Se va otro grande de la pintura

Su vida fue larga, intensa y triunfal. Fue, sin lugar a dudas, un artista plástico que brilló y sigue deslumbrando en el género realista y figurativo, en especial por esos retratos espléndidos que traspasan con luz propia el rostro humano, pero sin adentrarse del todo en el alma del personaje plasmado.Me refiero a Lucien Freud, nacido en 1922 en Berlín, pero inglés por adopción, quien tuviera un destino afortunado pero no exento de complicaciones. Nieto de otro grande de la historia contemporánea, Sigmund Freud, la trayectoria de Lucien Freud fue brillante y estuvo llena de éxitos en el universo de la pintura, como lo demuestra tan solo el reconocimiento a esa obra donde aparece una mujer desnuda, exuberante, durmiendo en el sofá, que se vendió apenas hace unos años en 34 millones de dólares en la subasta organizada por la afamada firma Christie´s. ¡Todo un récord!Sin embargo, Lucien Freud y su familia conocieron también la amargura, pues cuando él era un pequeño se vieron obligados a salir de Alemania por la amenaza nazi. Así fue como Lucien llegó a Inglaterra en 1933, siendo aún un niño. Años después decidió ser pintor y sus estudios en diversos centros educativos culminaron con un estilo propio, único.Sus primeras exposiciones se llevaron a cabo a inicios de los años cuarenta. Entre sus obras destacan su autorretrato y El cuarto del pintor, así como las polémicas pinturas que lo mismo retratan a la reina Isabel II con su avanzada edad y evidentes pliegues en la cara, que a la modelo Kate Moss sin las tersuras acostumbradas de las imágenes publicitarias. O aquella que muestra al propio autor desnudo y una mujer que se abraza con fuerza a las piernas de él, como si se negara a soltarlo.Hay muchos otros desnudos en su obra, pues Freud acostumbraba pintar a familiares y amistades tal cual eran o como él los veía. Fue un observador penetrante del cuerpo humano, al cual plasmó en su expresión natural más plena, sin ningún tapujo. En su obra, las personas aparecen como son, con sus pliegues, arrugas, flacideces, señas particulares, sin maquillajes y, por supuesto, muy lejos del adulterado esteticismo.También pintó a diversos animales, por lo general acompañados de personas, algunos impregnados de cierto toque surrealista. Por supuesto, de su obra quedaron fuera las modelos profesionales pues, como dicen que decía, “de tanto ser miradas le ha salido una segunda piel”.Sus cuadros están a la vista de muchos, ya que forman parte de las colecciones de varios importantes museos. Además, junto con otros dos artistas excepcionales, Frank Auerbach y Francis Bacon, conformó la prestigiada e histórica Escuela de Londres.Fue el representante del arte figurativo contemporáneo. Un pintor que agregó a su vida privada el ingrediente transgresor y subversivo de la pasión desbordada.Una de las agencias noticiosas que reportó la noticia de la muerte de Lucien Freud a los 88 años recordó que alguna vez el pintor dijo: “Mi modalidad de pintar puede desatar una sensación de malestar, así como a veces la vida genera disgusto”.enlachachapa@prodigy.net.mwww.marthachapa.netTwitter @martha_chapaFacebook Martha Chapa Benavides
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Comentarios

  • Yo comparto la opinion de Patricia los noticieros entre mas fatalistas y amarillistas mas vistos, mas lucrativos, tal vez si intentaramos probar algo nuevo y dejar de poner tanta atencion a estas noticas pierdan fuerza y nosotros podemos explorar nuevis caminos, conocer nuevos personajes, nuevos expectativas, nuevos intereses  pero nos da miedo ¡¡¡¡  flojera  lo conocido, lo acostumbardo es lo mejor  segun nosotros.
  • Es una pérdida para el mundo del arte, como bien dices.  Los noticieros están más apurados por mostrarnos la parte más oscura de los seres humanos y no hablan suficiente de su lado creativo, Lucien Freud es parte de ese lado luminoso, lamentamos su muerte y celebramos las obras que nos dejó.

    Patricia Rodríguez

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