Nuestra costumbre es ver afuera lo que no está bien, lo que debería de ser, lo que tendría que hacerse.
No queramos cambiar al mundo, pongámonos a la tarea de cambiar nuestras malas costumbres que afectan negativamente a otros.
¿Por qué vivo luchando?... ¿quién nos dijo que se trata de conseguir honores, posición, dinero, dominar y controlar a otros?
Si la vida no es de luchar, es de fluir, de construir no de romper, de unir en vez de separar…
¿Hoy qué estoy haciendo al respecto?
¿Qué acciones tomare parar que este día sea pleno?
¿Cómo puedo ser útil?
¿De qué manera ser más agradecido con la vida?
¿Qué acciones puedo tomar hoy para honrarme, respetarme y ser congruente?
¿Cómo dar más?
¿En qué puedo mejorar la vida de los demás?
¿Qué palabras tendría que expresar más?
¿Realmente amo lo que hago?...
¿Cómo puedo servir?
Se trata de trascender limitaciones personales, creencias, hábitos. De entregar tus capacidades y talentos al servicio del grupo. Ser más consciente, no es acerca de cuantos libros de espiritualidad leas, sino de cuántos no necesitas leer para aprender y hacer toda la diferencia.
Es sentir que tu presencia transforma espacios por tu energía positiva, tu sonrisa, tu confianza…
Deseo que hoy en algo tu HAGAS LA DIFERENCIA.
BRILLA SIEMPRE
MEG
Comentarios
Gracias pr este articulo, me ha servido mucho para reflexionar estos puntos, Salds y un abrazo.
Meg, estoy asombrada por la coincidencia de tu texto con la crisis que tengo con mi pareja (ambos ocurrieron en casi al mismo tiempo). Fundamentalmente mi problema es el control. Gracias por las reflexiones.