El 2010 comenzó con tambores de guerra batiendo en el sector de comunicaciones. Desde el 11 de enero pasado, cuando se anunció la compra de Telmex por América Móvil (Telcel), el mercado no ha dejado de convulsionarse.Sin que sea posible afirmar que todos los eventos que recientemente se han dado a conocer en este sector están necesariamente relacionados con la licitación de frecuencias en las bandas de 1.9 y 1.7 GHz, sin duda la gran mayoría de ellos está vinculado o ha sido detonado por los tiempos de ese proceso.La primera fecha crítica venció el 16 de febrero pasado, cuando los interesados en las licitaciones debieron entregar a la Comisión Federal de Competencia su solicitud de opinión favorable, especificando los agentes económicos integrantes de su grupo. Esto explica el apresuramiento de Cofeco por aprobar dos operaciones de concentración: la adquisición de entre 30 y 40 por ciento de las acciones de Nextel por parte de Grupo Televisa y la mencionada compra de Telmex por América Móvil (Telcel).También es en función del proceso de licitación que el presidente de la Comisión Federal de Telecomunicaciones solicitó formalmente al secretario de Comunicaciones y Transportes resolver las prórrogas a concesiones pendientes antes del 21 de abril, fecha en que Cofeco deberá dar a conocer la lista de los que podrán contender en las licitaciones y la cantidad de espectro que cada uno de ellos podrá adquirir. Esta definición es indispensable para cerrar la puerta a la posibilidad de procesos litigiosos que podrían obstaculizar las licitaciones.Pero para la SCT sería difícil justificar la resolución de solicitudes de prórrogas posteriores sin haber resuelto la del canal 46 de Cablevisión, el canal 52 de MVS y nueve concesiones en la banda de 2.5 GHz solicitadas con anterioridad.En función a esto, y para eliminar cualquier percepción de inequidad en el trato a grupos, antes de ayer la SCT hizo del conocimiento público su negativa a la prórroga de las concesiones citadas, además de comunicar su determinación de sancionar a Televisión Azteca con una multa de casi 4.5 millones de pesos por ofrecer el servicio de Hi-TV, y ordenar la suspensión inmediata de las transmisiones.MVS y Televisión Azteca impugnarán ante tribunales las decisiones de la SCT, pero es difícil anticipar la reacción de Televisa/Cablevisión.Históricamente, no ha habido operación que Televisa o sus subsidiarias hayan promovido que no les haya sido aprobada. Sólo en los últimos seis años se han aprobado: el refrendo de las concesiones de televisión abierta hasta el 2021 y el otorgamiento de un canal espejo; la compra del 50 por ciento de Cablemás y de Cablevisión de Monterrey; la autorización para ofrecer telecomunicaciones; la adquisición de hasta 40 por ciento de Nextel; y la exención del pago de derechos por dos años, conforme a la Ley de Ingresos, si como es de prever, como únicos participantes -con Nextel-, resultan ganadores en la licitación de uno o dos bloques de 30 MHz de frecuencias en la banda de 1.7 GHz.Apenas en diciembre pasado, Televisa anunció que para la transmisión de su nuevo canal informativo utilizaría la concesión del canal 46. Sin embargo, y como si anticipara algo, el 15 de febrero comenzó la programación aunque utilizando la señal del canal 115, tanto de Cablevisión como de Sky. Televisa nunca necesitó del canal 46. En su momento obtuvo la concesión para cerrar espacios a potenciales competidores en televisión. Considérese que tanto el canal 46 como el 52 están en la banda de UHF, son analógicos y físicamente permiten la transmisión de señales abiertas, aunque fueron regulados como canales de paga.No es posible afirmar que el cambio de planes sea un indicativo de la intención de Televisa de no cuestionar la decisión de la SCT, o si fue simplemente precaución. Pero habría sido insostenible la prórroga del canal 46 de Televisa/ Cablevisión y la negativa a la del canal 52 de MVS, que a diferencia de Grupo Televisa sí transmite programación -aunque no necesariamente del agrado del gobierno-.Sin duda, la licitación de frecuencias ha sido el detonador del estallido de la crisis en el ya de por sí convulsionado sector de las comunicaciones, y el proceso apenas comienza. Pero a río revuelto ganancia de pescadores: si Televisa no impugna la decisión de la SCT, ¿cómo podría obstaculizar la licitación del canal 46 en UHF para la creación de una nueva cadena de televisión? Y, de prevalecer la decisión, ¿qué argumentos legítimos utilizaría el gobierno para negar la licitación?
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HOLA HERMOSA,MUY INTERESANTE TU PUBLICACION.
SINCERAMENTE CREO QUE ESTANDO EL MOUNSTRUO DE TELEVISA PRESENTE(¡ PARA VARIAR !)EN TODO ESTO, PUES SIN DUDA ES CORRUPCION,,TRINQUETE Y MANIPULACION.
GRACIAS, POR COMPARTIR.
UN BESO Y UN FUERTE ABRAZO.
Veo con mucho agrado que se presenten publicaciones con mayor contenido.
Es un secreto a voces que televisa se ha destacado por comprar las resoluciones para resultar favorecidos con los resultados. De hecho en un principio ellos eran los únicos licitando en esas frecuencias, si ahora aparece otra empresa es porque lo van a hacer en conjunto por cuestiones de estrategia.
No hay que olvidar la tan llevada y traída “Ley Televisa”, la cual fue aprobada en tiempo record y casi por unanimidad sentando un precedente histórico.
Ahora todos se preparan para el festín que viene después de quitar del medio al sindicato de electricistas y a luz y fuerza del centro. (Con todos los errores y tranzas que ya sabemos).
¿Será que todos están tras la fibra óptica que hay instalada por todo el país y por la cual es posible ofrecer un triple play (Internet, Telefonía, Cable) a precios de risa, pero con unas ganancias exorbitantes?
¿Qué hay de la tecnología PLC? (Power Line Communications) que puede traducirse como comunicaciones mediante cable eléctrico y que se refiere a diferentes tecnologías que utilizan las líneas de energía eléctrica convencionales para transmitir señales de radio para propósitos de comunicación. La tecnología PLC aprovecha la red eléctrica para convertirla en una línea digital de alta velocidad de transmisión de datos, permitiendo, entre otras cosas, el acceso a Internet mediante banda ancha.
Si hay Internet también es posible el Shoutcast por este medio.
En fin, las posibilidades son muchísimas y la verdad no creo que ninguno de los actores se encuentre preocupado. Esas compras, fusiones, etc., pueden ser solamente estrategias para librarse del pago de impuestos o para llenar algún requisito para poder entrar en el juego.
Somos nosotros los usuarios de esos servicios los que nos debemos preocupar, pues cada vez tenemos menos de dónde escoger y los monopolios, duopolios, etc. se ven más fortalecidos que nunca.
No es más que un show muy bien montado en el que nosotros, los espectadores, salimos perdiendo y los actores acabarán poniéndose de acuerdo para poderse quedar con un trozo del pastel aunque sea pequeño.
El sector de las comunicaciones hace mucho tiempo que está en crisis, pues el pez grande se come al chico y el que tiene más saliva come más pinole.
De todo este mar de corrupción puede dar fe Don José Gutierrez Vivó, pues por no seguir la línea, cual perros rabiosos no lo soltaron hasta que lo destruyeron y a todo lo bueno que había detrás de él.
No hay duda de que los llamados poderes fácticos controlan todo en nuestro país y no dejan salida a nadie.
¿Estarán esperando nuestro flamantes gobernantes o mejor dicho nuestros empleados a que estalle otra revolución que lleve a nuestro ya maltrecho país muchos escalones para atrás?
Comentarios
SINCERAMENTE CREO QUE ESTANDO EL MOUNSTRUO DE TELEVISA PRESENTE(¡ PARA VARIAR !)EN TODO ESTO, PUES SIN DUDA ES CORRUPCION,,TRINQUETE Y MANIPULACION.
GRACIAS, POR COMPARTIR.
UN BESO Y UN FUERTE ABRAZO.
Veo con mucho agrado que se presenten publicaciones con mayor contenido.
Es un secreto a voces que televisa se ha destacado por comprar las resoluciones para resultar favorecidos con los resultados. De hecho en un principio ellos eran los únicos licitando en esas frecuencias, si ahora aparece otra empresa es porque lo van a hacer en conjunto por cuestiones de estrategia.
No hay que olvidar la tan llevada y traída “Ley Televisa”, la cual fue aprobada en tiempo record y casi por unanimidad sentando un precedente histórico.
Ahora todos se preparan para el festín que viene después de quitar del medio al sindicato de electricistas y a luz y fuerza del centro. (Con todos los errores y tranzas que ya sabemos).
¿Será que todos están tras la fibra óptica que hay instalada por todo el país y por la cual es posible ofrecer un triple play (Internet, Telefonía, Cable) a precios de risa, pero con unas ganancias exorbitantes?
¿Qué hay de la tecnología PLC? (Power Line Communications) que puede traducirse como comunicaciones mediante cable eléctrico y que se refiere a diferentes tecnologías que utilizan las líneas de energía eléctrica convencionales para transmitir señales de radio para propósitos de comunicación. La tecnología PLC aprovecha la red eléctrica para convertirla en una línea digital de alta velocidad de transmisión de datos, permitiendo, entre otras cosas, el acceso a Internet mediante banda ancha.
Si hay Internet también es posible el Shoutcast por este medio.
En fin, las posibilidades son muchísimas y la verdad no creo que ninguno de los actores se encuentre preocupado. Esas compras, fusiones, etc., pueden ser solamente estrategias para librarse del pago de impuestos o para llenar algún requisito para poder entrar en el juego.
Somos nosotros los usuarios de esos servicios los que nos debemos preocupar, pues cada vez tenemos menos de dónde escoger y los monopolios, duopolios, etc. se ven más fortalecidos que nunca.
No es más que un show muy bien montado en el que nosotros, los espectadores, salimos perdiendo y los actores acabarán poniéndose de acuerdo para poderse quedar con un trozo del pastel aunque sea pequeño.
El sector de las comunicaciones hace mucho tiempo que está en crisis, pues el pez grande se come al chico y el que tiene más saliva come más pinole.
De todo este mar de corrupción puede dar fe Don José Gutierrez Vivó, pues por no seguir la línea, cual perros rabiosos no lo soltaron hasta que lo destruyeron y a todo lo bueno que había detrás de él.
No hay duda de que los llamados poderes fácticos controlan todo en nuestro país y no dejan salida a nadie.
¿Estarán esperando nuestro flamantes gobernantes o mejor dicho nuestros empleados a que estalle otra revolución que lleve a nuestro ya maltrecho país muchos escalones para atrás?
Saludos