Ever no es una mala persona… quizás tiene un poco de mal genio, pero es un hombre trabajador, sin vicios. La gente lo envidia, por eso dicen tantas cosas, hasta una vecina vino a decirme que según eso se droga… no entiendo como Irma es capaz de semejante cosa. Le tiene mala voluntad.¡Ay, como me duele el brazo! Pero pobre Ever, el llega tan cansado y yo no tenía la comida lista. Lo malo fue que no me dejó explicarle que lo único que faltaba era servirla. Se me vino encima, pero él no tiene la culpa, la culpable soy yo, que si se que el llega a las 6 de la tarde a casa, mi deber es tenerla en la mesa 5 minutos antes, aunque luego sea un rollo porque suele enfriarse un poco cuando el tráfico lo retrasa.Demonios, otra vez cerró la puerta con llave. Ahora tendré que esperar a que llegue la chica de la limpieza para que me abra la puerta. Yo le he dicho que me permita tener un duplicado, que jamás le abriría a desconocidos, pero no quiere. Es un poco celoso. Lo malo es que si un día hay un incendio, igual y me quedo aquí adentro achicharrándome.Nunca pensé que Ever podría fijarse en mí. A veces lo veía pasar a bordo de su camioneta, tan elegante, tan bien vestido. Fue una suerte ganar para reina de la feria de mi colonia. El día de fin de fiestas fue cuando se me acercó y me invitó a salir. El tenia 25 años y yo, 16. Muy pronto me propuso matrimonio, y cómo iba yo a negarme. Eso hubiera sido una locura.Mientras fuimos novios, el estaba orgulloso de andar conmigo. Bueno, a veces se molestaba porque yo no tenía modales y el pobrecito tenía que patearme por debajo de la mesa para que yo supiera que la estaba regando y que sus amigos no se dieran cuenta y se burlaran de él. Pero eso sí, siempre me llevaba a los mejores lugares.De no haber sido por él, yo hubiera terminado casada con algún resanador de carpintería que me tendría muriéndome de hambre, eso siempre me lo dice, y tiene toda la razón. En todo el barrio no había mejor partido que el. Me dá muy buena vida, tengo sirvienta, un bello departamento, puedo ir de compras a buenos lugares, claro, siempre con el , que si sabe administrar el dinero, por eso no me da efectivo, pero puedo pedirle cosas y cuando esta de buen humor, me complace en todo. Cuando era soltera solo tenía dos pares de zapatos y unos tenis... ahora, de casada, tengo un closet con solo prendas de marca y mas de veinte pares de calzado, ademas de joyería fina, hasta de oro y perfumes de esos que anuncian en las revistas nice.Me acuerdo lo linda que fue nuestra fiesta de bodas. Es una pena que no pudiera invitar a toda mi familia, solo a mis papás y a mis hermanas. Es que como fue en un lugar tan exclusivo y el tiene tantas amistades, no pudo darme más pases.No hubo luna de miel, el tenía que trabajar el lunes siguiente, así que no pudo llevarme de viaje. Como siempre yo lo arruiné todo, la muy tonta pensé que podría seguirme vistiendo igual que de soltera, y Ever se molestó tanto, que lo obligué a que me pegara, y tuvo que quemar mi ropa de soltera para que yo accediera a vestirme como toda una señora. Cuando nos mudamos al departamento fue cuando yo empecé a conocer la buena vida, con bonitas cosas, ropa cara, y hasta una camioneta para salir cuando me porto bien y no le doy motivo para enojarse.Lo malo es que Ever cuando lo hago enojar no se mide, el pobre no tiene control de su carácter. Dice muchas cosas feas, aunque luego se arrepiente y me compra todo lo que le pido. Esta vez, si se le pasó un poquito la mano. Sin darse cuenta me rompió el brazo y una costilla. Lo bueno es que al bebé no le pasó nada, aunque no sé si en el hospital me creyeron cuando les dije que me caí por las escaleras. El doctor dijo “Gracias a Dios apenas tiene usted 17 años, eso es de gran ayuda para recuperarse, pero tenga más cuidado en lo posterior”. Ever ha hecho tanto por mí, que no se merece que yo sea tan malagradecida para meterlo en un problema. Cuando salí del hospital me pidió perdón, y hasta permitió que mi hermana viniera a casa a verme.El es un buen hombre, y yo algún día voy a aprender a ser la esposa que el se merece. Por lo pronto ya me felicitó porque mi gusto para vestir ha mejorado “ya no pareces puta”, me dijo el otro día, y me dio mucho gusto saber que el ahora puede llevarme a sus fiestas sin avergonzarse de mí. También aprendí a comportarme en las fiestas de su oficina. Es muy fácil, simplemente saludo, sonrío y no platico con nadie. Si alguien quiere conversar conmigo, solo contesto con monosílabos, para no equivocarme, y sigo sonriendo. Me gusta ir a esas fiestas, me doy cuenta que algunas de las mujeres me miran con envidia por ser la esposa de Ever.Es tarde, ya casi son las seis; me duele todo, pero Ever ya va a llegar, y viene tan cansado de la oficina que lo menos que se merece es tener su comida servida y la puerta abierta para recibirlo.
Ay Ana, me dejas suspirando y con una emoción de enfado con la esposa de Ever, acepto que por unos minutos me vi reflejada. No viví violencia física, pero si psicológica y como me afectó eso. Pero bueno, gracias a Dios eso ya pasó y me he convertido en una mujer diferente, ahora sé lo que valgo y lo que merezco.
Gracias Ana por todos tus blogs, son geniales. Admiro tu facilidad de escritura, tu imaginación, tu carácter, todo.. eres una mujer admirable.
En mayor o menor grado aparecen siempre estos tipos de personajes: El hombre macho y abusivo que se consigue a una jovencita pobre e ignorante para poder aprovechar de ésta. La historia me parece buena para que la continues... Ya me gustaria leer algun libro tuyo!
Besitos
Uf, que miedo y pensar que en muchos lugares esto existe, es una perrada borrar a una mujer asi como lo hace el pobrecito de Ever, pobre ser tan enfermo. Gracias por la sacudida.
OJALA Y FUERA FANTASIA PERO ES UNO MAS DE TANTOS CASOS QUE SUCEDEN EN NUESTRA PLURAL SOCIEDAD NO ES CIERTO?
FELICIDADES ANA POR TU PUBLICACION.
UN BESO.
Comentarios
Gracias Ana por todos tus blogs, son geniales. Admiro tu facilidad de escritura, tu imaginación, tu carácter, todo.. eres una mujer admirable.
Saludos.
Besitos
FELICIDADES ANA POR TU PUBLICACION.
UN BESO.