Enfrentar los duelos en la vida es una forma de pasar las hojas de tu vida de experiencias pasadas que forman una parte importante de tu vida, pero que en este momento ya no pueden sostenerse.
No enfrentar los duelos de una manera adecuada nos lleva a sufrimientos más allá de los límites de la capacidad para expandir al máximo tus potencialidades de vida.
No enfrentar los duelos es llevar una carga pesada de experiencias de la niñez, de la adolescencia, con los padres, las parejas y también con los hijos cuando se habla de duelos de relación.
No enfrentar los duelos está en relación directa con la manera en cómo vivimos en el momento presente nuestra vida de hoy atados en el ayer, en un experiencia que fue, pero hoy, ya no está.
No enfrentar los duelos es esconder las posibilidades para realizar un proyecto de vida mejor, contar con mejores posibilidades de vida y de abrir experiencias para retomar y enfrentar la vida en el ahora: sin esa pareja, sin esa casa, sin esa madre, sin esos hermanos, sin ese trabajo.
No enfrentar los duelos corresponde a sobrevivir una vida de angustia y ansiedad y la depresión, además de someternos a Emociones que Matan como bien apunta el Dr. Don Colbert.
En mi libro cómo enfrentar los duelos y las pérdidas:un camino hacia la libertad emocional, puedes conocer más sobre este proceso tan importante. La condiciones del duelo, afrontar los sentimientos, cómo abrir nuevas posibilidades y sobre todo la manera en la que estás viviendo tu vida en el hoy.
El Counseling es un servicio que promovemos abiertamente en Cecreto y que proporciona herramientas para cerrar duelos y enfrentar las emociones.
Y, la magia de la tecnología nos permite realizarlo en línea.
Ponte en contacto con nosotros Ana Giorgana
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Comentarios
Gracias Ana, por compartir esta información, la llave o la decisión para afrontar un duelo solo la tenemos nosotros o soltamos o nos quedamos anclados en el hubiera, tuve la experiencia de trabajar 5 dueles en mi vida en el 2012, operación de miomas que no fue necesaria, terminación laboral despúes de 11 años, terminar una relación de 5 años en unión libre, un accidente con gas butáno con quemaduras de 2do y tercer grado, y para cerrar con broche el suicidio de un hermano, yo apenas iba asimilando que Dios me dio otra oportunidad, que lo que se habia terminado era doloroso y que tenia que trabajarlo con ayuda profesional, sin embargo tantos duelos fue muy dificil, como aceptar mi cuerpo con cicatrices que jamás podre borrar, que la persona con la que decidí formar una familia ya no iba a estar en esos momentos dificiles conmigo, que tenia que recuperarme y levantarme de pie y continuar mi vida, tuve que buscar por iniciativa propia ayuda profesional tanto en terapias con psicologo como terapias de rehabilitación y la parte espiritual me ayudo enormemente, así como la lectura y poder platicar a otras personas que cuando hay fe, cuando hay voluntad y que es mejor vivir que morir en vida arrastrando un pasado pisado y los hubieras ya no existen, solo el presente de frente.