"Mi intención NO es ayudar a los pobres… Mi visión es desaparecer la pobreza"
Existen tantos factores en nuestra sociedad que promueven la pobreza que sería casi imposible eliminarlos todos, desde las religiones hasta las campañas políticas, por supuesto empezando por las creencias y paradigmas familiares y culturales.
Empecemos por definir lo que es pobreza, el diccionario digital define pobreza como escasez o carencia de lo necesario para vivir o escasez de una cosa determinada. Desde mi punto de vista ser pobre se refiere a vivir en el estado (mental, físico y emocional) de me falta algo, así sea algo para cubrir tus necesidades básicas o bien algo que no te deje, te limite o te impida vivir la vida que deseas.
Por supuesto que estamos acostumbrados a ver la pobreza solamente como el no tener para cubrir nuestras necesidades básicas, como si cubriendo las necesidades básicas (comer, vestir, techo, dormir, aseo…) de un ser humano ya es una garantía de que puede vivir bien. Esto no quiere decir que soy ajena al enorme número de personas que viven en pobreza extrema en el mundo, por supuesto que no, sin embargo no creo que debamos conformarnos con sobrevivir porque así menos podremos hacer por mejorar la vida de esas personas que viven en la pobreza extrema. No ayuda en nada el lamentarnos y victimizarnos siendo uno más de los pobres, sino todo lo contrario, lo que necesitamos es que cada vez seamos menos los que vivimos algún tipo de pobreza (mental, física y emocional) y seamos más las personas que viven una vida plena y feliz.
Por supuesto que la pobreza no solamente es física y no se limita solamente a no cubrir nuestras necesidades básicas; la pobreza empieza en nuestra mente con toda la bola de creencias y paradigmas que nos ha programado nuestro medio ambiente desde que nacemos. Desde decirnos que el dinero es un pecado, que el dinero cambia a las personas, que es mejor ser humilde que rico, que los últimos serán los primeros, que los ricos son malos, que es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja que el que un rico entre en el reino de Dios, que la vida es sacrificada, que la mujer es para atender a los hijos y estar en la casa, que lo más importante en la vida es casarse y tener hijos, que donde como uno comen cinco… nunca acabaría de nombrar tantas y tantas creencias y paradigmas que mantienen a las personas en la pobreza.
La pobreza mental y emocional se ve reflejada en la pobreza física y económica, principalmente en no tener dinero para cubrir las necesidades básicas, mucho menos para vivir una vida sana y plena. La pobreza se ha convertido en un círculo vicioso donde se cree que cubriendo las necesidades básicas su vida va a cambiar, y eso es un total engaño, porque casi nunca se llega a educar a las personas. Educar no se refiere solamente a darle escuela, educar para mi significa sacar lo mejor de cada persona; y para empezar a erradicar la pobreza ser requiere empezar por brindar información y herramientas para cambiar las creencias y paradigmas que están manteniendo en la pobreza a estas personas.
¿De qué sirve proveerles o darles lo que necesitan "para vivir" si esto no va acompañado de una educación personal y familiar? Lo único que logramos con eso es hacerlos más dependientes y fáciles de manipular a la voluntad de muchos líderes (políticos, religiosos, laborales…) que se aprovechan de su pobreza.
Estoy totalmente consciente que este no es un trabajo sencillo, ni que se pueda dar de la noche a la mañana, pero si no empezamos por nosotros mismos, nuestras familias, amigos, conocidos y comunidades, la situación va a seguir empeorando y los ricos seguirán siendo más ricos y los pobres mas pobres.
Estamos muy acostumbrados a validar y a aplaudir la victimización, el sacrificio, la lucha y el sufrimiento y esto también es parte de la pobreza mental. Cuando alguien habla de estos temas, millones se identifican automáticamente con esa persona. Creemos que ser humilde es ser pobre, cuando la humildad no tiene nada que ver con la pobreza. Este es otro concepto o creencia que promueve y mantiene la pobreza. Todo mundo quiere ser humilde. Humildad es ponernos al nivel de cada persona (sin importar el nivel económico, social, religioso…que tengamos) para poder comunicarnos asertivamente con ella. Ser humilde es reconocer el valor de cada ser humano (como ser humano) empezando por el mío propio.
¿Te has preguntado alguna vez si eres pobre, es decir si te falta algo para vivir bien y tener una vida plena? ¿Te conformas solamente con cubrir tus necesidades básicas justificándote que hay muchas personas peor que tu? Hay miles de personas que tienen todo lo material que quiere, sin embargo carecen de otras cosas como afecto, amor, pasión por lo que hacen o por la vida, etc. El tener todo lo material tampoco garantiza que no eres pobre. Ah, pero que tal el dicho de "no se puede tener todo en la vida", ¿te identificas con ello?
No se si se pueda tener todo en la vida, lo que si te puedo decir es que si se puede tener todo lo que se quiere para vivir una vida plena y feliz. Afortunadamente habemos personas en este mundo que no nos hace falta nada para vivir en plenitud y en abundancia, y eso es a lo que te invito. Saca la pobreza de tu vida (creencias y paradigmas) que tú tienes todo para crear y vivir una vida plena y feliz. Y por supuesto, comparte con tu familia, tus amigos, conocidos y comunidad como has llegado a crear esa vida y ayúdalos a salir de la pobreza, en lugar de seguir valorando, promoviendo y practicando la pobreza.
Abrazos y bendiciones,
Patricia Anaya
Patricia Anaya es la creadora del programa, membresía y la comunidad de YoSoyAbundancia.me y autora del Libro para niños "Los Tres Poderes, ¡La Magia de Amarse a uno Mismo! (www.LosTresPoderes.com) y "The Three Powers, Magic to Love Yourself! (www.TheThreePowers.com).
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