Publicado por mariona el 2 de Mayo de 2010 a las 10:30pm
Siendo la misma, hoy me siento diferente… Siendo un grano de arena, hoy me siento un arenal”Cuando menos te lo esperas, te llegan momentos para no olvidar.Sé, que sin verlo dios está en todas partes y en todos los lugares, pero hoy lo vi ante mí, en la persona de una pobre mujer…Me hizo sentir en el cielo.¡No me lo puedo creer!Como pensar que en este mundo de hoy, donde la prepotencia, la insolaridad, el ego y la envidia… Un bollo de pan, en la mano de un ser humano desahuciado, malviviendo en la intemperie, me haya puesto en la tesitura de no saber reaccionar.Me quede en blanco, sin acordarme de nada, ni nadie… Algo tan agradable y al mismo tiempo una lección de humildad.Puedo decir que por mucha gente soy querida, por mi familia querida y necesitada, pero en la calle no creí, que alguien me hiciera sentir tantos sentimientos y controversias conmigo misma.Estaba en mí que hacer diario, mientras en mi mente repasaba como en una película todos mis acontecimientos, mis luchas y mis realidades.Ensimismada en mi mundo, sonó mi teléfono… Era precisamente la persona que en ese momento tenia y tengo siempre en mi pensamiento.Sus palabras me dejaron un día de tranquilidad y sonrisa.Salí a la calle como todos los días a hacer mis recados, a una cierta distancia divise el cuerpo menudo de la mujer que desde hace tiempo me inspira lastima y ternura… Ella se pone a pedir a las puertas del supermercado.Sus ropas desaliñadas, su carita morena quemada por las inclemencias del tiempo, sin techo donde vivir… Como tantos y tantos como ella.Para mí ella es un ejemplo de saber vivir, porque se conforman con sobrevivir con poco y regalando una sonrisa.Me iba acercando hacia ella, cuando veo que se levanta del suelo y se dirige hacia mí casi de un brinco.Me dio un abrazo… Su abrazo en un principio me dejo sin reacción, seguido me dio un beso al que yo correspondí.Me dijo que había estado fuera y que al verme le dio alegría, porque en esos días se acordó de mí.Mis ojos brillaron… Por un momento me sentí demasiado valorada por ella, pero pequeñaAnte su gran humildad, ante su valor humano.Me di cuenta que era en ese momento, alguien bendecida por dios y por un sincero agradecimiento.Hoy, ante esta acción me quede sin palabras, me di cuenta en un segundo de la realidad de los auténticos valores.Me hicieron comprender que es sentirse bien, que es el sentir el calor humano, que es sentirse reconocido…Que es sentirse felizHoy mi día fue bonito, mi corazón agradecido late con fuerza por un impulso hermoso, por un pequeño detalle de los que abren las puertas del cielo y el universo hasta el ser superior.Tenía que contarlo y compartirlo….Gracias por leerme.Buen comienzo de semana mis corazones…Besos
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