DESPERTAR
Esto que tanto temía está sucediendo ya
todo es vértigo y es prisa, desquiciada actividad.
La vida se ha puesto dura, se reduce a trabajar
y el poco tiempo que queda soñamos con descansar.
La familia se diluye, otro tanto la amistad
y la pareja es un caos, ya no hay tiempo para amar.
No queremos complicarnos, ni tener que trabajar
negociar con la pareja, para hacerla funcionar.
El tiempo de la conquista está pasando a la historia
aquellos largos romances llenos de luz y de gloria
sólo existen hoy en día en cine y televisión
en la vida ya hay muy pocos y en peligro de extinción.
Ahora todo es desechable, los sueños y la ilusión
sólo dos cosas se exentan: neurosis y corazón.
La neurosis como fruto de la ausencia del Amor
el corazón porque quiere salvarnos de este dolor.
Estamos todos dormidos en un mortal consumismo
donde no existe lugar para tocarse a uno mismo.
Drogas, alcohol, compulsiones, toda clase de adicciones
nos dominan y manejan en un mundo de evasiones.
No hay tiempo para escuchar, tampoco para escucharse
corremos enajenados sin ir a ninguna parte.
La soledad va ganando terreno día con día
el hastío y el vacío son parte de nuestras vidas.
Hay un terrible cansancio físico y emocional
y como si fuera poco el mental y existencial.
El desencanto es veneno que amenaza con matar
la esperanza que nos queda y que urge rescatar.
Aún los más optimistas se inclinan a claudicar
su valor se tambalea ante tanta adversidad.
Sólo hay una solución que nos podría llevar
a rescatar de este caos a toda la humanidad.
Es una sola palabra, una sola nada más
despertar es la respuesta sólo esa: despertar.
Despertar a la conciencia y el camino retomar
usando el único antídoto que nos podría salvar:
el Amor, el verdadero, total, incondicional
ese sentimiento puro que es esencial y vital
ese que nos pertenece por nuestra divinidad
al que tenemos derecho y que nos es natural.
Es hora de rescatarlo, él nos va a reivindicar
nos dará su luz de nuevo, nos volverá a armonizar.
Sólo él puede poner las cosas en su lugar
devolvernos la alegría y la sensibilidad.
El Amor, tan ultrajado de manera criminal
ese que está anestesiado por nuestra infidelidad.
El egoísmo, el poder, el control y la ambición
lo han tenido relegado sufriendo de inanición.
Hacemos guerras, matamos, por causa del desamor.
La violencia, la pobreza, la maldad y la traición
sólo son las consecuencias de nuestra falta de Amor
de la inconsciencia del mundo que es como una maldición.
Por ella este resultado que nos llena de dolor
hoy estamos desnutridos, anémicos y perdidos.
Somos discapacitados a nivel emocional
deambulamos por la vida, dormidos, sin reaccionar.
Despertar es la tarea y empezar a conectar
con el Amor que suplica que le demos su lugar.
Escuchemos esa voz si queremos libertad
y retomemos el Ser y regresemos a Estar.
Que el Tener y el Poseer agonicen al mirar
cómo el Amor nos devuelve la felicidad, la paz.
Despertar a la conciencia y encontrar sabiduría
nos llevará a comprender lo que es en verdad la Vida.
Comentarios
QUERIDA MIREYA, GRACIAS POR TUS PALABRAS, CREO QUE LA SENCILLLEZ Y LA PROFUNDIDAD DEBEN IR DE LA MANO... TE MANDO UN (((((((((((((((ABRAZO)))))))))) DEL ALMA