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Alrededor del tema de la Sexualidad y el Erotismo se han construido por ignorancia o miedo una gran cantidad de mitos, mentiras e incluso de leyendas. Como aquella del joven que por tanto masturbarse se volvió loco y después se aventó al vacío. Al hallar su cuerpo inerte descubrieron que tenía pelos en la palma de la mano. Absurdo ¿verdad?. Sin embargo historias como éstas se llegan a repetir una y otra vez hasta convertirse en mitos que muchos toman como hechos reales.
Pero hablemos de los mitos sexuales más comunes o al menos los más conocidos o repetidos en la actualidad. Para analizarlos partiremos de la definición de la palabra, que el Dr. David Barrios Martínez define muy bien en su libro “La Molécula que Revoluciona la Sexualidad” y nos dice que Mito viene de una expresión latina que significa fábula y tiene como acepción invento o ficción alegórica, esto es, idealización o creación de un personaje o suceso”. “El mito no es una burda mentira” sino una “verdad” difundida y por lo general aceptada socialmente. Para Barrios, un mito requiere tener elementos de credibilidad y se difunden sin cuestionamientos racionales; los mitos “suelen ser aceptados como dogmas que no requieren demostración”.
Así pues los mitos sexuales son “verdades a medias” que crean confusión y algunas veces angustia en relación a las expresiones erótico-afectivas de las personas.

MITO
1.-La masturbación enloquece a las personas y los aleja de sus parejas. Es nociva para la salud.
REALIDAD
El autoerotismo puede ser saludable porque disminuye la ansiedad y libera el deseo sexual. Es una forma de conocerse y relajarse.
MITO
2.- Sólo los homosexuales practican el sexo anal.
REALIDAD
El sexo anal no es practicado por todos los homosexuales y más aun hay parejas heterosexuales que gustan de esta práctica.
MITO
3.- Entre mayor es el tamaño del pene, mayor es la satisfacción de la pareja.
REALIDAD
En el coito, el tamaño del pene no es tan importante como la habilidad para ser un buen amante y saber estimular a la pareja
MITO
4.- El erotismo es sólo para los jóvenes.
REALIDAD
El erotismo es algo inherente al ser humano y puede perdurar por toda la vida.
MITO
5.- Las mujeres que tiene relaciones sexuales caminan diferente a las que no las tienen, o bien les crecen las caderas
REALIDAD
No hay nada que evidencie que una mujer tiene vida sexual activa ya que se trata de una experiencia íntima y muy personal.
MITO
6.- Puedes “adivinar” el tamaño del pene de un hombre de acuerdo al número de zapato que calza o el tamaño de su mano.
REALIDAD
No existe ningún estudio que avale relación alguna entre el tamaño del pene y el del pie o de la mano.
MITO
7.- Las parejas que bailan bien son excelentes amantes.
REALIDAD
Si bien el bailar puede ser un acto muy sensual no es necesariamente garantía de gozar el placer sexual. Puedes ser pésimo bailarín y excelente amante o viceversa.
MITO
8.- Los hombres calvos son más potentes sexualmente.
REALIDAD
Seguramente este mito lo generó algún peloncito para sacarle algún beneficio a su calvicie. Lo cierto es que no tiene nada que ver una cosa con otra.
MITO
9.- Los hombres que se preocupan mucho por su aspecto físico son gays.
REALIDAD
Hoy hombres y mujeres, se ocupan de su aspecto físico por igual independientemente de su orientación sexual.
MITO
10.- Es imposible embarazarse si tienes relaciones sexuales durante la menstruación.
REALIDAD
Es muy difícil pero puede ocurrir un embarazo si se tiene relaciones desprotegidas aun menstruando.
MITO
11.- El viagra afecta el sistema cardiovascular y origina muertes.
REALIDAD
Está demostrada la seguridad medicamentosa de sus componentes y se han verificado sus efectos protectores para el corazón.
MITO
12.- Las mujeres no tienen gran necesidad de sexo mientras que los hombres no pueden vivir sin tener relaciones sexuales.
REALIDAD
Hombres y mujeres tiene necesidades sexuales, aunque nuestros ritmos y formas de expresión varían de persona a persona.
MITO
13.- Los hombres son infieles por naturaleza y las mujeres lo contrario.
REALIDAD
Hombres y mujeres pueden ser tan fieles o infieles como decidan y se lo permitan.

Y como éstos podríamos seguir narrando una enorme cantidad de mitos sexuales; seguramente tú recordarás algunos. Lo importante es estar informados y antes de creer rumores preguntar a los científicos (médicos sexólogos) que puedan sacarte de dudas.
Los mitos pueden ser nocivos para la salud sexual.

Y tú ¿qué opinas?