DIVORCIO SANO¿SE PUEDE?
Jenni y Roger son una pareja que tienen años de casados, ¿quizás 15?, dos hijos, un perro y una casa, mas 5 años de novios y aunque al parecer no hay ningún tipo de pleito ni discusión entre ellos, la rutina los ha acabado, ya no hay deseo, ya no hay emoción ni alegría de verse, ya no comparten mayores cosas, mas que la misma rutina de cada día, ambos se sienten solos, sin esperanza por un mejor futuro juntos y miran a otras parejas creyendo siempre que están tan felices y mejor que ellos, sin saber que puede ser que también estén pasando por lo mismo o quizás no. Han tratado de ir a terapia, han tomado toda clase de cursos, talleres pero no hay nada que pueda revivir aquél sentimiento que alguna vez los unió. Han querido conservar su vínculo, también por sus hijos, creyendo que es lo mejor para ellos, sin embargo, sus hijos saben muy bien de la separación de sus padres, lo intuyen, lo presienten, no son tontos, tal vez saben mas que los mismos papás, aunque no les digan nada, ni hablen del tema, solo lo saben.
Finalmente deciden optar sin mas remedio por el divorcio, una decisión pensada, meditada, platicada, acordada, divorcio que será sumamente sencillo de tramitar porque ya no hay nada que los ligue emocionalmente y tienen claro, muy claro que jamás dejarán a sus hijos y que además siempre serán una familia, -distinta, como tantas que hoy existen- pero familia al fin y al cabo…. La relación de padres, jamás terminará incluso aún después de su misma vida. Saben que tendrán que compartir muchos momentos más en la vida por lo que deciden concluir en los mejores términos, saben que respecto del único bien que tienen los beneficiarios de ello serán los hijos, por lo que después de varias reuniones y negociaciones logran llegar a acuerdos que los deja en paz, pudiendo cerrar el ciclo que los unió por tantos años, dejándolos libres, para sanar, para curarse, para retomarse y continuar su vida y destino, aprendiendo de todo lo vivido.
Divorcio sano, en el que a pesar del gran dolor de dar por terminada la relación, cura a todos los que participan en él de una u otra forma.
Si estás en un matrimonio ó pasas por una crisis y crees que el mejor o el único camino es el divorcio para que de verdad puedas llegar a un divorcio sano, primero que nada agota desde ti todas las posibilidades para rescatarlo, -recordando siempre que el amor y las relaciones son SIEMPRE recíprocas, nada podrás hacer si tu pareja no está de acuerdo-. El intentar y lograr un divorcio sano será la gran oportunidad de tener un futuro tranquilo para todos los miembros de la familia y a pesar de lo difícil que pudiera parecer lograrlo, con voluntad se puede, difícil sí, imposible, no.
Cuida tu alma, el alma de tus hijos y por muy raro o difícil que parezca, también la de tu pareja y todo estará bien.
Asesórate, infórmate, antes de hacer ó tomar cualquier decisión.
Lic. Claudia Torres G.
Abogada y coach legal.
Facebook: Claudia Torres (abogada)
Twitter: @abogadaclaudiat
Comentarios
Qué difícil hacer un divorcio sano, hay dolor, desilusión, etc., pero si tomamos las cosas con calma se harán los mejores arreglos, yo en lo personal dependiendo de lo que me dio para sus hijas fue lo sano que tuvo mi divorcio.
Por lo tanto no tuve ningún contacto con él, obvio no respondió como verdadero padre porque las hijas es de los dos y no mías nada más.
Salir adelante con mis hijas conteniendo mi coraje hacia él, afortunadamente todo salió bien, mis hijas creciendo sanamente en lo emocional y lo más importante que crecimos juntas hermosamente.
Muy buenos consejos, gracias por publicarlos.