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La perdida de un ser querido es una de las pruebas más duras de la vida. Aunque la muerte no se puede remediar si podemos aprender a sobrellevarla lo mejor posible. Cuando muere alguien que amamos las reacciones emocionales que experimentamos suelen ser muy intensas y hasta parecer irracionales pero son NORMALES.

Aunque el duelo pasa por una serie de etapas y en cada persona éstas se manifiestan con diferente intensidad, lo primero que generalmente se siente es incapacidad para aceptar la perdida y negación.

Después de un tiempo es de esperar que el llanto, la conmoción y los lamentos se conviertan en rabia y se intente buscar un culpable de nuestro dolor. Luego suele venir una fase de intenso sufrimiento, alejamiento y desinterés por las actividades que antes generaban placer y es a partir de los seis meses que poco a poco el duelo se va interiorizando y se inicia el proceso de aceptación y recuperación, aunque se sigan pasando días tristes o bajos.

¿Cómo puedes consolar a una persona por la perdida de un ser querido?

Dejándolo hablar y liberar todos los sentimientos de rabia, tristeza, culpa y ansiedad que tiene. Al contrario de lo que comúnmente se aconseja, es importante que estimules a la persona a que hable de la persona muerta y de la relación que tuvo con el o ella, porque esto es muy reparador.

¿Cómo puedes ayudarte a ti misma a superar la muerte de un ser querido?

Recuerda que el dolor no desaparece de inmediato, así que no te presiones. Es normal dormir y comer mal al principio pero si se prolonga conviene ir con un especialista para recuperar el sueño y el apetito. También es recomendable adoptar una rutina de vida y reincorporarse poco a poco a alguna actividad para combatir el sentimiento de soledad. Hacer ejercicio para aliviar la tensión y descansar con mayor facilidad en la noche es muy bueno y por ultimo habla de tu ser querido con amigos y familiares y acepta que esa persona aunque físicamente ya no está va a vivir eternamente en tu corazón.