Blogs

"Algunas personas comprenden el valor del valioso presente cuando aún son jóvenes. Otras lo comprenden en la madurez. Otras más, al alcanzar la vejez y algunas jamás lo comprenden. Puedo recibir el regalo perfecto cuando yo lo decida. Spencer Johnson."

Las Mujeres, un día salimos a encontrarnos con nuestro destino, ello implica buscar la felicidad, la paz, la tranquilidad, el amor, la transformación, los cambios, vencer, ascender, etc.

Así, en una jornada tomamos decisiones, en busca de nuestra felicidad, de nuestra dicha, de nuestro bienestar, para avanzar, para desarrollarnos y nos encontramos que dicha resolución, no es lo que esperábamos.

Asumimos entonces, las consecuencias de ello, es cuando pensamos “en nuestros monstruos”, esas situaciones “negativas”, de orden irregular, tales como la decepción, las lágrimas, la aflicción, el desencanto, nos sentimos perdidas ante una mala decisión.

Es todo un proceso que vivimos, lo platicamos, lo consultamos, buscamos y a veces no encontramos las respuestas y las salidas.

Pero hoy pienso, siempre estamos decidiendo, y nos podemos equivocar, ¿que no sería mejor que yo buscara un nuevo trayecto o recorrido para evitar un segundo desengaño?

Hay muchas lecciones que nos quedan de una mala decisión, y la primera es que la felicidad está en nosotras mismas y no afuera, que la vida entre más sencilla, mas se cuida, mas se goza.

Es también un nuevo momento para abrir otras posibilidades a nuestro entorno y  a nuestro mañana, como apreciar y darle el valor real a las experiencias vividas.

Hoy queremos surcar nuevos horizontes futuros, olvidarnos de las contrariedades y desesperanzas, que una mala decisión nos pudo haber dejado, recordando las palabras de Isha en su libro “Vivir para volar”, cuando dice… “La vida es una experiencia. Eso es todo lo que es. Abraza tu experiencia humana en todos sus colores, en todas sus complejidades, en su constante cambio de corriente…”