La vida no es tan breve que no nos deje tiempo para la cortesía. Ralph W. Emerson
Es increíble que en pleno siglo XXI no pensamos en tener buenas costumbres, ya hay pocas familias que se detienen a pensar en el tema. Podemos dejarles algo positivo a nuestros hijos para tener una mejor convivencia con los demás, pues no nada más existen los buenos modales porque son lindos, y la gente se ve bien aplicándolos, no es por eso, hay un trasfondo importante y es el saber convivir en una sociedad siendo más civilizados.
¿Qué son los buenos modales?
Los buenos modales demuestran nuestra consideración hacia los demás, como se mencionaba, nos distinguen del reino animal.
Los buenos modales no se aprenden automáticamente, lleva tiempo una vida de buena educación, después se transmiten para que los niños y adolescentes descubran que la dignidad y la amabilidad los harán convertirse en una persona más agradable. Estos atributos los ayudarán a triunfar y a ser individuos más felices. Es por eso que debemos enseñar a nuestros hijos a comportarse debidamente.
Por ejemplo, es de buenos modales no emitir en público sonidos intencionales como eructos o aires. Las buenas maneras acompañan todos los gestos que hacen que nuestro prójimo se sienta bien junto a nosotros. Nos lleva a evitar las palabras, acciones o sonidos que pueden hacer sentir incómodos a los demás y nos convierten en miembros dignos de nuestra sociedad civilizada.
¿Cómo enseñaremos a los chicos a tener buenas maneras?
Las buenas maneras, como la mayoría de los valores deben practicarse en el hogar, en la escuela no siempre es el lugar propicio para enseñarlas, se pueden reforzar, pero no se enseñan.
El hogar es el factor más importante de enseñanza.
Esto se transmite con el ejemplo, mostrando buenos modales en casa todos los días. Los niños practican lo que ven. Y como padres hay que empezar con el proceso desde que son pequeñitos.
Del Manual de Carreño…
Hace algunos años apareció un libro titulado “Manual de Urbanidad y Buenas Maneras” del autor venezolano Manuel Antonio Carreño en 1853.
Ese libro fue seguido por familias enteras en toda Latinoamérica, para fomentar las buenas costumbres y lo importante de su aplicación. Al paso de los años se han considerado obsoletos muchos de los capítulos tratados en el libro porque las civilizaciones han cambiado algunos hábitos, pero también varios de los temas tratados en ese manual son importantes; por la puntuación que se hace de tener ciertos comportamientos en la mesa, el aseo, algunas reglas de urbanidad, ciertos modos de conducirnos en sociedad, etc.
Que nunca estaría de más echarles un vistazo, aprender de las buenas maneras y seguirlas aplicando hoy en día en nuestra rutina de convivencia familiar.
La cortesía y los buenos modales abren las puertas a una vida adulta exitosa y feliz. Debemos proporcionarles a nuestros hijos las herramientas para que logren esa meta.
Comentarios
Angelina...
Se me habìa pasado este blog q va de la mano con tù màs reciente publicaciòn.
Te reìtero mi gusto por q se retomen estos temas, los buenos modales, las buenas maneras,
el saber conducirte en sociedad.
Es cierto, hace mucho siempre se escuchaba decir: "Chequemos el Manual d Carreño para saber como actuar en ciertos casos"...
Me parece q debieramos volver a checar el Manual y ver q se nos anda pasando por ahi en estas cuestiones.
Excelente blog.
tienes toda la razon , definitivamente los buenos modales simpre seran para los niños el reflejo de los papas, gracias por recordarnoslo.
otros adolescentes se creen que como son hijos de fulanito de tal tienen derecho a portarse mal.Ojo padres lo bueno esta en corregir a tiempo.
Es triste ver como se han olvidado los buenos modales entre los niños, adolescentes, jóvenes y hasta adultos. ¿Que stá sucediendo? Actualmente se pueden escuchar ess "malas palabras" que antes eran sólo característica entre hombres y sin la presencia de la mujer porque a la mujer se le respetaba. Actualmente las mujeres en una conversacion entre ellas o en presencia de los hombres usan un vocabulario lleno de "picardías" (como se decía en mi época) No se dan cuenta las mujeres actuales ¡cuanto han perdido de dignidad! y los hombres ya no respetan la presencia de la mujer. Es el pendulismo, a tanto machismo viene el famoso feminismo. Ni tan tan ni muy muy sino en el justo medio que no es mediocridad sino lo máximo de la cúspide.
Gracias Angelina por tu artículo. Me hizo recordar muchas cosa