Hace unos días viniendo de recoger a mi hija -de 15 años- de su escuela salió una canción en la radio que empezó a cantar y bailar, y luego me hizo el comentario de que todas las canciones de ese artista hablaban de sexo y que por eso sonaban en la radio todo el tiempo, en cambio las de otro artista -su favorito- no pegaban tanto porque el hablaba de temas "bonitos y suaves".
Esto me hizo pensar en que si aun las personas conscientes -como mi hija- cantaban y bailaban las canciones famosas que ponen en el radio a todas horas aun dándose cuenta de que no les beneficia, no quiero ni imaginar lo que sucede hablando de "programación mental y emocional" con aquellas personas que ni siquiera son capaces de darse cuenta lo que están cantando y bailando.
Sabemos perfectamente que lo que más vende (se desea) es precisamente lo que nos incita a ser, a hacer y a tener lo que comúnmente no nos atrevemos a reconocer ni siquiera en nuestro interior. Por eso los temas de rebeldía, drogas, sexo, infidelidad, libertinaje y violencia nos apasionan, porque en esos temas vemos reflejados el lado "secreto" de nosotros mismos. Y eso no pasa solamente en los adolescentes, también pasa en los adultos, los cuales son capaces de tomar sus propias decisiones, "aparentemente".
Hace unos días me encontré con un video donde una cantante ya famosa en México y Latinoamérica contesta molesta a un reportero defendiendo, aparentemente, a las mujeres (feminista) usando un lenguaje muy "florido", característico de esta cantante. Sí, cada quien es libre de hablar como lo de la gana. Lo que quiero expresar con este comentario es que pareciera que para que alguien sobresalga o se gane el reconocimiento del público tiene que hacer alguna "rebeldía" o, desde mi punto de vista atreverse a hacer algo que las personas "normales" no lo harían.
Yo me considero una persona de mente abierta y respeto todos los puntos de vista y creo fielmente que cada quien puede creer lo que quiera, sin embargo tengo mis creencias y valores muy claros, y para nada me identifico con las personas que promueven la deformación del lenguaje (lenguaje florido), la violencia, las diferencias entre los seres humanos, el sexo sin responsabilidad, las drogas como un estilo de vida, y algunos otros temas más. Yo no estoy hablando de lo que es malo o bueno, ni de lo que se debe o no hacer, yo estoy hablando de responsabilidad, simplemente de eso.
Yo no creo que el tener un micrófono a la mano o miles de seguidores te da derecho a promover temas que sabemos perfectamente que las personas -especialmente los niños y adolescentes- no saben como manejar. El ser una persona pública tiene una gran responsabilidad y parece ser que eso no se toma en cuenta y nos dejamos llevar por el "idealismo" de que cada quien tiene derecho a decidir lo que quiera.
Por supuesto que el "ideal" es creer que cada quien es libre de ser, hacer y decir lo que le da la gana, así como cada quién es libre de elegir lo que consume, ve y escucha, y estoy totalmente de acuerdo con esto; sin embargo, ¿en verdad se puede creer que las personas estamos conscientes a la hora de elegir a quien admiramos (roles de vida) o la información que consumimos todos los días? Yo no lo creo. Pregúntate a ti mismo, ¿Cuántas veces estás consciente de lo que estás diciendo, pensando, sintiendo, haciendo, creyendo y consumiendo?
Personalmente, nada me haría más feliz que llegar a un punto donde la mayoría de las personas estemos conscientes de la vida que deseamos vivir y que podamos elegir conscientemente la información que consumimos cada día, y no seguir siendo un producto (automático y controlado) de nuestro medio ambiente. Cuando lleguemos a ese punto podremos ver que los temas de cualquier tipo de violencia, las drogas, el sexo sin responsabilidad, el abuso… no serán populares porque en el fondo lo que los seres humanos buscamos es la paz interior, la responsabilidad, la felicidad y el amor en toda la expresión de la palabra.
Sin embargo la manera más fácil de controlar y manipular es colaborando para que cada día haya más personas, insatisfechas, reprimidas, renegadas, estresadas, infelices, deseando vivir una vida que aparentemente no pueden vivir. Y en cuanto nos venden una imagen de aquel o aquella que lo es, hace, tiene y lo puede todo, automáticamente lo compramos (nos relacionamos con eso), le aplaudimos y lo promocionamos; todo esto inconscientemente la mayoría de las veces.
¿Qué podemos hacer cada uno desde nuestra vida? Despertar y usar nuestra consciencia para decidir el estilo de vida que deseamos vivir y elegir los medios y la información que creemos, practicamos, imitamos y promovemos en nuestra vida diaria. Y por supuesto, enseñar a nuestros hijos a hacer lo mismo, de otra manera, seguiremos siendo irresponsables, incapaces de elegir la vida que deseamos y creando una vida que no queremos y no nos gusta.
Abrazos y bendiciones,
Patricia Anaya
Patricia Anaya es la creadora del programa, membresía y la comunidad de YoSoyAbundancia.me y autora del Libro para niños "Los Tres Poderes, ¡La Magia de Amarse a uno Mismo! (www.LosTresPoderes.com) y "The Three Powers, Magic to Love Yourself! (www.TheThreePowers.com).
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