Estaba decorando mi arbolito al son de mis canciones favoritas y justo cuando sonaba el famoso “Feliz Navidad”, de José Feliciano, noté que una amiga llamaba insistentemente a mi celular. Aquel desespero era extraño y aunque me considero una de las
Estaba decorando mi arbolito al son de mis canciones favoritas y justo cuando sonaba el famoso “Feliz Navidad”, de José Feliciano, noté que una amiga llamaba insistentemente a mi celular. Aquel desespero era extraño y aunque me considero una de las