Recientemente visité Carolina del Norte y almorcé con una colega y amiga a quien no veía desde la última vez que fui a este estado para ir al funeral de su marido, quien murió hace cinco años.
Su esposo Francisco era un hombre carismático, amoroso, lleno de vida, sumamente inteligente y con un gran sentido del humor. Recuerdo que mi amiga cariñosamente se refería a él como “Mi Joyita”.
Lamentablemente, Francisco murió por un ataque cardiaco a sus 42 años de edad. Luego de su deceso mi amiga quedó con un vacío emocional tan grande que cayó en una depresión por varios años. Por eso, cuando la ví, quedé sorprendida al encontrarme con una mujer sonriente y bien recuperada.
Durante el almuerzo hablamos de nuestras familias y el trabajo, y cuando llegamos al postre, la conversación giró sobre el fallecimiento de su esposo y me contó lo difícíl que fue aceptar la perdida de su amado. Antes de irnos decidí ir al baño y mientras me levantaba de la mesa me preguntó: “¿Crees que podría enamorarme nuevamente, después de haber amado tanto?”, La pregunta me tomó de sorpresa, pero sin titubear le dije, “!claro que si!”.
Mientras caminaba al baño, reflexioné y pensé, ¿“habré contestado lo correcto”? Al regresar le dije: “Acerca de la pregunta que me hiciste...”, sonriente interrumpió: “María, estás en lo correcto, ¡me he vuelto a enamorar!”
Sus palabras me dieron mucha alegría. Me explicó como fue que pudo superar la muerte del hombre que más amó:”Ya no siento rabia hacia la vida por haberlo perdido, mas bien me siento agradecida por el tiempo que lo disfruté a mi lado.” Luego confesó: “Por mucho tiempo sentía culpabilidad cuando me atraía otro hombre, porque creía que eso significaba que ya no amaba a Francisco. Hasta que un día me di cuenta que aun estando enamorada de otro, nunca dejaré de amarlo.”
La experiencia de mi amiga es una enseñanza para todos los que sufren la perdida de un gran amor, ya sea por un divorcio, una separación o una muerte. Al principio pensarás que nunca sanará tu corazón, pero el tiempo sí, cura todas las heridas, y al igual que ella, mas adelante puedes encontrar una “joyita”.
Comentarios
A pesar de todo, es una bonita historia, haber sido feliz durante los años que estuvo con él, es una gran BENDICIÓN, la ventaja es que escogerá un varón afin a su anterior, saluditos.