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EL IMPACTO DEL PRIMER DÍA DE CLASES

Psicóloga Educativa, Rosa Ma. Chico del Olmo

    Se acerca el inicio de una nueva etapa en la vida de los pequeñines, la importantísima educación formal;  para muchos de ellos, entre tres y cinco años de edad, será la primera vez que pisarán un aula de clases.

      Los pequeños pueden reaccionar de formas totalmente diferentes en su primer día de clases, mientras unos llegan entusiasmados, otros se sienten asustados e inseguros. Su reacción depende de su personalidad, la actitud de los profesores y, por supuesto, la de los padres.

     Después de que los padres de familia realizan una selección cuidadosa y meticulosa, hemos sido los afortunados…la escuela elegida en la que han depositado su confianza, el lugar seguro para sus pequeños, donde encontrarán profesores dispuestos para ayudar en cualquier situación.

     Es entonces que los niños se enfrentan a lo que llamamos periodo de adaptación, que se da entre las tres o cuatro primeras semanas, ya iniciado el ciclo escolar (aunque cada niño tiene su ritmo y eso hay que tenerlo muy en cuenta).  Inicia entonces uno de los tantos trabajos que desempeñan las maestras, y que es propiciar todas las situaciones didácticas para fortalecer las competencias del campo formativo Desarrollo personal y social.

Recomendaciones

-       Debemos recordar que en esta etapa el apego de los pequeños hacia su mamá es indispensable para vivir. El darse cuenta de que no estarán con ella por un periodo, aunque sea corto, les ocasiona conflicto. Es recomendable que durante los primeros días de clases los pequeños asistan al jardín de niños con alguno de sus juguetes preferidos o un objeto de mamá, de esta forma les permitirás sentir seguros y en confianza (un peluche o una bufanda con el olor de mami los harán sentirse como en casa).

-       En este periodo la personalidad de los niños se encuentra en la construcción de su identidad. Con la socialización, los pequeños desarrollan la capacidad para captar las intenciones y los estados emocionales de otros, es entonces que debemos mostrarnos seguros al darles la bienvenida. Recuerda que la primera impresión es muy importante, más aún si se trata de niños pequeñitos. Recíbelos con una gran sonrisa.  Lo esencial es trasmitir seguridad, mucho cariño y hacerles el día lo más divertido posible con gran variedad de actividades que los estimulen.

-       Muchos expertos dicen… “El primer día debe ser tomado con tranquilidad sin convertirlo en un gran evento, porque puede generar ansiedad y presión en el pequeño”. Sabemos que la rutina de su día a día cambiará y que la asistencia al colegio será parte de su acontecer, pero si la vida la tenemos que disfrutar día a día, yo les recomiendo hacer ése y todos los días ¡maravillosos para sus alumnos!

-       En la mayoría de las ocasiones, al despedirse de sus hijos, los padres transmiten su angustia y nerviosismo natural del primer día de clases, deshacernos de esa emoción es un reto importante, por eso un abrazo y unas palabras cálidas, como “…todo va a estar bien y te vas a divertir mucho…”, serán de gran ayuda.

Sólo recuerda siempre que es preciso crear un clima cálido para favorecer la construcción de su bienestar emocional, aspecto fundamental en la formación de disposiciones para el aprendizaje de los alumnos.

   Ten siempre presente que esto no será fácil para los peques, así es que no los presiones, recuerda que en esta etapa te necesitan mucho.

Aprendizajes esperados

Se involucra y compromete en actividades individuales y colectivas que son acordadas en el grupo, o que él mismo propone.