Ya con solo leer el título a muchos les están llegando millones de pensamientos a su mente. La cantidad de veces que seguramente te ha pasado. Si eres vendedor puedes pensar que es muy común que le pase a tu perfil. Sin embargo, si has estado buscando audiencia con tu jefe y te cancela minutos antes, también has de haber sentido el desprecio al ser rechazado.
Seguramente en alguna ocasión, has escuchado que es de mala educación o mala etiqueta no cancelar tu asistencia a un evento social con tiempo. Esto es porque las personas han invertido en tu lugar, tu alimento, bebida, etc. Lo mismo pasa cuando una persona no toma en cuenta el tiempo de los demás y decide cancelarte un minuto antes o simplemente no llegar. Siempre hay emergencias, y siempre pueden alargarse juntas o imprevistos fuera de tu control. En este caso, lo que siempre funciona es tener una comunicación sólida para evitar debilitar la relación con la persona a la que le estás cancelando.
Tips para mantener tu liderazgo si tienes que cancelar de último momento:
1. Si te das cuenta de que tu cita se está alargando, manda un mensaje a la persona con quien tienes la reunión, haciéndole ver que vas tarde. Pregunta si te puede atender después o si prefiere re agendar otro día. Evita simplemente no aparecer, esto puede mandar una señal de que no te interesa. Si deciden re agendar, asegúrate tomar la iniciativa de poner nueva fecha. Asumir que es responsabilidad de la otra persona, sigue mandando un mensaje que es mucho menos importante para ti. Recuerda que nunca sabes cuando seas tú el interesado en generar una reunión. Crear relaciones sólidas y fortalecidas, es la clave para fortalecer tu liderazgo.
2. Revisa tu agenda al inicio del día y reflexiona si estás siendo realista con los tiempos asignados a cada evento. Hoy que no estamos saliendo a visitas presenciales, es muy fácil agendar una cita tras otra y no cuidar minutos o espacios entre una sesión y otra y esto puede afectar tu puntualidad.
3. Si desde un inicio no estás interesado en agendar la reunión, no aceptes asistir sabiendo que estás forzando una situación. Miles de veces por compromiso hemos dicho que sí y cuando realmente no sentimos que sea algo que queremos, será muy fácil cambiar de opinión por algo más que tenga prioridad verdadera. Estuve platicando con una persona de Alemania, me comentó que en su país, SI es Si y No es No. Se ha dado cuenta de que aquí en México, la gente no sabe decir que No para muchas cosas, por temor a quedar mal. Sin embargo, creo que es peor cancelar de ultimo minuto que desde un principio poner las cosas claras y directas.
4. Ponte en los zapatos de la otra persona, se empático y compasivo y evita pensar desde tu razón. Cuando alguien está buscando colaboración, está asignando tiempo y esfuerzo para dedicarle una intención a esa reunión. Si tu solo piensas en tu agenda, en tu tiempo, en tu ocupación y prioridad, estás debilitando tu presencia ejecutiva. Estás actuando desde el Hacer sin Estar y tu liderazgo se ve poco auténtico. Cómo quieres ser recordado con tu marca personal, cómo alguien que conecta o qué solo le importa su propio entorno.
Tener una presencia ejecutiva con cuerpo, alma y mente, es tener claridad de cómo tus acciones, comportamiento y decisiones impactan a quien te rodea. Si intentas mandar un mensaje de liderazgo y no cuidas estos pequeños detalles, vas debilitando tu presencia, y eventualmente el lugar que hayas construido en el tiempo para influir en los demás.
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