Cuando estamos en una relación estable, donde se demuestra amor a través de tantas formas, donde hay proyectos a futuro, la decisión de estar juntos porque se quiere y no porque se debe, es inevitable sentirse feliz. ¿Quién voluntariamente se compromete en una relación por que quiere sufrir?, creo que conscientemente…nadie.
Nos desenvolvemos con alegría en una relación que nos motiva a crecer como personas, cuando nuestra pareja nos hace sentir especiales y apoyadas. La vida es buena, y se llena de tonos vivos que invitan a sonreir todo el tiempo…
Hasta que…te pruebas tus jeans favoritos, y ves que ya no suben mas allá de las caderas, al vestido negro de cocktail la cremallera no le cierra a menos que contengas la respiración y pareciera que hasta los calcetines ahorcan tus tobillos. Si...quizás exagero con los calcetines, pero todo lo demás llega a ser muy común.
Debo admitir que me sentí impactada al leer que las parejas más estables y felices en su relación, tendían a subir de peso según un estudio realizado por la Universidad Metodista del Sur en Dallas, Estados Unidos. A esto yo lo llamo “los kilos de la felicidad”.
¿A qué puede deberse esta situación?...en una sola palabra HÁBITOS. Si bien el saber que tu pareja te acepta y ama tal como eres, puede tener el efecto de que te duermas en los laureles y dejes de cuidar tu peso. Los verdaderos asesinos de tu esfuerzo por mantenerte en línea son los hábitos que tu pareja y tú tienen dentro de la relación.
Si tus antojos repentinos a las 11 de la noche no están compuestos por una rebanada de jamón de pavo y un vaso de leche light y son los nachos con queso y los platanitos fritos con lechera los que compartes con tu bombón en medio de una película de acción, el “little black dress” nunca cerrará. Y si a esto le sumamos las salidas a cenar, los tragos (si, en plural) de vodka o tequila en las fiestas con amigos en común y cero ejercicio físico, tendrás que cambiar la talla de tus jeans pues los arrumacos y besitos a media noche no cuentan mucho.
Está bien que en el proceso de estabilidad de tu relación subas un poco de peso. Pero si te proyectas a futuro con tu pareja actual, y la báscula sigue aumentando. No creo que te sientas cómoda con la situación por mucho tiempo.
Busquen modificar los hábitos juntos, moderen las comidas grasosas e incrementen la actividad física. Pídele su apoyo si lo que quieres es mantenerte en forma, primero por ti, tu salud, y para que él no deje de quitarte los ojos de encima. Así la felicidad se mantendrá, y la línea también.
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