Tú eres lo más importante. El Poder está en Ti.
“La humildad desaparece tan pronto como nos creemos superiores o sentimos que nuestras necesidades son más grandes que las de otras personas”
Solemos decir que los seres humanos están orgullos de ser ricos, inteligentes o apuestos, pero no es así. De lo que se enorgullecen es de ser más ricos, más inteligentes, o más apuestos que otros. Casi todas esas actitudes que atribuyen a la codicia o al egoísmo en realidad son más consecuencia del orgullo. Quizás ninguna de nuestras pasiones naturales es más difícil de someter que el orgullo. Los individuos humildes que logran el éxito reconocen que no llegaron a la cumbre por sí solos, y de buen grado dan el mérito a quienes los ayudaron a lo largo del camino. Albert Einstein decía: “Cien veces al día recuerdo de que mi vida interior y exterior depende del esfuerzo de otras personas, vivas y muertas, y que debo esforzarme por dar en la misma forma en que he recibido y estoy recibiendo”.
En el estudio del escritor, Alex Haley, cuelga la foto de una tortuga sentada en una cerca. Cuando Haley la mira recuerda una lección que le enseñó su amigo John Gaines: “Si ves una tortuga trepada en el poste de una cerca, ten la seguridad de que recibió ayuda” La igualdad de condiciones nos permite compartir lo que somos y podemos hacer por los demás, siempre y cuando jamás trates de competir o esperar algo de alguien. Haz lo que tu corazón y mente desean, de esa manera podrás expandir esperanza, fe y amor.
Cada uno de nosotros es un actor que intentamos impresionar a una audiencia, tratando de obtener el papel principal. Pero si deseamos prestar mucha atención a otro ser humano debemos entrenar nuestro ego sediento de atención para que deje de luchar por ser el centro de atención y permitir que la otra persona lo sea. La gratitud en igualdad de condiciones es compañera cercana tanto de la integridad como de la humildad. Gratitud sin integridad es falso halago, aunque se necesita humildad para decir: “Gracias, no lo hubiera podido lograr sin tu ayuda”. Cuando recibía amigos de alta jerarquía, el ex presidente de Estados Unidos, Theodore Roosevelt, gustaba llevar a sus invitados a caminatas nocturnas. Inevitablemente señalaba hacia el cielo y recitaba:
“Es una Andrómeda, la galaxia en forma de espiral. Es tan grande como nuestra Vía Láctea. Es una de las cien millones de galaxias. Está a dos millones y medio de años luz de distancia. Consta de cien mil millones de soles, muchos de ellos más grandes que el nuestro” Entonces, después de un breve silencio, sonreía y expresaba: “Bueno, ante ello, ustedes y yo somos bastantes pequeños” Conclusión: Todos estamos en igualdad de condiciones, todos somos iguales”
Recuerda, Tú tienes el Control, Tú eres lo más importante. Que Dios te bendiga, nos vemos la próxima semana. Gracias.
Comentarios
Muy buen articulo Angy, saludos!
exelente!!!
hola¡¡¡¡ gracias por este buen articulo