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Hoy te comparto una buena noticia, cada día somos más, cotidianamente se suman a esta sinergia otros que la van descubriendo, creamos magia, lo constato en los tweets que me mandan a @terryguindi y en www.realizate.com, mi gratitud a todos.

Existe una relación perfecta y una correspondencia entre la Ley de Atracción y la felicidad; apreciar que la pasión por lo que hacemos nos lleva al éxito, conocer a esta, darnos cuenta de lo que nos incita y mueve requiere de hacer una pausa, escuchar la música que llevamos dentro, es exactamente igual que esa melodía que permanentemente nos invita a bailar, a tararearla; cuando te tomas el tiempo que te permite sentir el ritmo de tu alma y de tu corazón empiezas a entender, te la aprendes y te quedas en esa mágica sintonía.

En algunas ocasiones que hemos sentido pena o vergüenza para bailar se requiere observar que lo que está sucediendo es que nos resistimos al estado natural que se encuentra en la danza cósmica, como todo, se inicia con el primer paso, cuando lo damos ya es difícil dar marcha atrás.

La felicidad y la alegría que emanan cuando cantamos, cuando bailamos nos pone en consonancia con la energía que hay a nuestro alrededor y también con aquella que existe en el universo, funciona entonces la Ley de Atracción; aquello que deseamos tiene la posibilidad de surgir más rápido, se presentan las causalidades, los encuentros, provocamos las sincronías a voluntad.

Compañera de viaje de siempre es la intuición la que permite crear la nueva realidad.

El ser apasionados, sentirnos de igual manera hace más sencillo conquistar las metas, superar los obstáculos que se presentan la mayor de las veces con el disfraz del miedo.

Los pensamientos son energía, enfocarnos en aquello que deseamos tener parte de la decisión que aportemos para dar el siguiente paso, la acción; soñar es gratis, pensar de manera positiva también, lo importante será entonces darle seguimiento detallado a esos pensamientos, a esos sueños.

Cuando se presentan los mismos resultados, cuando las soluciones se han venido postergando en relación al trabajo, al dinero o a la relaciones personales la reflexión adquiere su momento específico; enfrentar esta circunstancia sin temor a elegir o cambiar de ruta es la única alternativa.

Recuerda que existen múltiples opciones, que todo lo que va viene, lo más probable es que persistamos en el error de enviar a la vida mensajes equivocados.

Tener coraje, la voluntad suficiente para volver a empezar o replantear la estrategia son el principio de la inspiración, la esperanza se renueva, adquiere frescura, es una sensación equivalente a la que sentimos al bañarnos, al ponernos ropa limpia o nueva.

Todo es energía, esta sólo se transforma, es un principio básico y comprobado, somos nosotros de quienes depende nuestra honestidad y sinceridad para evaluar los logros alcanzados, los errores, hay que tomar conciencia y riesgos para poder salir de la zona de confort, la que nos hace sentir seguros y en ocasiones impide que avancemos.   

La pausa, la que permite replantear, observar ese camino recorrido que se bifurca en senderos inexplorados hace revivir la pasión, esa chispa que deseo enciendas hoy, entonces y sólo entonces confirmarás que la felicidad te lleva al éxito.