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¿PROBLEMAS CON LAS MATEMÁTICAS? DISCALCULIA

Psicóloga Educativa, Rosa María Chico Del Olmo

Las matemáticas son un tema que a muchos atormenta, no sólo al momento de ejecutarlas, arrastramos este temor por mucho tiempo, tanto en la vida académica como en la cotidiana, pero pocos sabemos que esta problemática es ocasionada por una dificultad para realizar cálculos, denominada “Discalculia”. Este trastorno presume una incapacidad para aprender a realizar operaciones aritméticas y confusiones numéricas inusuales. Esta alteración es poco conocida e infrecuente, lo que suele dificultar que sea detectada por el entorno del niño. Hay que tener presente que el campo formativo de Pensamiento Matemático habla de propiciar en los niños el razonamiento mediante las experiencias que viven al interactuar con su entorno, desarrollando nociones numéricas, espaciales y temporales, que les permiten avanzar en la construcción de nociones matemáticas más complejas. Los niños con dificultades específicas en el proceso del aprendizaje del cálculo presentan una serie de errores y dificultades que son la clave para detectar el trastorno: • Confusión en la correspondencia uno a uno (contar y relacionar objetos de una colección). • Dificultad para constituir un orden estable (contar requiere repetir los nombres de los números en el mismo orden). • Memoria inmediata dispersa (dificultad de retención de último número nombrado). • Dificultad al discriminar objetos que no pertenecen a una colección determinada. • Dificultades para la realización de cálculo mental. • Escritura incorrecta de los números. Debemos tener cuidado en identificar este trastorno, ya que se produce en niños con una capacidad intelectual normal, es decir, la capacidad para afrontar los aprendizajes escolares de los primeros años es la adecuada, excepto para el área específica del razonamiento numérico y la capacidad aritmética. Además, las dificultades en la capacidad de cálculo no se explican por una lesión o enfermedad que el niño haya sufrido, sino que se trata (en la mayoría de los casos) de un trastorno en el desarrollo del niño. Normalmente el niño que sufre un trastorno de habilidades matemáticas suele presentar otras alteraciones del aprendizaje, como la dislexia, es decir, puede aparecer asociado al trastorno de dificultades en su escritura y lectura. Sin la adecuada intervención, el niño con discalculia puede arrastrar, a lo largo de su escolarización, serias dificultades aritméticas que pueden provocar su fracaso, o incluso, abandono escolar. Mediante actividades para diagnosticar la discalculia debemos diferenciar el tipo de error que el niño comete: • Grafico – numérico • Del cálculo • De razonamiento Sea cual sea el tipo, el tratamiento es individual y, en un primer momento, el niño deberá realizar actividades junto a un maestro de apoyo para encaminarlo a la práctica escolar. Los ejercicios de rehabilitación y reeducación matemática deben presentar, forzosamente, un punto atractivo que genere interés que predisponga al razonamiento, posteriormente generar el empleo progresivo de objetos que se relacionan con un símbolo numérico para instaurar en él la noción de cantidad y la exactitud del razonamiento. Recuerda que entre más apliques situaciones didácticas de carácter matemático adquirirán destreza en el empleo de relaciones cuantitativas, la meta en los niños con esta dificultad. De igual forma, es necesario mantener en las actividades los principios de cantidad, orden, tamaño espacio y distancia y, sobre todo, con el empleo de material concreto, posteriormente hay que enseñarle el lenguaje de la aritmética: significado de los signos, disposición de los números, secuencia de pasos en el cálculo y solución de problemas. Sugerencias de juegos para superar las dificultades de este trastorno Memoria de fichas. Enseñar brevemente una ficha y pedir al niño que la identifique por su forma. En la realización del ejercicio, interviene la memoria inmediata y el reconocimiento visual de números. Reconocimiento de números. Dar una ficha cualquiera y que el niño identifique los números de cada una de las mitades, así como el que completan entre las dos. Implica el reconocimiento mediante formas nemotécnicas (conjunto de trucos o estrategias lingüísticas para facilitar la memorización) de los primeros dígitos, activa el aprendizaje para iniciar al alumno y favorece su automatización por su fuerte influencia nemotécnica. Adivina adivinador: el maestro colocara en una caja distintos objetos y el alumno adivinara la cantidad de ellos dentro, se puede ir agregando o quitando uno a uno en presencia del niño y con ello generar la operatividad. Sabemos que es un trabajo que amerita mucha paciencia, pero con dedicación lograrás minimizar las dificultades que tu alumno presente, sólo recuerda no generar estrés.