Hay que trabajar para tenerlo y vivir para disfrutarlo
Siempre me ha parecido interesante analizar nuestra relación con el dinero y me he cuestionado cuando lo he tenido y cuando no. ¿Qué significa para mí? ¿Cómo me vínculo con esta posibilidad? ¿Para qué lo utilizo y cómo me siento al hacerlo? En mi caso, las respuestas -teniéndolo o no-, creo que han sido interesantes. Cuando lo tuve, representaba una posibilidad maravillosa de conocer más el mundo, de disfrutar momentos más excéntricos y más cómodos, de permitirme vivir locuras que sólo valían eso: dinero para lograrlas… pero creo que con o sin dinero no puedes disfrutar del todo la vida si no lo haces por lo que hay en ti.
Recuerdo a un amigo que me ayudaba a pagar la comida que compraba para mí, porque no ganaba lo suficiente para alimentarme mes con mes y, ¡claro!, lo más fácil habría sido comer en casa de mi mamá, pero era eso justo lo que no quería. La pasé muy mal, pero deseaba valerme por mí misma, encontrar el sentido de tener y de no tener para conocerme más. Conocer mi parte ahorradora, mi parte vulnerable, mi parte necesitada de mucho o de poco. Considero que he sido, en las bajas y en las altas, muy espléndida en términos emocionales frente al dinero. Si tengo un peso, la mitad es del otro. Me gusta la sensación de compartir y de no de absorber con egolatría sus beneficios.
Lo que más me gusta es saber que soy la misma con o sin. No le tengo miedo al dinero, no me hace más o menos. Es para mí un vínculo para obtener mejores posibilidades. Sin embargo, todo cambio cuando fui mamá, ¡qué angustia! Porque una cosa es que tu no comas y otra que no coman tus hijos. Hoy percibo a una sociedad angustiada por este tema: para qué sí tengo, para qué no me alcanza… La situación de nuestro país nos ha hecho vivir, creo, en mayor conciencia, el valor del dinero. Cuando vivimos rodeados por más de 40 millones de pobres, la perspectiva cambia. Tenemos mucho que aprender en torno a nuestros vínculos monetarios. Si pudiéramos hacer un justo y comparativo análisis de lo que tenemos, creo que salimos debiendo y eso se nos olvida. Siempre queremos más. Queremos lo que no tenemos, pero poco vemos lo que hemos logrado gracias al cochinito de nuestras vidas. Hay una frase en la que sí estoy de acuerdo en torno al dinero: “El dinero no se da en maceta” ¡Sí!, ¡hay que trabajar para tenerlo y vivir para disfrutarlo!
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Comentarios
Si bien el dinero esta relacionado con la creatividad y el esfuerzo del ser humano para obtenerlo, no podemos ignorar que las condiciones socioecoómicas que vivimos limitan las capacidades de los seres humanos para tener lo suficente para satisfacer sus necesidades básicas y favorecen que unos pocos obtengan mucho sin apenas hacer un esfuerzo. Tampoco podemos dejar de considerar que cuando pensamos en riqueza la relacionamos con la que está en los bancos, que legitima las "leyes" económicas y el poder político y no en la verdadera: la que hace el ser humano mediante su esfuerzo y talento.
HOLA FERNANDA SOY SILVIA QUE LINDO LO QUE OPINAS Y REALMENTE CREO QUE ES VERDAD QUE NOS ANGUSTIAMOS MUCHO CUANDO NO LO TENEMOS, PERO ESTE PENSAMIENTO TUYO ME CAE COMO ANILLO AL DEDO POR QUE ESTOY BUSCANDO TRABAJO, YA QUE EN DICIEMBRE DESPUES DE 7 AÑOS ME LIQUIDARON EN LA EMPRESA DONDE LABORABA. PERO BUENO SE QUE ALGO MEJOR ME ESPERA.
SALUDOS.
SILVIA.
Saludos