Blogs

La palabra “terapia” está cada vez más en boca de todos y todas y ello conlleva, en algunos casos, que nos acostumbremos a utilizar esta palabra como “sufijo” de cualquier actividad que alguien, por el motivo que sea, considere beneficiosa.

 Ciertamente parece que estamos viviendo una época de despertar a nuevas formas de conciencia y vínculo, hacia los demás y, sobre todo,  hacia uno mismo. Surgen profesiones dirigidas a paliar el sufrimiento de personas que merecen atención desde diversos planos: físico, afectivo, psicológico, espiritual, energético…

 El arteterapia no es exclusivamente el uso del arte como una actividad para sentirse bien, sino que plantea el uso de la creación artística en un encuadre psicoterapéutico.

La persona que lo practica inicia un proceso terapéutico, de mayor o menor tiempo, para adentrarse en su mundo interior acompañado del arteterapeuta y a través de su propia obra.

Sabemos que la práctica artística puede reportar muchos beneficios a quien la ejerce tales como: desarrollo de la creatividad, satisfacción personal, potenciador de habilidades, expresión y comunicación, etc.

Sin embargo todo ello no es suficiente para ser considerado una terapia. La Terapia del Arte tiene en cuenta los aspectos favorables de la práctica artística, además de ser conducida por un profesional del Arteterapia con formación y conocimientos de la teoría de la psicología.

Esta profesión del ámbito asistencial nació alrededor de los años sesentas como respuesta a unas necesidades sociales concretas.

Tras el descubrimiento del psicoanálisis y del inconsciente, el estudio de la mente humana expande sus horizontes y algunos descubren la importancia de la imagen para establecer un vínculo con algunas escenas internas difíciles de verbalizar.

 Desde entonces hasta ahora, la profesión ha ido tomando forma y consistencia hasta estar considerada una de las principales profesiones dentro del ámbito de la salud mental en algunos países como Gran Bretaña.

 En Arte terapia no se tienen en cuenta las habilidades artísticas del participante, sino la capacidad de expresión a través de la obra y el proceso.

Tener una sesión de Arte Terapia por lo menos, es una experiencia que sin duda, detona algún tipo de transformación interna.

También está muy extendido su uso en el contexto del crecimiento personal y del autoconocimiento para aquellas personas que desean ganar en salud psicoemocional a través de su creatividad.

Desde cualquier orientación, el uso del Arte terapia está cada vez más presente en el ámbito de la salud salud mental, acompañamiento hospitalario, enfermedades degenerativas y paliativos, oncología, discapacidad, etc); en el ámbito social ( abuso y maltrato, exclusión social, niños y adolescentes desatendidos, toxicomanía y dependencias, inmigración e interculturalidad, etc) y en el ámbito de la educación (dificultades en el aprendizaje).

¡Sin duda, es y será más y más, una  de las terapias del siglo XXI!

Margarita