Publicado por mariona el 15 de Diciembre de 2009 a las 4:30pm
Despiertas muy temprano, con la alegría de un nuevo año, faltan pocos día para Navidad y te afanas en ir de compras, Para desplegar una sustentosa mesa navideña, con manjares que hasta los príncipes se vanaglorian, tú ego de aparentar te hace gastar hasta lo que no tienes,Y inconciente mente esperas que todos tus amigos, vecinos y familiares te halaguen por el trabajo que te has tomado en el festejo,Pero a la verdad a ninguno le ha de importar todo lo que has hecho para agasajarlos, solo algunos vendrán y tan solo para poder criticar tu derroché,Tus hijos y nietos esperaran que pase las doce para salir corriendo hacia el baile o para encontrarse en la plaza para tomar y arrojar fuegos artificiales, sin importarles el peligro que corran,Porque para ellos no existe un lugar en el mundo, ni la familia solo escapar de la cruda realidad que los rodea,Al final de la noche te habrás quedado solo con una casa vacía y con el corazón angustiado, porque te darás cuenta que todo habrá sido en vano,Tú orgullo será quebrantado con la cruda realidad de que no ahí nadie realmente a tu lado que estime tu persona,Y en las calles la sombra de la soledad y la miseria deambularan dejando sus desechos y tú con tus sueños al viento.Entonces comprenderás que la Navidad es la oportunidad de afianzarte con Dios y agradecerle el amor, el sustento, las fuerzas y la misericordia al darte a su hijo para tu salvación…Y que todo eso que distes al mundo es vano y efímero, que no reditúa nada para el alma, que te pierdes en la nada de los sentimientos de un mundo que no conoce del poder de Dios para sus elegidos…Dios los bendiga en nombre de Jesús el verdadero sentir de l Navidad.
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