Dicen que la felicidad no es una estación en el camino, si no una forma de viajar.
En los últimos años, el tema de la felicidad se ha estudiado desde un punto de vista científico y lo que se ha descubierto es que la calidad de nuestra vida no depende tanto de la felicidad si no de lo que HACEMOS para ser felices. Hoy se sabe que la felicidad no es el producto de la fama, ni del trabajo, ni del dinero sino del desarrollo de metas que le dan sentido a nuestra existencia.
Si tú quieres construirte una vida más feliz te recomiendo que sigas los LIZITIPS PARA VIVIR FELIZ
- Acepta que la felicidad duradera no existe y que tenemos que adaptarnos a situaciones cambiantes. Si todo el tiempo nos sentimos felices dejamos de apreciar la felicidad.
- Goza el momento. Benjamín Franklin dijo: “la felicidad no se produce por los grandes momentos de buena fortuna, que raramente pasan, sino por las pequeñas ventajas que ocurren todos los días”. Hay que detenernos a gozar los pequeños momentos cotidianos.
- Ten control sobre tu tiempo. La gente feliz siente que tiene su vida bajo control. Debemos de hacer conciencia de lo mucho que podemos avanzar en un año si vamos teniendo pequeños avances diarios.
- Busca actividades de trabajo y entretenimiento que exijan el uso de tus habilidades. La gente feliz generalmente está en la zona llamada “el flujo absorto”, en una tarea que le gusta, que es un reto pero que no la abruma.
- Muévete. Está ampliamente demostrado que el ejercicio físico, especialmente el aeróbico, no solo produce salud y energía. Es también un buen antídoto contra la depresión y la ansiedad.
- Descansa. La gente feliz lleva una vida activa y vigorosa, y de la misma manera dedica suficiente tiempo a descansar y renovarse. Organízate para dormir lo suficiente y date un tiempo para estar solo y meditar.
- Atiende tus relaciones cercanas. Hay pocos remedios más efectivos contra la infelicidad que una relación cercana e intima con alguien a quien realmente le importemos. Por eso, debemos de alimentar nuestras relaciones familiares y de amistad.
Para concluir si queremos ser felices, tenemos que hacer de la felicidad una prioridad en nuestra vida. La mayoría de nosotros no somos felices porque nos pasamos todo el día corriendo, llegamos a la cama exhaustos y nos levantamos en la mañana temiendo el día que viene. Hay quienes han descubierto que la felicidad es la consecuencia de hacer lo que les gusta, de perseguir sus propios intereses y rechazar a los destructores de la felicidad. No podemos comprar la felicidad; necesitamos menos cosas y más habilidades para ser felices.
Suerte en tu encuentro con la felicidad ¡TE LA MERECES¡
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