo electrónico cuando las personas hayan dejado sus comentarios –

¡Tienes que ser miembro de Retos Femeninos para agregar comentarios!

Join Retos Femeninos