Permitámonos tener vecinos-amigos, en verdad tendremos muchos beneficios y esto generará cosas positivas a nuestro alrededor para vivir mejor.
En otras ciudades del mundo, más civilizadas, cuando alguien nuevo llega a vivir a un nuevo lugar, cada vecino se presenta y se da algún obsequio, después alguno hace una reunión, y así es cómo se van generando nuevas amistades. Es una forma de agradecer, convivir de una manera sana con los vecinos, no propongo que se haga igual, pero sí estaría bien que nos hagamos a la idea de entablar una relación cordial con nuestro “amigo” de al lado, y es que tal vez en la Provincia Mexicana se dé más esto, pero aquí en la Zona Metropolitana de nuestro país, se ha perdido por completo, no es posible que muchas veces, viviendo en un mismo edificio, jamás le dirijas la palabra a alguien, y no conozcas quien vive arriba o en el departamento de abajo, sólo porque piensas “que todos son unos pesados o no son de mi estatus”.
Ya es hora de dejar a un lado esos pensamientos. Quitemos ideas y prejuicios, hagamos algo por nosotros mismos, esto es para que los demás se beneficien sí, pero empezando con nuestro propio bienestar.
Por un momento hagamos el recorrido de nuestra cuadra o calle, o si vivimos en algún conjunto habitacional o en un edificio de departamentos, si sólo has saludado a tu vecino de enfrente y no sabes ni cómo se llama, es hora de que lo deleites con un regalito superfluo, y te presentes, no sabes cuándo irás a necesitar de él. Empecemos a crear nuestras propias comunidades como lo hacían nuestros antepasados o en la actualidad los extranjeros. No perdemos nada y sí ganaremos mucho.
Comentarios
Esta maravillosa experiencia la vivi, hace 20 anios en la ciudad de Monterrey. Casi todas las tardes sobretodo en el verano mis hijas salian a jugar con los vecinos.
Las mamas saliamos a vigilarlos y al mismo tiempo a conocernos y platicar.
Asi, llegamos a festejar , en la calle (era una cerrada) el dia del ninio, el dia de las madres, carne asada, y frijolitos charros cocinados por los papas y servidos por los ninios.
El dia del padre. Un festejo y convivencia similar, a la fecha, despues de 20 anios, seguimos teniendo muy buena amistas y convivencia entre vecinos.
Ahora son nuestros nietos los que nos visitan.
Me gusta mucho lo que dices y es además tan cierto. Yo tengo viviendo en el D.F, casi tres años y aunque he vivído en tres diferentes Estados de la República, y mis mejores amigas han sido Defeñas, me costó mucho trabajo adaptarme a esa parte que tu descibres. En un principio, cuando llegué a vivir al conjunto en el que vivo hoy, pensaba que eramos la única familia que en verdad existía. Me sentía viviéndo como en la película de MATRIX, en donde nada existe y todo es generado por una computadora. No veía nunca a ningún vecino, no había ruido y de no ser por un perrito que escuchaba ladrar en la casa vecina, hubiera jurado que éramos los únicos participantes en una especie de mundo virtual. Gracias a Dios, el tiempo pasó y fuí descubriendo de apoco a algunos de mis vecinos, con quienes llevo ahora una relación de cordialidad y de mutuo respeto, ahora sé, que no es MATRIX en donde vivo.
Muy bueno tu consejo, muy bueno.
Saludos para ti.