Publicado por Marifer Fors el 10 de Marzo de 2010 a las 8:50am
Mirror Girl. Jessica SalinasSamantha: Como saben, siempre me ha encantado mi cuerpo, tal y como es. Mis piernas son fantásticas, mis abdominales fuertes, mi trasero perfectoSamantha: pero he decidido, tras largas consideraciones, que me apetece tener unas tetas más grandes.Carrie: ¿Desde cuando?Samantha: Desde que he recibido una dosis de realidad... de aquí (saca una revista). Miren...Charlotte: ¿In Touch? ¿Sales ahí?Carrie: ¿y esa es tu fuente de realidad?Samantha: ¡Sí! Y tengo muchas fotos. Estas son mis tetas el miércoles ¿ven que pequeñas? Y aquí están el jueves otra vez, diminutas. Y a quí estoy merendando, ¡apenas se ven! Hace falta una lupa.Charlotte: Increíble...Carrie: Lo increíble es que fueras a Planet Hollywood, ¡arg!Diálogo de Sex and the CityMirror Girl es una singular crítica a la línea tradicional del concepto occidental de belleza femenina, particularente a la marcada por la postura mediática, que suele reforzar el estereotipo a partir del cultro exacerbado a la sofisticación y al consumo, obteniendo como consecuencia el clásico arquetipo social del rol femenino y la femenidad como accesorios en sí.El modelo vanguarditas de belleza femenina describe a la mujer actual como "fresca, atractiva, inteligente, autoconsciente, audaz en su forma de vestir y que sabe disfrutar de la vida". Esta descripción común en las revistas "feministas" de la actualidad, emite a través de sus modelos propuestos un carácter puramente oligárquico, condicionado a una mera representación del vivir como mujer, reforazando esto a través de la repetición de miles de imágenes sostenidas sobre esta fórmula.Jessica confronta al espectador de una manera particular a partir de la intención de las piezas que conforma esta exposición, proponiendo abandonar la seguridad formulista de lo femenino como ícono de belleza y adentrarse en el análisis de la autorreferencia en sus espejo dermatológicos, por ejemplo, poniendo en entredicho las asociaciones que determinan el cuerpo biológico, el género sexual y la mirada al otro.En otra pieza, el cuerpo, vaciado de su contenido, evacuado de todo menos de su etiqueta genérica, desafía todo los estereotipos de belleza posible. En una sociedad enamorada de manera narcisista con el reflejo de su imagen posible en los medios, las piezas cobran un sentido perturbador como respuesta protesta o desmentido. El estereotipo que sirve de modelo e imagen a seguir solo existe como producto de una sociedad qu teme apartarse de un espejo engañoso y de cierta manera, aún primitivo, para ver y comprender la complejidad del deseo, la fragilidad de las categoráis de género, la vejez, la muerte y el cambio.Francisco Benitez, Junio 2009
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