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Lola Beltrán

La paloma del Rosario, así llamaban a Lucila Beltrán Ruiz,  “LOLA LA GRANDE, LOLA BELTRAN, LOLA DE MÉXICO,
La paloma del Rosario volvía, año con año con su mejor amiga: “La Prieta Linda”, con Juan Gabriel, con amores como su marido, Alfredo Leal y mas tarde con sus hijos, a cantar; LAS MAÑANITAS a la Virgen del Rosario en Sinaloa, su tierra natal, donde cultiva esa voz que la hiciera darle la vuelta al mundo, pisar los escenarios más lejanos y reservados a lo mejor de la música internacional

Terminó sus estudios como secretaria en Rosario Sinaloa, para viajar al día siguiente, con la idea, de no volver ,  para convertirse en una gran cantante.

Era la época de Oro de la radio en México, a todos los rincones del país llegaban ya las voces del momento desde el estudio en la ciudad de México de la XEW, con artistas como Pedro  Vargas, el flaco de oro Agustín Lara, Miguel Aceves Mejía, Pedro Vargas.

 Lola, atraída por esa sed de éxito, toco las puertas de la gran XEW,  fue contratada como secretaria y al poco tiempo Miguel Aceves Mejía, la impulsó a los escenarios de la estación mas escuchada de la época, fue el mismo Miguel Aceves Mejía quien le cambiara el nombre a LOLA BELTRÁN.

Fue la intérprete del pueblo de México y vivió eternamente agradecida.

Poco a poco, vinieron las oportunidades internacionales, La Casa Blanca ante el presidente Nixon, John F, Kennedy, En España ante el Rey Juan Carlos, en Inglaterra ante una muy joven y estrenada Reina Isabel, el francés Charles de Gaulle e invitada de honor del Generalísimo Franco...dueña de si misma, orgullosa interprete de la canción Vernácula Mexicana, no discriminó países o ideas, ideologías, ni razas.

Tenia una meta, un sueño era:  representar a México con su voz e interpretación, sin importar que fueran largas las travesías en barco, mas tarde en avión, con comodidades o sin ellas, a Lola Beltrán este sueño, la llevó hasta donde hubiera que poner en alto, muy en alto el nombre de México, logrando con ello, posicionar su voz, su linaje, su inigualable meneo de manos, característica de su presencia escénica.

En su amplísima trayectoria cientos de reconocimientos y premios le fueron otorgados entre ellos: el TORFEO DE ORO A LA OLIMPIA en PARIS

Grabó más de 79 discos...

El cine Mexicano de la época,  la aclamó constantemente para enriquecer escenas de cantina, tan socorridas en la época de ORO DEL CINE MEXICANCO.

Al lado de Pedro Vargas, Luis Aguilar, Miguel Aceves Mejía su mentor, Amalia Mendoza y Lucha Villa.

Más de cuartenta Films, inolvidables.
En 1964,  la película  “CUCURUCUCUCU PALOMA”, la catapulta internacionalmente, de ahí, nace en el mundo,  la necesidad de tenerla en los teatros mas importantes como San Petesburgo, El Conservatorio de Leningrado, los ojos del arte Internacional estan puestos en ella.

Bellas Artes a su vez abre de inmediato las puertas, y el finísimo telón de cristal de Tiffany, se levantó ante la música ranchera, ante LOLA LA GRANDE, LOLA BELTRÁN.

Lola Beltrán inunda con su arte,  un recinto utilizado tan solo para el ballet, opera y sinfónicas. Dando un  primerísimo lugar a la música popular, antes no otorgado.

Su muerte se lleno de misterio,o, de enredos: Testamentos sin terminar, hijos no reconocidos, abusos legales.

A los 64 años el 24 de marzo de 1996, es sorprendida con una embolia pulmonar.
Sus restos descansan en el panteón municipal de Rosario Sinaloa.

Una era se fue con ella, dejando puertas abiertas en los escenarios del mundo para la música popular mexicana y para las mujeres. Aquella secretaria había nacido para ser “Lola la Grande” ella es Lola Beltrán.

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