INFORMAR NO ES COMUNICAR

COMUNICACIÓN

 

 

Estamos perdiendo el rumbo, ya no hay comunicación

nos estamos limitando a la pura información.

Informamos lo que pasa, dónde vamos, lo que hicimos

qué le pasa a tal o a cual, la anécdota describimos.

 

Eso es sólo información, comunicar es decirnos

qué nos duele, qué pensamos, cómo amamos, qué sentimos.

Es expresar nuestro ser, qué nos sucede por dentro

qué tenemos en el alma, quiénes somos, qué queremos.

 

Ahora estamos conectados con cables por todos lados:

teléfonos, celulares, fax, internet y buzones

computadoras, e mail… Y el mundo globalizado

provoca cada vez más que estemos solos y aislados.

 

La información nos abruma, imposible ir a su paso

no hay modo de estar vigentes con tanto y tanto adelanto.

Empezamos a sentirnos más anónimos que nunca

y al no ser alguien para otros, la autoestima se derrumba.

 

Esta incomunicación conduce, a una gran oscuridad

cada vez es más complejo podernos comunicar.

No hay claridad en el verbo, hay enorme ambigüedad

se pierde la oralidad, no hay tiempo para escuchar.

 

Ya muy poco nos reunimos sólo para conversar

y mirarnos a los ojos y escuchar nuestra verdad.

Nos separan las presiones y las prisas y el estrés

nos vamos haciendo extraños y más solos cada vez.

 

El Amor no tiene espacio, muere de desnutrición

nos supera el egoísmo, nos maneja la tensión.

No hay tiempo para nosotros, menos para los demás

y la calidad de vida disminuye sin cesar.

 

Domina el denso silencio que enmudece el corazón

van ganando las batallas, los miedos, sobre el Amor

y el silencio nos aísla, mata sueños y confianza

nos hunde en la soledad y nos roba la esperanza.

 

 

¿Quiénes son ésos que amo? ¿Qué les está sucediendo?

¿A dónde voy con tal prisa? ¿Qué cosa estamos haciendo?

Y de llegar a algún lado de poco sirve o de nada

si no hay con quién compartirlo, la tristeza nos atrapa.

 

La depresión, las neurosis, desencanto y desaliento

son esas enfermedades que nos están consumiendo.

Y si no hacemos un alto y frenamos este vértigo

terminaremos perdidos, sin camino de regreso.

 

La Vida al final de cuentas es relación y servicio

y si esto no se cumple, perdemos centro y sentido.

Relacionarse y servir es la esencia del Amor

y éste se expresa hacia afuera con la comunicación.

 

Comunicarse es la clave para salvar nuestras vidas

para encontrar el sentido, la libertad, la armonía.

Volver de nuevo a tocarnos con el cuerpo y la palabra

tocarnos con la mirada y desnudar nuestras almas.

 

Comunicarnos a fondo con claridad y en persona

comunicar nuestros miedos, nuestros sueños, nuestras penas

comunicar la alegría, todos nuestros sentimientos

lo que nos causa vergüenza, lo que no nos atrevemos.

 

Comunicar es decirnos cosas que nos estimulan

y levantar la autoestima de quien decimos amar.

Es hacerle un bello espacio al Amor en nuestras vidas

darle tiempo, alimentarlo como nuestra prioridad.

 

Comunicarnos es luz, no hacerlo es oscuridad

la información va a la mente, pero no va al corazón

éste sólo se alimenta con la comunicación

que nos lleva a la conciencia, a la paz, y al sano Amor.

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