El maltrato físico es visible y fácil de identificar debido a que los golpes dejan marcas evidentes en el cuerpo de la víctima.
Sin embargo, existe otro tipo de maltrato difícil de reconocer, me refiero al emocional, su reconocimiento se dificulta debido a que no deja inscripción en el cuerpo y debido también a que la víctima (y el observador), no tienen los elementos para relacionar o identificar los daños. Podríamos decir que es un maltrato invisible, existe pero no se ve.
Un niño puede estar gravemente dañado en su interior y sin embargo no mostrar cicatrices exteriores. Puede estar sufriendo el efecto paralizante de sentirse despreciable, sin comprender ni poder explicar el porqué.
Ejemplos del maltrato emocional infantil son, la violencia verbal crónica, la falta de respuesta emocional a las necesidades de contacto afectivo, el constante bloqueo de las iniciativas infantiles, la ausencia de contacto corporal, la indiferencia frente a sus estados de ánimo, hacerlos testigos de la violencia cotidiana entre los padres.
Decirle a un niño de manera constante y recurrente que es un idiota, que no sirve para nada, que no debió nacer; que no llore y se aguante como los hombres; presionarlo o avergonzarlo con tal de que sobresalga en la escuela, en el deporte o en la vida social; que el padre nunca lo abrace ni lo bese porque “no se vaya a hacer homosexual”; que los papás divorciados le obliguen a tomar partido por alguno de los dos.
Que la mamá diga en presencia de su hija: “Me chocan los días festivos porque se suspenden las clases y me tengo que quedar todo el día con esta chiquilla”, son más que golpes, son balas, son dardos directos al corazón, a la psique, al espíritu, que originan heridas difíciles de curar, que en ocasiones duran toda la vida y que matan poco a poco el alma del ser humano. El maltrato invisible es peligroso por lo silencioso y paulatino del daño que provoca.
Comentarios
Efectivamente estoy deacuerdo, tristemente los padres no nos damos cuenta de el daño permanente que le hacemos a nuestros hijos, que lo unico que piden es atención, amor, cuidados y respeto. Cuando por nuestro estres y problemas ya sea económicos, de pareja, de trabajo, existenciales, arrasamos con el autoestima de esas pequeñas hojitas en blanco, que llegaron a este mundo llenos de inocencia y pureza, y que dependen tanto de nosotros. Tenemos que hacer una VALORACION A FONDO de que tanto contribuimos para tener niños con un gran autoestima, o que tanto estamos contribuyendo para terminar con su autoestima y que sean jovenes con tantos problemas como los que hoy vivimos en la sociedad.