Hablar de violencia nunca es fácil, pero si necesario.
Vivimos en un país en que tristemente 66 de cada 100 mujeres de 15 años y más han padecido algún incidente de violencia por su pareja u otra persona.Hablar de violencia nunca es fácil, pero si necesario. Vivimos en un país en que tristemente 66 de cada 100 mujeres de 15 años y más han padecido algún incidente de violencia por su pareja u otra persona.
Y más triste aún es saber que la violencia de padres contra hijos afecta al 40% de las familias mexicanas.
Ahora bien, no todo lo que se dice o escuchamos sobre violencia es cierto. Es por ello que hoy quiero compartir los principales mitos y realidades que existen en torno a ella, y que probablemente tu o alguien cercano los está viviendo:
- La violencia familiar se da en familias de escasos recursos: FALSO. En todas las clases sociales sin importar raza, religión o formación profesional se dan episodios de violencia.
- La conducta violenta es natural del ser humano: FALSO. Se dice que algunas personas son violentas desde que nacen: ¡esto no es cierto! Por naturaleza tendemos al bien y no al mal. Se han realizado estudios en niños muy pequeños, y cuando alguno de ellos llora o se cae, los otros de inmediato lo ayudan. La violencia es algo que se aprende: o a través de la cultura o de las instituciones o de la familia o escuela o de las comunidades o de los medios de comunicación.
- La violencia intrafamiliar es un asunto privado que no le importa a nadie más: FALSO Únicamente 14 de cada 100 hogares donde hay violencia solicitan ayuda, y en el 70% se repiten los actos violentos. Cualquier acto que dañe la integridad física o psicológica de una persona sea fuera o dentro de la familia tiene que ser denunciado y se debe buscar ayuda.
- Es mejor que aguanten si tienen hijos, ya que los pueden dañar: FALSO. Una convivencia familiar violenta daña el desarrollo, conductas y salud de la misma familia.
- A algunas mujeres les gusta que les peguen, sino se marcharían: FALSO. Vuelven porque no tienen solvencia económica, por temor, miedo a perder a sus hijos y otras razones, pero a ninguna mujer le gusta que la lastimen.
- Es necesario el castigo como parte de una buena educación. Hay que pegarles sino no entienden: FALSO La violencia daña más de lo que pensamos, si los hijos la sufren de pequeños es muy probable que repitan esta conducta con su propia familia en el futuro.
- Las agresiones físicas son mas peligrosas que las psíquicas: TOTALMENTE FALSO. Son igual o más dañinas. La mujer y los hijos pierden su autoestima y la capacidad de decidir por si solas.
- El agresor es un enfermo, no es culpable de lo que hace: FALSO. En hombre puede sufrir tensiones, irritabilidad, ser explosivo y perder el control mediante agresiones o insultos, pero esto no significa que está enfermo y que no es culpable. Generalmente se presentan estas explosiones y después viene el arrepentimiento, promete no volver a hacerlo, se le perdona y al poco tiempo vuelve a explotar.
- La mujer es la que provoca la agresión: FALSO. Se dice que la forma en que se viste, habla o actúa es signo de provocación, ¡no hay justificación alguna para un acto de violencia!
- Son incidente derivados por una perdida de control momentánea: FALSO. Sabes por qué? La violencia es un círculo. No es producto de un problema ocasional, ya que con ésta no desaparece el problema. Y muy importante: es una “cadena”: el papá llega cansado, irritado, enojado: es violento física o verbalmente con la mamá. Esta queda devaluada y dolida, y en muchas ocasiones se desquita con los hijos: les grita, golpea o regaña. ¿Que pasa con estos niños? Esta tensión vivida en casa la llevan al día siguiente y los demás días a la escuela: son agresivos con sus compañeros y maestros. Nunca termina, es un círculo que crece cada día más.
- El maltrato es un hecho aislado: TOTALMENTE FALSO. Va acompañado de otras situaciones.
Y la última gran realidad es que la principal causa de violencia es el alcoholismo y la drogadicción. Al no tener control sobre si mismos recurren a actos violentos.
Te pido que reflexiones sobre estos mitos, que no te dejes llevar por ellos, y que, si estás viviendo una situación de violencia, de inmediato busque ayuda con alguien cercano o un profesional.
Recuerda: el valiente vive hasta que el cobarde quiere.
Lucía Legorreta de Cervantes Presidenta Nacional de CEFIM, Centro de Estudios y Formación Integral de la Mujer. cervantes.lucia@gmail.com www.lucialegorreta.com. ; Facebook: Lucia Legorreta
Comentarios