Publicado por Memo el 21 de Febrero de 2009 a las 4:58am
+ 2.5.- LA GRAN FIESTA. 2.7.- ECOS, por Tina Nieto+ Dramático relato de Esperanza... quiero que sea ficción+ Más calidad en AFLORA LA ESCRITORA QUE LLEVAS DENTROEsperanza nos presenta un crudo relato, aunque tratado con sutileza. Aún así, el drama es muy fuerte. ¡Cómo quisiera pensar que es ficción! No lo sé, pero la lectura me causa desazón. Sin embargo, sé que para muchas mujeres será un bálsamo para curar heridas. Con base en nuestro ejercicio de febrero, LOS CINCO SENTIDOS, aquí hay referencia al Oído, la Vista y el Tacto. Sin duda, se necesitan gran entereza y muchas bendiciones del Cielo para escribir así. Leamos pues:EL SECRETOEsperanzaSólo me quedan algunos instantes de inocencia, lo sé, lo presiento, veo algo horrible, corro y por más que lo intento, no escapo de las garras de la maldad.No Dios, qué es esto ¡dejame! soy una niña, solo quiero amor, no me lastimes ¡por favor!, dejame, mi piel, mi cuerpo, sienten un dolor indescriptible. Por mas que suplico, la maldad no se detiene.Tenía tanto miedo, lloraba, estaba sucia. ¡Es mi ¡culpa!, por pedir amor, nada más eso quiero, nada más eso.Callé, por miedo, era mi culpa, ¿por qué no corrí más rápido?, a lo mejor no me hubiera alcanzado. Cuando quise decirlo, sentía horror, era mala, muy mala, es mi.... No me creerá.Pasaron los días, siempre era igual, la maldad estaba tan cerca de mi, y yo no podía hacer nada. Me amenazaba, si dices algo, voy amatar a tu madre, o quizás les haga daño a tus hermanas. ¡No! por favor, suplicaba de rodillas, ellas, ¡No!Mi secreto, nadie lo sabrá, me lo llevaré hasta el día en que muera. Pero la maldad, hizo que mi vida, fuera insoportable, tristeza, dolor, miedo, angustia, ese era el pan de cada día, ¡por que fue mi culpa!Crecí, me defendí, ya no soy una niña, basta ya, ahora sí me creerán. La maldad se burló y me dijo, nunca te creerán nada, yo para ella soy la persona mas buena que hay en la tierra. Me alejé llorando, pero ya no pudo en ese momento, hacerme daño.Lloré y lloré hasta quedarme dormida. Nadie sabía lo que estaba pasando, eran ya cinco años de inmenso dolor. Tengo que ser fuerte, se lo voy a contar a mi mamá. Lo hice, me dijo hija mía, cuídate, no creo que él te haya hecho nada, lo soñaste, pero de todos modos, te voy a decir algo, nadie debe tocarte, en tus partes íntimas, absolutamente nadie, ¡cuídate!Entonces comprendí, que la única que podía hacer algo, era yo. Trataba de estar lo menos posible, en la casa, me volví, mas estudiosa, siempre luchando por el mejor lugar, me enfoque en la escuela, por que era el lugar donde estaba libre.Ahí juego, corro sin miedo. La maldad no esta cerca, mis maestros me dan reconocimientos a mis trabajos y mis amigos, me escuchan, me protegen, soy feliz, en la escuela.Terminé la Secundaria, qué felicidad, cumplí quince años, ahora sí, ya soy grande. Todo termino, llegué a casa, le entregue a mi mamá mi certificado y mi diploma, me abrazó, tan pero tan fuerte, que no me quería alejar de sus brazos, y le pregunte ¿me amas?Y con un beso, me dijo si mi niña, te amo.La maldad, sigue ahí, pero ya no puedo hacerme daño. Pasaron los años y mi secreto, está muy bien guardado, nadie lo sabrá jamás, pero desafortunadamente, todo lo que viví, en mi niñez, me marco para toda la vida.Me casé y la tranquilidad llegó, eso me decía noche a noche en la oscuridad de mi habitación, tenía cerca al verdadero amor, un joven de tan solo 24 años, dispuesto a amarme para toda la vida.El amor es el bálsamo más poderoso para sanar cualquier herida, por muy profunda que sea. Dios esta siempre presente en mi.
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Impotencia, rabia, profunda, tristeza, son algunos de los sentimientos que afloraron de mi alma cuando leí esta historia. Es real, no sé si experiencia propia de la autora, pero real en cada una de las víctimas de abuso. Me llegó como "la maldad" personifica al transgresor, convirtiéndola en personaje. Una agonía atrapada en una niña cuya fuerza interior le permitió, siendo ya mayor, escapar de las garras de "la maldad".
Me preocupó mucho el aspecto presentado de las madres que ignoran este problema, por miedo, por igorancia, por lo que fuera...el que me toca un hijo me lo como vivo, sea quien sea y llámese como se llame!
Me tocó la fibra maternal, y es que mi Mamá siempre me decía que si alguien me hacía algo que no me gustara le dijera, pasara lo que pasara, que ella me protegería del que sea...debe ser muy doloroso y triste no contar con el apoyo de Mamá. Realmente me llegó tu escrito Esperanza, quisiera entrar intempestivamente en tu relato para abrazar y proteger a esa tierna niña de "la maldad". Un abrazo.
Esperanza:
Como decirlo.... hay textos que es imposible calificarlos pos su calidad contextual, sintaxis, ritmo, cadencia verbal, ó calidad ortográfica
Hay textos que son tan profundos... tan elocuentes... tan llenos de emoción que no queda espacio más que para el sentido de su contenido.
Tu texto llena absolutamente todos los esquemas de la emoción.
es.... como bien dice Memo: "estremecedor"...
Yo también le pido a Dios que haya sido producto de tu imaginación... sin embargo esos casos existen... y es una realidad que no se puede ocultar ni bajo el brillo del sol...ni con la más apesadumbrada oscuridad.
Textos como este, no solamente nos llegan al corazón... también nos abre la conciencia y los ojos para cuidar bien y creerle siempre a nuestros hijos.
Verdad ó ficción lo que dices en tu texto... que Dios siempre guíe cada paso en tu camino.... y te conceda en cada acción tuya... el consuelo del perdón y la bendición de la alegría.... Estoy segura que así será.
Respetuosamente
Laura Eugenia
Vocabulario sencillo. Buen uso de la repiticion. Refleja tres etapas muy preciosas afectadas por la misma situacion. Líneas llenas de sentimientos, y definitivamente de esperanza. Bello como enmarca la relación entre las edades, y los roles.
Me gustó.
PASE A LEER TU ESCRITO ESPERANZA... FUERTE PERO REAL NOS ENSEÑA QUE DEVEMOS DE CUIDAR MAS A NUESTROS HIJOS Y ENSEÑARLOS, A CUIDARCE, NO SABE UNO DONDE ESTA LA MALDAD!!!!... SIEMPRE AHI CREER EN NUESTROS HIJOS SIEMPRE.. CON TODO RESPERO.. MECHE.
Felicidades Esperanza por la sencillez de tu vocabulario y la fluides de tu relato, tristemente tocas un tema que es mas comun de lo que se sabe, precisamente por el silencio....resultado del miedo, de la culpa, de la verguenza, sentimientos que dejan cicatrices tan profundas en el alma, que definitivamente marcan la vida de millones de mujeres, algunas como la proganista de refugian en el estudio, en el trabajo, en lo positivo y les sirve como impulso para triunfar en la vida, otras, las mas debiles, no encuentran salida, muchas, desvian sus inclinaciones sexuales, muchas mas, nunca llegan a tener una vida sexual sana, y por consecuencia sus relaciones fracasan una y otra vez, y otras mas se convierten en seres tan infelices, que su amargura alcanza a los seres que mas aman, pareja, hijos, amigos, y la vida se torna gris, llena de odio, resentimiento, como ella misma lo dice de maldad, sabes porque? porque para que haya un abusador, se necesita un abusado, y para que un abusador exista, tuvo que haber sido victima de un abusador tambien, y esta es una eterna cadena, que no se rompe, por miedo, por culpa, por verguenza, falsas todas, un malhechor debe ser denunciado, para que no haga mas dano, para que sea castigado, por el bien de la humanidad y por su propio bien, ojala mas mujeres que han sufrido de abuso sexual en su ninez, tengan el valor de denunciar a su agresor, porque solo asi podran colaborar para parar esta violencia sexual a la que millones de ninos y jovenes son sometidos, y mas aun parar a la violencia psicologica que provoca el miedo criminal al que se somete a una criatura inocente, BASTA YA! y si ademas en la conciencia deseamos perdonar, debemos hacerlo, pero no es lo mismo perdonar un acto de injusticia o ignorancia, que perdonar un acto tan vil como el abuso sexual, perdonar si, pero denunciar tambien, por incluso el bien del agresor, para que al menos tenga la oportunidad de arrependirse y pagar su culpa, antes que el creador lo llame a su presencia y le cobre la cuenta al precio mas alto que un ser humano puede pagar, al precio de no entrar en su reino, ojala Esperanza se apiade de su agresor, y deje de guardar el secreto nunca es tarde para darle la oportunidad a alguien de cambiar....
Esperanza...así se llama mi madre. Con la esperanza de que las heridas sean sanadas. Se exactamente lo que se siente, lo se porque a mí me sucedió. Tenía como ocho años y me sentía sucia, me sentía indigna. Es algo que te marca para siempre, jamás dije nada. ¿Para que? Viví en el completo abandono. No había seguridad, afecto, cariño...bueno ni lo más elemental como comida. A quien podría decirle...Muchos años después se lo dije a mi madre. "Me lo hubieras dicho" pero sé que hubiera sido lo mismo. Hace como dos meses volvi a ver a mi tío, aún siento enojo y rabia. Sanará algún día la herida? Tu relato es en verdad enriquecedor. Te abrazo.
Esperanza:
Felicidades por tu trabajo!!!! Un tema muy cruel, pero a veces tan comun dentro de nuestras propias familias.... Ojalá tu escrito sea parte de tu imaginación (que es lo que me gustaría), pero si fué real espero que Dios ya haya sanado tus heridas y puedas perdonar...
Querida Esperanza,
Quiero ser muy cuidadosa y respetuosa con lo que quiero dejar escrito aquí. Primero, porque desconozco si este relato es autobriográfico o producto de la imagnación, o eres portadora de otra voz que no ha podido gritar el gran dolor que este tema obivamente produce. Segundo, porque creo que este ejercicio de la escritura nos puede estar permitiendo a muchas de nosotras poder destapar nuestros corazones ante la luz del desahogo que da ligereza a nuestras cargas en la vida.
En la línea de la imgainación, me permitiré ponerle un nombre a esta muejer protagonista, ¿te parece bien Dulce?. Querida Dulce: comprendo muy bien el dolor que tiene la mujer adulta que hoy eres después de haber vivido la experiencia tan dolorosa que has sacado a la luz. En esos tiempos, tú eras solamente una niña, una niña que no podía defenderse de un hombre adulto. Una niña que vivió muy aterrada por muchos muchos años, creyendo que lo que había sucedido había sido por su culpa, pero no fue así. Cuando los seres humanos somos pequeños, no alcanzamos a comprender cómo personas que nos pueden querer nos pueden lastimar al mismo tiempo; vemos el mundo con una claridad preciosa. Tenemos la gran capacidad de ver más allá de las cosas: atrás del sol, atrás de las nubes, arriba del cielo, tal vez por eso, no tenemos ojos para ver la contraparte, que sería ausencia de todo ello. Y los seres humanos también contamos con muchas cosas especiales y mágicas en nuestra mente y en nuestro corazón. Cuando nuestra mente está lista para traer experiencias dolorosas a nuestro presente, es porque sabe que lo haremos con valentía, con seguridad y por supuesto con amor, ese amor que nos damos nosotros/as mismos/as.
Aunado al dolor físico y emocional, llegó la desolación que tal vez pudiste sentir al atrevarte acontarlo a alguién más y quien mejor que tu madre, y no te haya creido. ¿Sabes Dulce? a veces las madres no están preparadas para enfrentar una situación así, la mayoría de veces por miedo, miedo a pensar que lo más querido por ellas pueda haber sufrido tan terrible afectación. Y nuevamente, cuando la mente de esas madres aún no detecta que sea el momento preciso, les pone una cortina negra frente a su conciencia. A veces, esacortina logra recorrerse, a veces no. Pero afortunadamente, esa niña ha crecido, valientemente, saludable, tan es así que ahora a pesar de esto, logra vivir una vida placentera y plena de pareja y de familia. Querida Dulce, no hay palabras que existan para borrar la experiencia, pero hay muchos recursos en tu interior para rescatarte de ella. Ahora eres una sobreviviente del abuso sexual, y lo digo como tal, porque para exorcizar a un demonio, hay que gritarle por su nombre, para que toda la fuerza que existe dentro de tí, te ayude a que en lugar de ese demonio, aparezca la luz que te ayudaré a seguir de pie.
Queridas compañeras del taller de Retos, parte de mi trabajo es difundir la información que pueda ser una herramienta para hacernos de una mejor calidad de vida en todos los aspectos. Si esta historia es real o no en la vida de Esperanza, hagamos que la única verdad que exista en la vida de nuestros niños y niñas y en la propia sea de respeto y amor. Para recibir apoyo a víctimas por violencia sexual, pueden acudir a www.adivac.laneta.apc.org, en esta Organización brindan apoyo en diferntes áreas para que las personas que han vivido esta experiencia, recuperen su integridad y continúen su vida de la mejor manera que les sea posible. Pueden visitar www.caleidoscopia.org.mx; www.caleidoscopia.com, esta Organización ofrece una serie de talleres sobre sexualidad enfocados a la prevención de abuso para niños y niñas y en temas en general, para lograr el bienestar en nuestra vida sexual. Y pueden visitar www.letraese.org.mx, Organización que ofrece también información sobre temas de salud sexual.
Querida Esperanza, recibe un afectuoso abrazo de mi parte, y te felicito por escribir tan claro ya sea en la ficción o en la realidad...
Esperanza: Elegiste un tema fuerte, pero desafortunadamente no tan poco frecuente como quisieramos. Te felicito porque se entiende a la perfección a qué te refieres. Me impactó, y comparto el deseo de que todo sea producto de tu imaginación.
Felicidades por tu talento. Te dejo un gran abrazo, y todo mi cariño.
Comentarios
Me preocupó mucho el aspecto presentado de las madres que ignoran este problema, por miedo, por igorancia, por lo que fuera...el que me toca un hijo me lo como vivo, sea quien sea y llámese como se llame!
Me tocó la fibra maternal, y es que mi Mamá siempre me decía que si alguien me hacía algo que no me gustara le dijera, pasara lo que pasara, que ella me protegería del que sea...debe ser muy doloroso y triste no contar con el apoyo de Mamá. Realmente me llegó tu escrito Esperanza, quisiera entrar intempestivamente en tu relato para abrazar y proteger a esa tierna niña de "la maldad". Un abrazo.
Como decirlo.... hay textos que es imposible calificarlos pos su calidad contextual, sintaxis, ritmo, cadencia verbal, ó calidad ortográfica
Hay textos que son tan profundos... tan elocuentes... tan llenos de emoción que no queda espacio más que para el sentido de su contenido.
Tu texto llena absolutamente todos los esquemas de la emoción.
es.... como bien dice Memo: "estremecedor"...
Yo también le pido a Dios que haya sido producto de tu imaginación... sin embargo esos casos existen... y es una realidad que no se puede ocultar ni bajo el brillo del sol...ni con la más apesadumbrada oscuridad.
Textos como este, no solamente nos llegan al corazón... también nos abre la conciencia y los ojos para cuidar bien y creerle siempre a nuestros hijos.
Verdad ó ficción lo que dices en tu texto... que Dios siempre guíe cada paso en tu camino.... y te conceda en cada acción tuya... el consuelo del perdón y la bendición de la alegría.... Estoy segura que así será.
Respetuosamente
Laura Eugenia
Me gustó.
Esperanza...así se llama mi madre. Con la esperanza de que las heridas sean sanadas. Se exactamente lo que se siente, lo se porque a mí me sucedió. Tenía como ocho años y me sentía sucia, me sentía indigna. Es algo que te marca para siempre, jamás dije nada. ¿Para que? Viví en el completo abandono. No había seguridad, afecto, cariño...bueno ni lo más elemental como comida. A quien podría decirle...Muchos años después se lo dije a mi madre. "Me lo hubieras dicho" pero sé que hubiera sido lo mismo. Hace como dos meses volvi a ver a mi tío, aún siento enojo y rabia. Sanará algún día la herida? Tu relato es en verdad enriquecedor. Te abrazo.
Felicidades por tu trabajo!!!! Un tema muy cruel, pero a veces tan comun dentro de nuestras propias familias.... Ojalá tu escrito sea parte de tu imaginación (que es lo que me gustaría), pero si fué real espero que Dios ya haya sanado tus heridas y puedas perdonar...
Quiero ser muy cuidadosa y respetuosa con lo que quiero dejar escrito aquí. Primero, porque desconozco si este relato es autobriográfico o producto de la imagnación, o eres portadora de otra voz que no ha podido gritar el gran dolor que este tema obivamente produce. Segundo, porque creo que este ejercicio de la escritura nos puede estar permitiendo a muchas de nosotras poder destapar nuestros corazones ante la luz del desahogo que da ligereza a nuestras cargas en la vida.
En la línea de la imgainación, me permitiré ponerle un nombre a esta muejer protagonista, ¿te parece bien Dulce?. Querida Dulce: comprendo muy bien el dolor que tiene la mujer adulta que hoy eres después de haber vivido la experiencia tan dolorosa que has sacado a la luz. En esos tiempos, tú eras solamente una niña, una niña que no podía defenderse de un hombre adulto. Una niña que vivió muy aterrada por muchos muchos años, creyendo que lo que había sucedido había sido por su culpa, pero no fue así. Cuando los seres humanos somos pequeños, no alcanzamos a comprender cómo personas que nos pueden querer nos pueden lastimar al mismo tiempo; vemos el mundo con una claridad preciosa. Tenemos la gran capacidad de ver más allá de las cosas: atrás del sol, atrás de las nubes, arriba del cielo, tal vez por eso, no tenemos ojos para ver la contraparte, que sería ausencia de todo ello. Y los seres humanos también contamos con muchas cosas especiales y mágicas en nuestra mente y en nuestro corazón. Cuando nuestra mente está lista para traer experiencias dolorosas a nuestro presente, es porque sabe que lo haremos con valentía, con seguridad y por supuesto con amor, ese amor que nos damos nosotros/as mismos/as.
Aunado al dolor físico y emocional, llegó la desolación que tal vez pudiste sentir al atrevarte acontarlo a alguién más y quien mejor que tu madre, y no te haya creido. ¿Sabes Dulce? a veces las madres no están preparadas para enfrentar una situación así, la mayoría de veces por miedo, miedo a pensar que lo más querido por ellas pueda haber sufrido tan terrible afectación. Y nuevamente, cuando la mente de esas madres aún no detecta que sea el momento preciso, les pone una cortina negra frente a su conciencia. A veces, esacortina logra recorrerse, a veces no. Pero afortunadamente, esa niña ha crecido, valientemente, saludable, tan es así que ahora a pesar de esto, logra vivir una vida placentera y plena de pareja y de familia. Querida Dulce, no hay palabras que existan para borrar la experiencia, pero hay muchos recursos en tu interior para rescatarte de ella. Ahora eres una sobreviviente del abuso sexual, y lo digo como tal, porque para exorcizar a un demonio, hay que gritarle por su nombre, para que toda la fuerza que existe dentro de tí, te ayude a que en lugar de ese demonio, aparezca la luz que te ayudaré a seguir de pie.
Queridas compañeras del taller de Retos, parte de mi trabajo es difundir la información que pueda ser una herramienta para hacernos de una mejor calidad de vida en todos los aspectos. Si esta historia es real o no en la vida de Esperanza, hagamos que la única verdad que exista en la vida de nuestros niños y niñas y en la propia sea de respeto y amor. Para recibir apoyo a víctimas por violencia sexual, pueden acudir a www.adivac.laneta.apc.org, en esta Organización brindan apoyo en diferntes áreas para que las personas que han vivido esta experiencia, recuperen su integridad y continúen su vida de la mejor manera que les sea posible. Pueden visitar www.caleidoscopia.org.mx; www.caleidoscopia.com, esta Organización ofrece una serie de talleres sobre sexualidad enfocados a la prevención de abuso para niños y niñas y en temas en general, para lograr el bienestar en nuestra vida sexual. Y pueden visitar www.letraese.org.mx, Organización que ofrece también información sobre temas de salud sexual.
Querida Esperanza, recibe un afectuoso abrazo de mi parte, y te felicito por escribir tan claro ya sea en la ficción o en la realidad...
Felicidades por tu talento. Te dejo un gran abrazo, y todo mi cariño.
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