EL SECRETO PARA ABRAZAR TU PODER PERSONAL.

 

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“¡Ve en busca de tu mejor yo!” Oprah Winfrey.

 

Mientras continúo el viaje de crecimiento en la estación de formación llamada Lisboa, tuve la valiosa oportunidad de asistir a una conferencia de Brendon Burchard, coach de alto performance y orador motivacional a nivel mundial, donde escuché un dato sorprendente: “Más del 80% de las personas no tienen confianza para ir más allá y crear una vida mejor”. En este sentido, has pensado como te sentirías si haces un espacio para servirle un café a tus miedos, dudas y preocupaciones ¿Qué les dirías? ¿Qué te están enseñando? ¿Qué harías a partir de hoy para ir más allá de ellos? Son respuestas que no se googlean porque son el resultado más genuino y certero de la medida de confianza que tienes en tu poder personal.

La confianza es la consecuencia de aprender a creer en ti. Creer en ti es la causa, la confianza es el efecto. Creer en ti no significa que tu vida de ahora en adelante será una línea recta sin obstáculos, ni tropiezos. Cuando crees en ti aprendes a no dejarte paralizar por los desafíos, aunque algunas veces toques fondo y no veas salida. Incluso cuando las cosas no resulten ni cerca de lo que planeaste, si has aprendido a cultivar la suficiente confianza en ti, ya no te culpas, no te flagelas, no te juzgas ni juzgas, no sufres porque algo no salió como lo esperabas, debido a que la madurez que brinda tu autoconfianza, te permitirá comprender que tanto los errores como los fracasos son necesarios para crecer. Cada vez que falles o cometas algún error si miras más de cerca logras observar y apreciar la lección para seguir afrontando la vida con determinación, sabiduría, equilibrio, coraje y serenidad. 

En realidad, nadie tiene todas las respuestas y no hay una manera correcta de hacer las cosas, el viaje de la vida es un camino de crecimiento que se construye con tus éxitos pero también de lágrimas, miedos, inseguridades, decepciones y fracasos, los cuales son maestros del destino que siempre quieren ofrecerte el regalo de trascenderlos para edificar tu mejor versión, convirtiéndote en un ser humano en crecimiento, evolucionando en conciencia y solo en tus manos reside la soberana decisión de recibir e internalizar ese regalo. Cito a Oprah Winfrey: “No hay tal cosa como el fracaso. El fracaso es solo la vida tratando de movernos en otra dirección”. Por lo tanto, potenciar tu propia confianza te vuelve más seguro, cuentas con más recursos para silenciar a tu crítico interno, a esa voz dentro de ti que dice:"No puedo hacerlo", “No puedo lograrlo”, “No soy suficiente” “No soy bueno en esto” “¿Qué dirá la gente?”. Tenemos los recursos dentro de nosotros para llevar a cabo hazañas que otros consideran imposibles, liberando nuestro potencial, todo ello se manifestará en virtud de la confianza en nosotros mismos. En esa misma sintonía, trabaja con pasión en tu alma, dones y talentos para hacerlos cada vez más sólidos.

Creer en ti te arraiga en tu auténtica esencia, aceptándote tal y como eres, como un ser único e irrepetible, viviendo sin máscaras, sin las etiquetas del mundo: gordo ó flaco, blanco o negro, alto ó bajo, con celulitis o estrías y miles de eufemismos, lo realmente importante es enfocarte en tu bienestar e ir a tu propio ritmo, con la certeza de que tus debilidades o inseguridades no definen tu autoestima, ellas son un peldaño más para brindarte la oportunidad de mejorarte, te preparan para tener la capacidad de celebrar tu vulnerabilidad, tanto como lo que te hace fuerte y es así como te conviertes en una persona plena, viviendo con sentido de propósito.

Creer en ti es amarte con tus cicatrices y tropiezos, te ayuda a ser una persona definida, de una sola pieza, te reviste de resiliencia, te inyecta la pasión para avanzar y consolidar tus metas, al contrario de una persona débil en su propia estima, la cual no tiene mayores aspiraciones ni visión optimista del mundo, vive a través de la vida de los otros y termina siendo una persona volátil  ante las dificultades, sin inteligencia emocional para manejar sus sentimientos, pensamientos y acciones, por lo tanto, no son personas confiables. Estos tiempos nos invitan a proteger nuestra energía, primordialmente cuidando la paz mental (nuestro más excelso patrominio).

Aprender a creer en ti te libra de las malas intenciones de la gente que pretende minimizarte y confundirte en relación a tu propia valía. Por lo general, las personas emiten opiniones sobre la vida de otros, dependiendo de su minúscula o magnífica visión acerca del mundo, es decir opinan desde sus luces o sombras. Y he aquí un alerta, porque el hecho de como piense una persona respecto a ti, no te define como ser humano, tú eres un espejo de su propio reflejo. Cada ser es único y su historia es un mundo sagrado, seguramente imperfecto, pero es su mundo y eso lo hace maravilloso. Al final, la opinión más importante es lo que piensa Dios de ti, el resto es la gran mayoría de las veces, el eco de personas hablando desde sus miserias, frustraciones e inseguridades o desde su propia grandeza. Si logras ver grandeza en algunos seres, es porque esa grandeza también está en ti, con personas así: ¡Quédate! Son tu gente luminosa, gente vitamina, gente que saborea la vida en gratitud.

Y si te preguntas: ¿Cómo hago para saber si creo lo suficiente en mí? Desde mi experiencia personal, después de buscar incansablemente esa respuesta, un buen día llegó de forma inesperada, llena de certeza, paz y calma, la obtuve como un déjà-vu, escuchando una conferencia del coach Humberto Montes, expresaba: “Creer en ti es permitir que Dios te guie para realizar tus sueños”. En ese sentido va mi vida aquí y ahora en medio de batallas cotidianas que cada instante me reconectan a mi fuerza interna para recordar, reafirmar y redefinir mi camino. Sin duda, esa frase permanecerá por siempre en mi memoria. Espero que a partir de hoy, también la lleves contigo, es el más poderoso aliciente para tu viaje. Ahora lo sé y lo afirmo con vehemencia: Él es el maestro, mientras que yo sostengo el lápiz para realizar los trazos con firmes cimientos y pasos equilibrados, guiada a través de su perfecta y misteriosa dirección.

El mayor acto de amor propio es aprender a creer en ti y aunque es un viaje donde conocerás tus mayores sombras y el dolor será el mayor aliado para tu crecimiento, no olvides que todo lo difícil simplemente te está conduciendo a tu felicidad.  En esta ocasión te extiendo la invitación a iluminar tu vida desde la esencia de tu ser para que una vez encendido tu fuego interior puedas iluminar el camino de otros para que también puedan encender su luz, aunque no necesariamente estén dispuestos a pagar el precio por encenderla, en esos casos déjalos ganar mientras avivas con más tenacidad tu llama porque el Gran Arquitecto Del Universo siempre quiere llevarte más alto, solo da el primer paso y empieza por creer en ti. Siguiente paso: ¡No es por vista, es por fé! 

POSDATA: Para conocer más herramientas de crecimiento personal para mujeres resilientes, te invito a leer el libro “UNA MUJER AL OTRO LADO DEL MIEDO” disponible en amazon.

Mayerlin Romero.

Escritora venezolana.

@soy.mayer

 

 

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