En general, el envejecimiento está asociado con un progresivo incremento en el peso, debido a metabolismos lentos, por comer tipos incorrectos de comidas e inactividad.
Lo que algunos no caen en cuenta, sin embargo, es que las deficiencias de hormonas podrían estar en la raíz de la obesidad en las “barrigas cerveceras” y “rollitos” de la edad madura. La deficiencia de estrógeno interfiere con el control del apetito y la quema de calorías, y la deficiencia de testosterona resulta de la pérdida del tejido muscular, masa corporal débil o cuerpo con tendencia a acumular grasas. A menos que estos problemas de hormonas sean señalados, el sudar por medio de una rigurosa sesión de ejercicios corporales y el comienzo de una dieta de hambre, no son lo ideal para producir los resultados esperados.
Las hormonas son mensajeros químicos, producidas por las glándulas del sistema endocrino, que regulan una variedad de procesos corporales.
El desequilibrio hormonal –mucho o muy poco- puede llevar a la obesidad. Recientemente los científicos han descubierto la hormona leptina, la cual es producida por células de grasa y secretadas en el torrente sanguíneo. La leptina también controla cómo el cuerpo maneja sus depósitos de grasa en el cuerpo. Lo que se mantiene en duda, sin embargo es por qué las personas están pasadas de peso, desde que la leptina es producida por la grasa y tiende a ser más alta en los adultos más pesados. Una hipótesis es que la gente obesa pudiera ser no muy sensible a los efectos de la leptina y de que los mensajes de las hormonas no están llegando al cerebro. La Ghrelina es otra hormona que juega un rol en activar o apagar el hambre. Entre otras importantes hormonas relacionadas a la obesidad están:
Estrógeno: La hormona femenina estrógeno ayuda a determinar la distribución de la grasa del cuerpo. De acuerdo a los estudios en animales, la carencia de estrógeno puede llevar al aumento excesivo de peso. Durante los años reproductivos, las mujeres tienden a almacenar grasa en el vientre, pero mujeres menopáusicas desarrollan más grasa abdominal que hombres.
El estrógeno suplementario puede prevenir una barriga prominente en la edad madura.
Testosterona: Muchos de los problemas comúnmente en hombres se experimentan durante la edad madura, como un incremento de peso, depresión, disminución del deseo sexual y bajo rendimiento sexual, energía y ánimo bajos, irritabilidad, problemas de concentración y memoria, reducción de la fuerza muscular, y colesterol más alto, que podrian ser el resultado del debilitamiento de testosterona o el desequilibrio entre testosterona y estrógeno.
Hormona de crecimiento: La hormona humana de crecimiento (HGH) es una compleja hormona hecha de 191 aminoácidos y producida por la glándula pituitaria. Mientras que la secreción de HGH sube durante los años de adolescencia, continúa siendo producida durante los sueños profundos a lo largo de toda la vida. Después de los 20 años, menos HGH es secretada con cada año que pasa. Entre las posibles explicaciones están, que la glándula pituitaria de alguna manera no recibe la señal para producir más HGH como la edad de las personas o que la somatostatina, una hormona natural inhibidora del crecimiento, aumenta. El resultado más particular es el incremento de la grasa y la disminución de la masa muscular en la vejez. La hormona del crecimiento está aprobada por la Food and Drug Administration de EE.UU, para la deficiencia de hormonas adultas del crecimiento.
La hormona tiroides: El sistema hormonal de la tiroides afecta cada función corporal por la regulación de energía y la producción de calor, el crecimiento, reparación del tejido y el desarrollo de la síntesis de proteínas; la modulación de carbohidratos, proteínas y el metabolismo de la grasa tan bien como la digestión, modulan los músculos y la acción nerviosa; y ayuda a regular la expulsión de secreción hormonal y el uso de oxígeno. Una glándula tiroides poco activa que produce muy pocas hormonas resulta en hipotiroidismo, acompañado de síntomas incluido el aumento de peso o dificultad en bajar de peso.
Glucagón: es una hormona proteica producida por el páncreas que ayuda a regular el uso de carbohidratos del cuerpo y ayuda a la disminución del consumo de comida.
Melanocortinas: Melanocortinas son un grupo de hormonas péptidas pituitarias. Uno de los receptores para estas hormonas está en la glándula del hipotálamo y las proteínas que la rodean, y parecen jugar un papel protagónico en controlar el peso del cuerpo.
De acuerdo al Dr. Thierry Hertoghe, autor de La Solución de las Hormonas (New York: Harmor Books, 2002), las peores diez hormonas relacionadas con problemas de peso son cortisol, aldosterona, DHEA, hormona del crecimiento, progesterona, testosterona, y la hormona tiroides, asi como el exceso de insulina, estrógeno o cortisol. Él sugiere la siguiente serie de preguntas que ayudan a localizar el problema:
-Está tu cara inflada en la mañana?
Si tus párpados están muy crecidos y tienes profundas bolsas bajo tus ojos, consulte a su médico acerca de una posible deficiencia de la hormona tiroides.
-Está tu cara hinchada como luna llena?
Tus glándulas de adrenalina pueden estar produciendo mucha cortisona, la hormona de estrés, o tú puedes tener insuficiente hormona de crecimiento, testosterona u hormona tiroides.
-Para mujeres: están tus senos excesivamente largos, especialmente antes de tu periodo?
Se han incrementado desde el fin de la adolescencia? Realízate un chequeo por un déficit de progesterona, añadido a una posible carencia de testosterona y hormona de crecimiento.
-Para hombres: están tus pectorales alargados?
Consulte con su médico sobre suplementos de testosterona para bloquear la tardía conversión de testosterona en estradiol.
-Están tus caderas muy grandes?
Tu cuerpo puede estar produciendo mucha insulina, la cual libera azúcar en el cuerpo. Eliminando azúcar y regulando cortisol, la tiroides, la hormona de crecimiento, y la testosterona pueden ser la respuesta. Los fisiólogos ven a algunos adultos de hoy con el síndrome X, un desorden de resistencia a la insulina que puede requerir una dieta baja en carbohidratos, alta en proteínas y alta en vegetales.
-Tienes llantas o rollitos? Chequee los niveles de la hormona de crecimiento y la testosterona.
-Tienes mucha grasa atrás de la rodilla?
El exceso de peso en esta área puede sugerir una deficiencia de tiroidismo.
-Están tus piernas y tobillos hinchados (edema)?
Los niveles bajos de tiroides pueden ser los culpables, sumado a un exceso de aldosterona, la cual retiene agua y sal en el cuerpo.
-Particularmente si tú planeas perder peso en gran medida, tienes problemas de salud o tomas medicinas regularmente, consulte con su médico para una evaluación antes de comenzar un programa de bajar de peso.
Comentarios
Hola, normalmente si estoy algo hinchadita de la cara,aunque soy de cara con forma redonda, gracias por la información,la verdad es que aunque haga ejercicios , mi cara sigue igual, cachetonsita diría mi madre.
Hola,
Que interesante artìculo, creo que muchos de los problemas que enfrentamos de manera individual y como sociedad es por falta de conocimiento, de cultura. que bueno que aquì publican estos artìculos tan interesantes pues conozco gente que se mata de hambre y de igual forma se pasa haciendo ejercicio y no logran ver un resultado satisfactorio de perdida de peso.
Esta es una excelente orientaciòn para saber las causas verdaderas de la obesidad.