“Leer es para la mente lo que el ejercicio físico es para el cuerpo” nos dice Joseph Addison, ensayista y poeta inglés. ¿Por qué entonces no lo hacemos? Cuidamos nuestra alimentación y hacemos ejercicio, pero nuestra mente se queda sin gasolina.
Es triste saber que el promedio de libro que leemos los mexicanos al año no llega a dos libros. Es por ello, que hoy quiero recordar contigo los grandes beneficios que trae la lectura.
La empresa de edición y corrección profesional Expert Editor establece catorce beneficios de la lectura tanto para el cuerpo como para la mente.
La lectura estimula las conexiones neuronales existentes en el cerebro.
Leer poesía compleja, por ejemplo, Shakespeare, ayuda al cerebro a permanecer elástico y activo.
Mantener el cerebro en funcionamiento con actividades como la lectura, disminuye el deterioro mental de los ancianos en un 32%.
Cuando lees un libro te obliga a recordar muchas cosas, personajes, trama o eventos. Leer un libro crea nuevos recuerdos para tu cerebro, la memoria a corto plazo y la capacidad para recordar mejoran.
Un estudio demostró que los pacientes deprimidos mostraron una mejoría cuando se les recomendó leer historias en voz alta, se sintieron mejor y más positivos.
En el caso de la depresión, libros de autoayuda son un buen recurso porque las personas consiguen intervenciones de baja intensidad.
Hay estudios que han demostrado que la lectura puede reducir el estrés aproximadamente en un 68%.
Los ancianos que hacen juegos de desafío mental o leen libros de forma regular, pueden ser dos veces y media menos propensos a desarrollar alzhéimer.
Crear un ritual a la hora de acostarse, como leer, le hace ver a tu cuerpo que es hora de relajarse e ir a dormir. Esto solo se aplica a los libros de papel, ya que los electrónicos pueden tener el efecto contrario y mantenerte despierto, y hacer que tu calidad de sueño empeore.
Los niños que leen desarrollan una mayor capacidad para comprender conceptos abstractos, para aplicar la lógica, reconocer la causa y el efecto y para utilizar el juicio crítico.
Numerosos estudios han demostrado que los estudiantes que están expuestos a la lectura antes de preescolar tienen más probabilidades de hacerlo bien en todas las facetas de la educación formal.
Un libro para niños muestra un 50% más de palabras a un niño que al ver un programa de televisión-.
Los investigadores han descubierto que aquellos que leen acerca de los personajes que hacen algo tienen más probabilidades de hacer esa actividad en la vida real.
Identificarse con los personales de un libro ayuda a experimentar emociones, sensaciones y sentimientos que se tendrían en la vida real y con personas reales.
Te permite vivir nuevas experiencias, es un gran simulador de la realidad, nos abre la imaginación y es una gran acompañante para la soledad.
El ejemplo que demos como padres es vital para que nuestros hijos lean durante su vida.
Los beneficios son muchos, por lo que es indispensable cultivar este hábito, sin importar la edad o la condición del lector.
Lucía Legorreta de Cervantes Presidenta Nacional de CEFIM, Centro de Estudios y Formación Integral de la Mujer. cervantes.lucia@gmail.com www.lucialegorreta.com. Facebook: Lucia Legorreta
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