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El domingo pasado en el sermón de la misa escuche hablar sobre la diferencia entre tener PODER y ganar AUTORIDAD, realmente me sorprendí  de la diferencia  inmensa que hay entre cada concepto.

Poder  es  la capacidad de elegir o influir sobre  cualquier resultado, es actitud superior por sobre cualquier circunstancia o momento.  

Autoridad  por el contrario es  prestigio ganado por una persona u organización gracias a su calidad o competencia, la aceptación de la autoridad viene de abajo hacia arriba, es decir, se puede recibir algún puesto de trabajo que lleva implícito un alto grado de autoridad, mas sin embargo ésta tendrá la efectividad necesaria, siempre y cuando los subordinados, la acepten como tal de acuerdo al respeto con el que se actúa.

Poder obliga y exige voluntades;  autoridad conquista sentimientos, el poder no acepta intervenciones,  mas sin en cambio autoridad invita a la participación.

El poder difícilmente disfrutará de adecuados canales de comunicación y una verdadera autoridad llevará con orgullo la distinción de diálogo permanente. El poder es impuesto por obligación mientras que la autoridad es ganada a pulso por convencimiento.

Déjame contarte una leyenda de la mitología griega...

“La espada de Dámocles”

Dámocles era un cortesano en el palacio de Dionisio II, el rey que gobernaba Siracusa en el siglo IV a.C. Como muchos otros miembros de la corte, Damocles halagaba constantemente al rey, con la esperanza de que éste le diera una posición de más poder en la corte.

Un día Damocles hablaba con el rey, y le dijo lo que envidiaba su posición: Como hombre de poder y autoridad rodeado de magnificencia, eres un hombre verdaderamente afortunado. Al escuchar estas palabras, Dionisio no dudó en ofrecerle un trato: Damocles, dado que esta vida te deslumbra, ¿querrías saborearla por ti mismo durante un día para así juzgar la realidad de tus palabras?  

Sin dudarlo un instante, Damocles aceptó el trato.

Al día siguiente, Dámocles desde primera hora ocupó la posición del rey, mientras Dionisio y el resto de cortesanos lo atendían como si de cualquier otro día se tratase. Llegando el día a su fin, mientras estaba tomando la cena, Damocles alzó la vista para observar la pesada espada desnuda que tenía sobre la cabeza, cuando se percató de que pendía de la crin de un caballo. En ese momento Dámocles sufrió un ataque de pánico, ante el cual, Dionisio reaccionó calmándolo.
Dámocles preguntó a Dionisio la razón por la cual una espada tan pesada colgaba de algo tan frágil. El rey le explicó que la espada sobre su cabeza representaba lo que realmente es el poder. Desde la distancia, el poder es una cosa deseada por muchos por ser una situación de privilegio, en la que al estar por encima de los demás te sientes único. Pero cuando uno se acerca a esa situación de poder, puede observar claramente el peligro que ostenta esa posición.

Sin embargo la autoridad es un privilegio que se va adquiriendo al pasar del tiempo cuando nuestro comportamiento es honesto, compartido, empático y dócil ante las necesidades de los demás, cuando verdaderamente vamos creando un sincero sentimiento de respeto ante nuestro comportamiento y rectitud.

Cuando enfermamos de poder se percibe claramente la inseguridad presente en todas nuestras acciones, así como la fragilidad del cargo. No sólo por la inseguridad causada ante la posibilidad de perder la posición, sino también los probables daños colaterales muchas veces imprevisibles.

Vivir con autoridad adquirida es digno de admirarse puesto que denota el respeto de los demás hacia nuestro diario actuar, significa que hemos ganado el reconocimiento por nuestro trato equitativo y solidario.

Por último quiero citar a 1 Pedro 5: 2-3:

“Cuiden de las ovejas de Dios que han sido puestas a su cargo; háganlo de buena voluntad, como Dios quiere, y no por obligación ni por ambición de dinero. Realicen su trabajo de buena gana, no como si ustedes fueran los dueños de los que están a su cuidado, sino procurando ser un ejemplo para ellos”.

Que tengan una hermosa semana colmada de autoridad.

Dios les Bendice!!!!!

Hasta el próximo martes.