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El hijo perfecto

Suena el teléfono

Es una llamada de larga distancia

-¿Hola? Servicio de atención al consumidor, habla Dios.

- ¿Dios?

- Si, hija, ¿cuál es la sorpresa, si hablas conmigo todo el día?

- Pero no me respondes...

- Eso es lo que crees. Pero... ¿qué necesitas hija?

- Dios, ¿sabes que? Me mandaste un hijo diferente del que te pedí. Te pedí un modelo de lujo y me mandaste uno estándar.

- ¿Por qué crees eso?

- Yo quería que fuera inteligente, calmo, educado... No es nada de eso.

- Hija mía, cuando salió de aquí era así, eres tu quien lo echa a perder

- No sé, Dios, yo tengo que enseñarle todo, ¿cómo puede ser inteligente?

- Él aprende rápido, fíjate. Aprende hasta lo que no le enseñas. Aprende con tus actitudes.

- Señor, el certificado de garantía esta ilegible, y en lugar del propietario no tiene mi nombre, ni el de su papá

- Hija, tu no eres su dueña, eres mas que eso: ¡eres la madre! Estas cuidando de un hijo  mío, que será entregado al mundo para realizar buenas obras.

- Dios el manual de instrucciones esta incompleto. No están las dudas mas frecuentes, como actuar en determinadas situaciones, que dice con cada tipo de llanto... Esas cosas.

- Hija mía, hay paginas que solo una madre puede llenar.

Cada ser humano es único, y a veces un desconocido para sí mismo, por lo que esas paginas no pueden nunca ser llenadas; pero con amor, todas las paginas se llenaran, pues es la única tinta capaz de escribir en este manual.

Te cabe a ti elegir que camino tomar

- ¿Cuánto tiempo tiene de garantía?

- El se quedara a tu lado el tiempo necesario, tiempo que nunca hallaras suficiente.

Puedo garantizarte que tu también estarás siempre al lado de el, aunque muchas veces no apruebes sus actitudes.

Si tu, verdaderamente aprendes a ser madre, estarás a su lado para ampararlo y corregirlo.

Así estarás escribiendo una pagina mas del manual.

- Señor, no tengo mas tiempo para mí, él ocupa todos mis espacios. Yo ya no me reconozco.

- ¿No te reconoces en cada victoria de tu hijo? ¿no reconoces cada minuto del tiempo empleado? Si te esta dando mucho trabajo, puedo traerlo de vuelta.

- ¡No! ¡No quiero eso, por favor! ¡No podría vivir sin él! Yo solo me quiero preparar.

- Me pediste un hijo perfecto y te di un hijo perfecto, porque es aquel a quien amas, sea el cómo sea. Toda madre tiene hijos perfectos porque la perfección esta en los ojos de quien ve con el corazón.

Anda, cuida de tu hijo, vive un día a la vez, aprende de el lo que el día te enseña.

No busques el manual, no necesitas garantías. Solo ama, así encontraras todas las normas y conocerás todas las garantías.

- Muchas gracias, si te necesito puedo...

- Puedes, hija mía, todas las veces que me necesites, allí estaré.

La llamada se termino. Un ángel anuncia otra llamada, mientras pregunta desconsolado: -¿ellas no aprenden?

- Ellas ya saben, solo quieren la confirmación – responde dios pacientemente

- ¿Confirmación de que? - pregunta el ángel atónito

El señor lo mira y, con una risita cómplice dice:

- Que tiene el hijo perfecto