El día de hoy me gustaría reflexionar junto contigo sobre tu familia. Pensar a que se asemeja más: a un equipo deportivo, piensa en uno de futbol, béisbol, basquetbol, lo que te guste, o bien en un hotel el cual has visto por fuera o alguna vez te has hospedado.
Veremos a continuación que sucede en cada uno de estos dos ámbitos y pensemos a cuál se parece más mi familia:
FAMILIA HOTEL: Lugar para dormir y comer cuando se quiera, entran y salen a la hora que a cada uno le convenga.
FAMILIA EQUIPO: Es un lugar acogedor, que invita a la convivencia. A los integrantes les gusta estar juntos.
En un hotel cada quien tiene sus propios intereses, objetivos y prioridades. Los huéspedes vienen de diferentes ciudades , algunos de trabajo, otros de vacaciones o visitas familiares.
En un equipo deportivo existen intereses, objetivos y metas en común. Todos quieren prepararse para ganar y juntos establecen metas y objetivos a corto y a largo plazo.
En un hotel cada quien hace lo que quiere, ¡no hay horarios! Los comedores están abiertos las 24 horas del día, y mientras el huésped diga que no quiere que lo molesten, nadie puede despertarlo o interrumpirlo.
Mientras que en un equipo hay disciplina y autoridad, hay reglas estrategias y un horario: para entrenar, comer, descansar, jugar y también divertirse.
En un hotel las personas son ajenas entre sí: cada una tiene SU cuarto, SU televisión, SU ropa; no comparten nada entre ellos, cada quien está en su habitación y no sabe que pasa en las otras.
¿Que pasa en un equipo? Ganan o pierden JUNTOS. Es decir, lo que haga o deje de hacer alguno de sus miembros afecta el resto. Tienen constante relación.
En un hotel no hay comunicación entre los huéspedes, no se conocen, no hablan entre sí, y si acaso, se saludan en los pasillos o elevadores.
En un equipo hay buena comunicación entre el líder y los integrantes del equipo, platican, conviven y están enterados de las inquietudes y problemas de todos.
En la FAMILIA HOTEL, no existe alguien que los dirija, hay un gerente que administra, ordena, limpia y ve que todo funcione, pero NO dirige a sus huéspedes.
En la FAMILIA EQUIPO, hay un líder o CAPITAN el equipo, que tiene que estar en constante comunicación con los demás, decirles hacia donde van, las cosas buenas y malas que están sucediendo y los cambios que tienen que realizar.
En la familia que se parece a un hotel no hay actividades en común, cada quien hace lo que quiere, a la hora que quiere y no se preocupan unos de otros. Cada huésped vive su vida.
En la familia que vive como un equipo tienen que entrenar, por lo que fomentan actividades en común que los llevan a convivir, trabajar y divertirse juntos.
Tristemente en una FAMILIA HOTEL, se vive en soledad. Las personas son ajenas, independientes y no tienen nada en común.
Mientras que en una FAMILIA EQUIPO, existe un ideal entre ellos, tienen un proyecto de vida en común que hace que se sientan apoyados y amados en las buenas y en las malas.
En resumen, en un hotel NO HAY AMOR, es un lugar para satisfacer las necesidades de quienes lo habitan, pero nada más.
Por el contrario, en un equipo HAY AMOR, que se demuestra luchando juntos para competir en la vida y si es posible ganar. Que se escuchan unos a otros, se aceptan, apoyan y gozan de la vida juntos.
Pregúntate muy sinceramente: ¿mi familia vive más como un hotel de cinco estrellas? En el cual dormimos, comemos y vivimos como personas ajenas unas a otras. Se satisfacen las necesidades materiales, pero no las emocionales y menos las afectivas. Hablamos, pero no nos comunicamos. Somos familia, pero no vivimos como tal.
O bien, tu familia se parece mucho más a un equipo en el cual hay objetivos, metas en común, comunicación, disciplina, horarios y sobretodo uno o dos capitanes: papá y mamá.
¿Familia equipo o familia hotel? Tu decides a que quieres que se parezca más.
Lucía Legorreta de Cervantes Presidenta Nacional de CEFIM, Centro de Estudios y Formación Integral de la Mujer. cervantes.lucia@gmail.com www.lucialegorreta.com. Facebook: Lucia Legorreta
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