Estamos viviendo en una paradoja en nuestra sociedad, pasamos los días tratando de hacer todo lo que se necesita, proyectos, contestar cientos de mails, teléfono incansable, resolviendo situaciones … y si alguien nos preguntará que nos gustaría sentir… en el fondo lo que todos queremos es sentir serenidad, tranquilidad y paz interior.
Empiezan las vacaciones, con ellas esperamos tener algunos momentos de calma y quietud, para restaurar nuestra energía mental y física.
Buscamos la tranquilidad en el afuera, esperando que todas las condiciones sean las correctas y la verdad es que lo que buscamos está adentro de nosotros mismas.
Hay algunos pasos para conseguirla:
v Medita.
En la vida nuestros pensamientos determinan el estado de nuestra mente, añadiendo felicidad o causando frustración. Como no tenemos control de la mayoría de nuestros pensamientos, hay muchas técnicas, pero la que es más efectiva es la meditación.
Tan sólo 20 minutos al día, pueden restablecer nuestro centro emocional y permitirnos tener la cabeza fría para los retos cotidianos.
v Si puedes hacer algo… qué esperas, si no entrega tus preocupaciones al Universo.
Cada vez que te des cuenta que estás preocupada por una situación en la cual no tienes control, escríbela y deposítala en tu “caja de preocupaciones” en el momento que la dejas, ya no es tu problema… lo sueltas y confías en que se resolverá de la mejor manera.
Haz tu parte y lo demás suéltalo, y sabe que se resolverá de la mejor manera para todos.
v No te cargues los problemas de otros en tus hombros.
Es maravilloso sentir compasión y querer ayudar a todos los demás que están pasando por un momento difícil.
El asunto es que nos pasamos la vida tratando de componer lo del personaje de junto y poco hacemos con lo nuestro.
Si puedes hacer algo… hazlo, si no, puedes mandarle un pensamiento, una oración, o darle una palabra esperanza.
v No te dejes arrastrar por la culpa
Todos de una u otra manera hemos hecho cosas de las que no nos sentimos orgullosas, si pudiéramos cambiarlo seguramente lo haríamos, pero esto no se puede.
Lo pasado se fue, así que ante tus errores rectifica, perdona, aprende.
La culpa es una de las emociones que más paz nos quita.
v Termina lo que empezaste
Hay un tipo especial en la memoria que es la responsable de estarnos recordando los objetivos que no alcanzamos, lo que nos propusimos y no hicimos.
Parece que nacimos para empezar y terminar las cosas, porque cuando lo hacemos nos genera una deliciosa sensación de uffff … misión cumplida… y esto nos genera mucha tranquilidad.
Y cómo puedes saber que estás experimentado paz interior:
- Disfrutas cada momento.
- Pierdes el interés de juzgar a otros.
- Dejas de interpretar las acciones de los demás…
- Falta de interés en participar en todo conflicto, es moverte de ellos, en las relaciones…
- Dejas de preocuparte… te ocupas.
- Tienes cada vez más episodios de sentirte en contacto, en mayor aprecio hacia los demás.
- Ataques de sonrisas cada vez más frecuentes, Te haces sensible al amor que recibes de otros.
BRILLA SIEMPRE
MEG
Comentarios
Gracias siempre me sirve leerte mil gracias
Muchas veces la falta de tiempo es la que hace que no nos dediquemos esa meditacion, pero es muy importante para poder estar en paz con uno mismo... yo la busco mucho, asi que tendre que trabajar en organizarme para darme ese tiempo que mi yo necesita. Gracias
Gracias MEG es importante tener quien nos recuerde esto una y otra vez!!!
Gracias estoy iniciàndome espero mantener mi paz interior permanentemente.
Gracias Meg, por compartir, me queda claro que nuestros pensamientos son los que determinan nuestra vida, lamentablemente traemos el chip bien insertado, de que tenemos que: prepararnos lo más y mejor que podamos, tener el mejor trabajo, obtener las mejores cosas, excelentes relaciones, etc. para ser "alguien" y vivir bien; cuando ni siquiera estamos bien con nosotros mismos, como dices no tenemos esa PAZ INTERIOR, que es lo que realmente nos hace felices, y por lo tanto la desbordamos hacia los demás. Yo ya trabajo en esto desde hace tiempo, es un trabajo diario y continuo que nadie puede hacer por uno, no es fácil, pero sigo adelante cada día. Saludos
GRACIAS MEG POR ESOS VALIOSOS CONSEJOS QUE NOS COMPARTES Y QUE MUCHA FALTA ME HAN HECHO DE TOMARLOS EN CUENTA.
Lo feliz que estoy. Tengo todos los sintomas anteriores.. le anadiria mantener mucho contacto con literatura positiva y la oracion, abandonando las dificultades en manos de Dios...