La semana pasada una madre murió. En esta trágica historia, una mujer que posiblemente manifestó (con palabras o comportamientos) que necesitaba ayuda, no alcanzó a ser escuchada. Tenía Depresión Posparto y no recibió tratamiento, saltó del octavo piso con su hijo. Afortunadamente, el bebé sobrevivió. Desafortunadamente, la vida de esta familia está ahora destrozada.
Quizá nunca sabremos las circunstancias específicas que rodeaban a la mujer, su esposo y su hijo, y sólo tendremos los titulares de las noticias. Lo que sí es una realidad, es que los sentimientos, el comportamiento y la vida de otra mujer con DPP pasan desapercibidos y no son detectados a tiempo.
Posiblemente sucedió que esta mujer quedó atrapada en medio de un dolor insoportable, de síntomas fuera de control y del pensamiento distorsionado de creer que los demás estarían mejor sin ella.
¿Todo esto sucedió de la nada? Al no conocer de cerca la historia, nunca lo sabremos. Pero es muy probable que existieron claves que pudieron pasar inadvertidas, al no haberse realizado las preguntas correctas.
¿Es posible que todo aparente ser normal hasta ese terrible momento, donde las circunstancias son irreversibles?, ¿Es factible que la mujer no haya dicho nada, que no haya llorado, que no haya presentado angustia y que no haya pedido ayuda?
Algunas veces, ignoramos las claves, las malinterpretamos o simplemente, no creemos que algo así es posible.
Por lo mismo, es INDISPENSABLE saber que las madres que están deprimidas, la mayoría de las veces, NO pueden cuidarse a sí mismas. Pueden negar, protestar, pretender y resistirse a recibir ayuda. Cancelar citas o rechazar el apoyo y los actos de gentileza. Pueden convencer a los otros de que están bien, cuando internamente sufren en silencio, y tienen una gran vergüenza y culpa.
Es NECESARIO que escuchemos a aquellas madres que en cualquier forma, circunstancia o momento, indiquen que no se sienten bien. Detectar aquellos comportamientos, palabras, emociones o impulsos que parezcan anormales o extraños.
NO deberíamos asumir que todo está bien. DEBEMOS hacer las preguntas difíciles, aunque la mujer no parezca ser el tipo que pone una pistola en su cabeza, se toma pastillas o salta de un edificio. ES PREFERIBLE ser cautos y precavidos, aunque esto signifique intervenir a pesar de su oposición.
NO PODEMOS CONFIAR EN LOS PENSAMIENTOS DEPRESIVOS, siempre será mejor actuar, que lamentar la terrible pérdida de una vida.
http://www.psychologytoday.com/blog/isnt-what-i-expected/201303/too-many-mothers-are-dying
Comentarios
Lei este articulo y no pude evitar hablar desde mi experiencia, yo fui madre a los 18 me encontraba en medio de una situacion disfuncional y por ende falta de atencion medica y psicologica, en medio de mis miedos, frustraciones y depresiones tuve a una bebe que nacio baja de peso, pero gracias a Dios bien, la que no estaba tambien fui yo, algo dentro de mi despues del parto iva creciendo era como una profunda tristeza y soledad, algo que iva mas alla de mi alcance y comprension, ademas de de las circustancias con mi maternidad prematura y no planificada, estaba llena de sensaciones y pensamientos que me hacia ver esta vida con tal indiferencia y desamor, recuerdo poco de esa que fue una de las peores experiencias de mi vida, pero las ganas de morir y de desaserme de esos sentimientos que no me dejaban hacer nada, que estaban ahi dia y nohe eran infinitas.... mi esposo un año menor que yo, tenia bastante con la nueva responsabilidad adquirida inconscientemente, por lo que mi estar no significaba tanto, hasta que llego el momento en que cartas escritas por mi, donde expresaba inmensas ganas de morir, ademas de la indiferencia hacia con mi bebe lo llevaron a pedir ayuda a mi madre y mi hermanos, quienes juzgaban mi estado como algo "inmaduro" de mi parte, mi madre decia que no entendia como podia sentirme asi...yo tampoco lo entendia y hasta me castigaba por ello... esta situacion me duro mucho tiempo, hasta que llego el limite de autoagredirm, propiciando situaciones de violencia que me hacian culminar mis estados agudos depresivos... como lo imaginaran toque fondo y tuve q buscar ayuda... un psiquiatra me dio medicamente y terapia, me explico que aunado a un claro desorden emocional y psicologico tenia tambien un cuadro grave de sidrome postarto...y yo no lo sabia... con ayuda de Dios y de gente maravillosa que me puso en el camino fui superando las cosas, hoy 10 años despues me siento afortunada por haber tenido la experiencia de valorar la salud mental. de aperturarme a buscar ayuda y de que no haya sido tarde... si conocen a alguien en esta situacion o si son ustedes deben de saber que el sidrome pósparto es ocacionado por cuestiones quimicas cerebrales y por falta de viatminas y cosas que tienen solucion!!