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¿Cómo estás? hoy te quiero a contar una historia.

Laura era una gran ejecutiva, trabajaba en una empresa internacional como directora de un departamento muy importante y tenía un magnífico sueldo, pero ¿sabes por qué estaba en consulta conmigo?

Me dio permiso de contarte, así que te dejaré una de nuestras enriquecedoras conversaciones.

Laura: Sé que tengo un gran salario y un puesto muy importante, pero no tengo tiempo para estar con mis hijos y eso me duele mucho… Ese es el precio si los quiero tener bien.

Yola: Me dices que tienes un puesto muy importante y que tienes una gran solvencia económica, pero que no tienes tiempo para tus hijos, ¿y eso cómo te hace sentir?

Se quedó en silencio un gran rato... Suspiró y en su rostro se reflejaba una gran confusión. Con la voz entrecortada me contestó.

Laura: Me siento triste. ¡Debería de estar feliz! Acabamos de regresar de vacaciones mi esposo, mis dos hijos y yo, porque económicamente estoy excelentemente bien.

Yola: Si tuvieras que aconsejar sobre esto a otra persona, ¿qué le dirías?

Laura: Ups, ya se por dónde vas Yola, pero no puedo cambiarme de trabajo, de verdad necesitamos el dinero, mi esposo gana mucho menos que yo.

Con una sonrisa, le dije: No me has contestado, si tuvieras que aconsejar sobre esto a otra persona, ¿qué le dirías?

Su mirada se quedó fija, su semblante empezó a cambiar, sus ojos se llenaron de lágrimas…

Laura: No me lo vas a creer, pero soy una persona muy insegura y en este trabajo me siento como pez en el agua, ¡con una seguridad enorme! Si la gente que está a mi cargo se diera cuenta de lo pequeña que me siento en este momento… Siento que me estoy perdiendo de mucho, bueno no sé ni lo que digo, pero ¿me entiendes verdad?

Sabía lo que me quería decir, pero insistí en la pregunta, Laura no quería escuchar de su propia voz la respuesta, por eso la evadía.

Yola: Laura, sé que ganas mucho y que tienes un puesto muy importante en el que te sientes muy segura, eres una persona muy reconocida y respetada en esa empresa pero ¿realmente eres feliz?

Rodaron las lágrimas que había estado conteniendo.

Laura: No sé qué decirte, mi trabajo me encanta, pero en realidad no me siento del todo feliz con mi vida. Ahora que me lo dices siento en el pecho un gran dolor, pero no sé qué hacer… La verdad, ¡no quiero contestar la pregunta que me has estado haciendo!

Me hubiera gustado nunca haber llegado a esta empresa tan maravillosa, me ha dado una paz económica increíble, pero no tengo tiempo para nada.

Laura se dio cuenta de que no tenía tiempo para ella ni para su esposo y tampoco para sus hijos. La empresa le daba paz económica, pero no libertad financiera, no era libre porque dejaba su vida entera en la empresa, trabajando para otros.

Yola: ¿Qué pasaría si solo por un momento te permitieras imaginar una posibilidad diferente?

Laura: Ok, te contesto lo que tanto me preguntas. Qué difícil es hablar de uno mismo, pero en fin, si tuviera que aconsejar a alguien le diría: Sé que tienes que trabajar para solventar los gastos de tu casa, pero el tiempo se pasa muy rápido y el día de mañana tus hijos te van a decir: “Yo no quería tanto dinero, yo quería una mamá presente, ¿qué puedes hacer diferente para poder estar con tus hijos?”

En ese momento Laura se soltó llorando. Cargaba con un tema de autoestima y no se sentía con la confianza para hacer algo diferente.

Yola: ¿Cómo te gustaría verte en 5 años?

Laura: Ups. Quisiera tener mi negocio propio, para tener tiempo para mí y para mi familia

Ella veía ese sueño muy lejos y entonces le conté que Ricardo GP tenía un entrenamiento justo para ella que la podía ayudar mucho.

Claro que puso todos los peros y el tiempo era uno de ellos. Tardó en decidirse de tomar la decisión para salir del punto muerto en el que estaba, pero al final tomó el entrenamiento “Sal de la Montaña Rusa del Dinero”.  https://go.hotmart.com/H9348352F?ap=ad7a

¿Estás en una situación como Laura?

Después de un par de años vino feliz a verme.

Me contó que después de tomar el entrenamiento su vida cambió, primero recuperó la confianza en ella misma, renunció a su trabajo y con el dinero que le dieron y algunos ahorros pusieron su esposo y ella un negocio.

Ahora tiene tiempo para ella y para su familia, a la cual poco a poco le está yendo mejor. Se veía completamente diferente a aquella Laura que me visitó por primera vez.

Hace una semana se cerraron las puertas del entrenamiento Sal de la Montaña Rusa del Dinero. ¡Pero no te preocupes!

Ricardo GP abrió de nuevo el entrenamiento porque NOS LO HAN PEDIDO MUCHÍSIMO. https://go.hotmart.com/H9348352F?ap=ad7a

¿Ya lo tienes? Estoy segura que me vas a preguntar:

“Yola, este entrenamiento, ¿REALMENTE vale la pena?” Te voy a decir algo, este entrenamiento tiene una garantía por 15 días de satisfacción ¡y no es para todos!

Es para gente que quiere:

Vivir libre, tranquila, segura y feliz

Recuperar el control de sus finanzas

Dejar de preocuparse por dinero

Aprender a tener ingresos más altos sin necesidad de matarse trabajando

Comprometerse con vivir una vida mejor a la que vive en este momento

Este es el link.

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¡No te lo pierdas!

Laura dejó pasar un año y después lo lamentaba y decía: ¿Por qué no lo tomé antes? Y sonreía.

Recuerda que además, te voy a dar DOS BONOS, una visualización y una meditación que te ayudarán a conectar con tu niño interior y con lo que realmente quieres.

¡Toma acción ahora!

Un abrazo con mucho cariño

P.D. Mañana 10 de julio a las 12:00hrs.  hora CDMX Yolanda va a tener una entrevista con Ricardo GP con el tema “¿Por qué algunos tienen suerte y otros no?” https://www.facebook.com/TerapeutaYolandaPadilla/