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¡Auch!, duelen y bastante,  los apegos son como piedritas en el zapato que no te dejan andar, te van obstaculizando el camino y se van comiendo tu tranquilidad, tu paz interior  y sobre todo te van apartando de tus ideales.

¿Y qué es un apego? Es sólo un estado mental que te provoca ansiedad, reacciones compulsivas a algo o a alguien, todo esto provocado por la falsa  idea de que sin “esos detallitos” no podremos alcanzar la felicidad y el éxito.

Como todo en ésta bendita vida existe el lado positivo y el negativo de los apegos. El punto positivo es el momento de placer, de gozo y emoción que se vive al disfrutar o  lograr aquello a lo que estás apegado. El punto negativo es la  amenaza y la tensión que siempre acompañan al apego. Luego entonces el apego te hace mil veces más vulnerable al desorden emocional pues te amenaza a cada segundo con robarte despiadadamente  tu paz.

Piensa en todo aquello por lo que no podrías vivir, ¿la pérdida de un familiar?, ¿tu auto último modelo?, ¿tu casa lujosa?, ¿tu importantísimo trabajo?, ¿tus cuentas bancarias?, ¿tus joyas?, esto que sigue dolerá mas ¿tus hijos? o ¿tu pareja?, pues bien todo lo anterior son APEGOS, ¡SI!  Te detienen, te bloquean, no te dejan avanzar, pero ¿es malo amar a mis hijos o a mi pareja o fascinarme con mi carro, etc.…? NO por supuesto que no es malo en tanto no lo vuelvas prioridad en tu vida, en tanto no lo conviertas en tu DIOS, en tanto no te empiece  a absorber tu tranquilidad y tu felicidad, desde el momento que te roba parte de tus pensamientos positivos y los conviertes en negativos entonces ya afectan y mucho tu estabilidad emocional.

Por ejemplo tienes hijos maravillosos sanos, estudiosos, responsables y tus pensamientos negativos te agobian como ¡hay si les pasa algo yo me muero, si se llegan a enfermar yo no podría seguir viviendo!,

Si tienes la fortuna de tener un lindo carro y te obsesiona que te lo maltraten, no quieres subir a nadie porque se maltrata y por ello ni tú misma lo disfrutas ALTO, estás convirtiéndote en esclava de tus apegos.

Las personas, nuestros seres amados muy amados, son prestados, no nos pertenecen y por lo tanto no deben ser responsables de nuestra felicidad debemos aprender a compartir la felicidad con ellos pero dejando sus alas libres y sin ataduras, no debemos agobiarlos con nuestros pensamientos negativos que solo detonan nuestra inseguridad y el miedo inmenso a sentirnos  solas e infelices y donde quedan los sentimientos de los demás. (Que egoísmo extremo ¿no crees?).

En cuanto a lo material desde el momento en que te ata la inseguridad de perder un buen trabajo, una casa, un auto etc... Éste miedo te obstaculiza y no te deja disfrutar lo que tienes hoy, entonces cuando llegue el mañana será demasiado tarde para poderlo vivir pues tus fuerzas y energía habrán mermado sobremanera, y entonces de que sirvió atesorar celosamente, ¿fue benéfico en algún momento o solo perdiste tiempo innecesario? Las cosas materiales hay que vivirlas como van sin atesorar, a las personas hay que disfrutarlas con libertad y con pensamientos positivos demostrándoles todo nuestro amor y nuestra dedicación pero sin asfixiar.

Te sugiero lo siguiente para acabar con los apegos mal encaminados:

• No te aferres al mito de que sin algo o alguien no puedes ser feliz, recuerda que cada quien brilla con luz propia, cuando lo descubras tus apegos se irán debilitando.
• En tanto aprendas a disfrutar de tus apegos pero sin aferrarte ni agobiarte, verás que puedes ser feliz sin utilizar la fuerza de no querer soltar.
• Aprende a disfrutar el brillo de miles de estrellas sin estacionarte en una sola y veras que la luz es más intensa, recuerda que los apegos mal encaminados son solo  ilusión y egoísmo pues muchas veces pensamos que todo nos pertenece.

Te comparto lo siguiente, léelo detenidamente y reflexiónalo:

“Si el rico no puede acceder al reino del gozo y de la alegría, no es porque quiere ser malo, sino porque decide ser ciego”.

Anthony de Mello (Sacerdote jesuita famoso por sus libros y conferencias de espiritualidad).

Que Dios te bendiga y te de sabiduría para entender que los apegos no son malos pero debes aprender a vivir con ellos y NO para ellos.

Linda y espiritual semana.