eEL FRASCO DE CAFE

Viernes 06 de Febrero de 2009Reflexiones - El Frasco de cafePasaron los años. Terminé la escuelay tomé un empleo en mi ciudad. Una vez, mientras visitaba a mis padres, usé el teléfono de su recámara. Tristemente, observé que el frasco de cafeno estaba. Había servido su propósito y ahora había sido removido.Sentí un nudo en mi garganta al contemplar el lugar junto a la cómoda en el que frasco siempre había estado. Mi papá es hombre de pocas palabras; nunca me sermoneaba sobre los valores de la determinación, perseverancia y fe. El frasco de cafe me había enseñado todas esas virtudes mucho más efectivamente que las palabras más elocuentes pudieran haberlo hecho. Con cuánto cariño recuerdo a aquel viejo frasco y su lugar en mi vida.Cuando me casé, le conté a mi esposao carlos el importante rol que aquel viejo frasco de cafe había jugado en mi vida como muchacha. En mi mente, definía más que cualquier otra cosa, cuánto me había amado mi papá.La primera Navidad después que naciera nuestro hijo christian pasamos el feriado con mis padres. Después de cenar, Mamá y Papá se sentaron el uno junto al otro en el sofá, abrazando por turno a su nieto comenzó a gimotear suavemente y carlosla tomó de los brazos de Papá. "Probablemente necesita ser cambiada", dijo mientras llevaba a la bebé a la recámara de mis padres para cambiarle los pañales. Cuando carlos regresó a la sala, había una bruma visible en sus ojos.Le pasó a christian de vuelta a Papá antes de tomar mi mano y guiarme hacia la recámara trasera. "¡Mira!" dijo suavemente, sus ojos dirigiéndome al lugar en el piso junto a la cómoda.Para mi sorpresa, allí, como si nunca hubiese sido removido, se hallaba el viejo frasco de cafe, el fondo ya cubierto de monedas. Me encaminé hacia el frasco, metí la mano en mi bolsillo y saqué un puñado de monedas. Con una mezcla de emociones atorándome la garganta, dejé caer las monedas en el frasco. Levanté la mirada para ver a Papá quien, cargando a christian se había introducido silenciosamente en la habitación. Nuestros ojos se toparon y me di cuenta de que ambos sentíamos las mismas emociones. Ninguno de los dos podía hablar.No teníamos necesidad de ello. El frasco de cafe estaba de vuelta en su viejo lugar con renovado propósito. Podía ver el gozo en la mirada de Papá mientras sostenía dulcemente en sus brazos a su nieto El viejo frasco de cafe era nuevo de nuevo.paty de ramos
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