Publicado por Claudia Orduño el 11 de Octubre de 2010 a las 8:02am
El cerebro de una mujer es un misterio. Así decía el personaje de Benigno García en la premiada “Hable con ella” de Almodóvar; en realidad así es, somos todo un misterio. Somos tan polifacéticas, volubles, inspiración, damos protección, creamos hogares, construimos… ustedes saben que somos, aunque en ocasiones sea mas bien lo que hacemos; se dice que en la historia de la humanidad, las mujeres hemos jugado un papel (un trapo diría Mafalda) muy importante, y nuestra evolución va desde ser las defensoras del hogar, hasta las madres abnegadas, las revolucionarias, pero también las reinas, las consortes… hemos luchado batallas, hemos desatado algunas (recordemos a Helena de Troya) seguimos creando controversia y desatando batallas día con día. He llegado a pensar, que al igual que Aquiles precisamente perdió a causa de Helena y su talón endeble, así las mujeres también hemos sido el talón de Aquiles de la historia.Estoy convencida que todo ha sido por falta de comunicación, porque pensamos que los hombres pueden leer mentes, porque creemos que nosotras también leemos, porque a pesar que hemos evolucionado en muchos aspectos gracias a nuestra determinación (pensemos en las mujeres que no emitían su voto hace menos de 100 años)… pero les voy a decir un secreto muy importante: nosotras mismas… ¡NO SABEMOS LO QUE QUEREMOS!.Repito, esto es un secreto a voces… nos cambiamos el color del cabello casi cada mes, nos cambiamos de ropa al menos 3 veces antes de salir de casa, cambiamos de trabajo, de gimnasio, de ciudad, de país, de casa, ¡de vida! Porque nos sabemos conocedoras de nuestro potencial y capacidades y en esta búsqueda constante de querer mas y mejor rompemos el patrón del seguimiento en nuestro comportamiento… ¡uff! ¿Qué queremos realmente? En el aspecto personal, cambiamos como las fases de la luna. En el aspecto de conocernos, cambiamos casi cada mes, así que es imposible saberlo; pero hay una base en nuestro desarrollo que expone que las mujeres queremos ser escuchadas y queremos ser tomadas en cuenta. En el mundo “moderno” en que vivimos, queremos ser respetadas, honradas, y que se nos den los espacios y oportunidades para desarrollarnos y seguir creciendo. (¡Sonó a discurso político!).Pero viéndolo desde un punto de vista critico, en verdad hemos peleado porque se respete ese derecho de lucha constante. Si, somos complicadas. Si, es cierto que cada fin de mes estamos insoportables. Si, es verdad que somos delicadas (algunas…) y muy en el fondo de nuestro ser sabemos que en ocasiones hacemos la vida de cuadritos a quienes nos rodean.Al final del día comprendemos perfectamente bien que también nos hacemos un manojo de sentimientos que no nos permiten explicarnos de la mejor manera. Pero solo debemos pensar en lo mucho que hemos logrado en la historia… recordemos nada mas a las mujeres lideres de opinión de la independencia de nuestro país, recordemos a Elizabeth de Inglaterra, su precursora Emmeline Pankust, Isadora Duncan, Margaret Tatcher, Coco Chanel, Edith Piaf, La madre Teresa de Calcuta, Indira Ghandi, Evita Perón. Pensemos en Frida Kahlo, Marie Curie, Alfonsina Storni, Gabriela Mistral, Leonora Carrington, Michelle Bachellet, Maria Goeppert, Gerti Cory, Ana Bolena, Nefertiti, Elena Poniatowska … No me alcanzaría la columna para nombrar a todas las mujeres que en diversos ámbitos lograron abrir brecha para futuras generaciones, destacarse y ser inolvidables. Mujeres que no se quedaron pensando que las cosas caerían del cielo y que a pesar de todas las vicisitudes, supieron valerse y ser únicas (“Nadie es indispensable en la vida, pero, para ser irremplazables, debemos ser diferentes y únicos”). Y bueno, la lista de las mujeres que siguen luchando hasta la fecha, es también afortunadamente, interminable.Todo esto me hace pensar entonces que, podemos llegar a hacer una reflexión sobre nuestros pasos en la tierra. ¿Qué pensaría Helen Keller sobre cuando lloramos por que alguien nos rompió el corazón? ¿qué pensaría Chanel cuando nos desilusionamos porque no recibimos el apoyo que esperábamos en algún proyecto? ¿Recuerdan la historia de vida de Oprah?. ¿Han leído alguna vez sobre las mujeres Tarahumaras de la sierra de Chihuahua en nuestro país?. Si a lo largo de la historia las mujeres hemos luchado por ser agentes de cambio, ¿nosotras, las mujeres “modernas” que esperamos para dejar huella?. Solo se requiere, voluntad.No tenemos que ser super-heroinas. Basta con despertar y reflexionar... al final de cuentas, seamos honestas, si sabemos lo que queremos, y cuando lo sabemos, lo obtenemos… ¿o no?.Continuará…
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Querida Claudia... Sólo las mujeres que nos conocemos, sabemos exactamente lo que queremos.
Muchas gracias... me encantó tu artículo. Ten una hermosa y feliz vida! Que logres todo lo que te propongas y quieras! *Gena.
Comentarios
Muchas gracias... me encantó tu artículo. Ten una hermosa y feliz vida! Que logres todo lo que te propongas y quieras! *Gena.