Escogí la envidia para hacer mi análisis, inspirada en una experiencia que viví hace apenas unos días.Al llegar al gimnasio para hacer mi rutina de ejercicios, un par de amigas (amigas entre ellas), me vieron de arriba a abajo, o sea me escanearon con la mirada, luego se miraron entre sí, se acercaron y comenzaron a murmurar sin ninguna discreción. Unos días más tarde, volvimos a coincidir en otra actividad, al llegar a la clase de ritmos latinos, encontré un espacio libre justo frente a ellas y obviamente lo tomé, cosa que les indignó a tal grado que abandonaron la clase y se retiraron del salón.Estoy acostumbrada a este tipo de reacciones, mi presencia casi siempre causa un efecto en las personas, porque al llegar a algún sitio todas las miradas voltean hacia mi como si tuviera un imán, algunos me ven con interés o simpatía, otros (otras) me ven con envidia y otros parecen indiferentes, y digo parecen, porque platicando con alguien de quien yo pensaba que no me tenía ubicada, resultó más que enterado de mi persona.No se cual es la razón, y la verdad no me importa tanto, porque me gusta ser quien soy, he actuado en consecuencia de lo que quiero tener y no tener en mi vida, me siento cómoda conmigo y me gusto muchísimo.Sin embargo me pregunto porque algunas personas permiten que emociones tan nocivas como la envidia, la falta de autoestima y los celos, les impidan llevar una vida emocionalmente sana.Cuando gastamos nuestro tiempo viendo hacia fuera y envidiando lo que los otros son, perdemos la oportunidad de valorar nuestras propias cualidades.Todo es cuestión de actitud… En lugar de envidiar la figura esbelta de la vecina debo adoptar un estilo de vida más ordenado al comer, invertir un poco de tiempo en hacer ejercicio, en mejorar el estilo de vestir, los cuidados de la piel, y shalalá.Es un verdadero mito ese de que “no hay mujeres feas, hay mujeres pobres”.¡Falso! Absolutamente falso, falso y ofensivo, la belleza se irradia y se destila por la piel. Una persona bella te hace sentir bien cuando estas con ella, no importan sus rasgos físicos.Hay mujeres fodongas, eso si, y muchísimas, todas hemos pasado por ese estilo “casual”, entiéndase bien “fachoso”, y algunas se quedaron ahí da manera permanente.Muy respetable, si eso te hace feliz, pero si sentada en tu como estilo “casual” te la pasas criticando y envidiando a las que sí invierten tiempo en su persona… Revísalo.Si te choca te checa, dicen algunos especialistas.La envidia causa malestar, porque deseamos lo que el otro tiene, este malestar causa enojo, tristeza y pesar cuando vemos en otros lo que desearíamos para nosotros, entonces en lugar de tomarlos como ejemplo los odiamos, sólo que ellos sí han trabajado para obtener los beneficios, las cualidades, o las propiedades tan anheladas.Y si estos bienes son adquiridos en automático o sin ningún esfuerzo, un buen cuerpo, una cara bonita, inteligencia o habilidad, una fortuna heredada… ¡Zaz! Eso empeora la situación porque esto hace que los odiemos aún más.Todos hemos escuchado comentarios verdaderamente atroces, pobres, indignos e injuriosos de algún compañero de trabajo, o de algún amigo, y en el peor de los casos de algún hermano.¿Y tú que hiciste al respecto?¿Por qué la envidia duele tanto?Un día escuchando a alguien decretar una larga lista de maldiciones y deseos contra el porvenir de su interlocutor para que éste fuera fatal, declaró: -“Porque hay un Dios.”Entonces pensé en la flojera que debe darle a Dios su chamba algunos días, y el tener que escuchar peticiones tan absurdas.Sin ir más lejos, sé de personas que se han tomado el tiempo y la molestia de hacer rituales de magia para que el odiado (o sea yo) pierda todo lo que posee. ¡Que güeva!Que manera de perder el tiempo, tiempo valioso para invertir en tu persona y ver qué es lo que te gustaría mejorar en ti, como te gustaría ser, como te gustaría lucir, hasta donde quieres llegar.-¿Cuando aprendemos a envidiar y porqué razón?En la vida hay cosas que se aprenden y hay cosas que se maman, la envidia se mama.Es en el seno familiar en donde aprendemos a envidiar, nos entrenan desde la infancia a través de las comparaciones; para desear algo mejor de lo que tienen los otros, de pequeñitos a tener un mejor juguete que el amiguito, un poco después la mejor bicicleta del vecindario, una mejor calificación que la del hermano, luego la novia más bonita, más tarde el mejor esposo, un mejor auto, perdón camioneta, la mejor casa y shalalá y shalalá…Y si le ponemos atención a los medios, que ya son más de manipulación que de comunicación, porque es más lo que te venden que lo que te ofrecen…Una eterna juventud, una figura perfecta, una exagerada comodidad, una vida sexual digna de dioses del olimpo, te provocan para comprar todo porque si no estas a la moda no eres nadie…Las series de televisión que más audiencia acaparan saben muy bien como darle a cada televidente una dosis diaria para que al dejar el televisor sientan envidia de todo y por todo.Nada en la vida es una casualidad, todo es causa y efecto, designio, ley de atracción o como gustes llamarlo.Si sientes envidia, atraes gente envidiosa.Si tienes vicios, atraes personas con adicciones.Si te quieres, te aceptas y te cuidas, atraes gente buena, sana y afectiva.Una persona sana y afectiva se alegra de tu alegría, se regocija con tu crecimiento, te admira y te respeta, es feliz cuando eres feliz y llora cuando tú lloras.Una persona sana no pensaría en limitar tus sueños, en cortar tus alas, alguien que te quiere no te obliga a quedarte en un lugar donde no tienes nada que aprender, a dejar de lucir hermosa.Una persona envidiosa siempre está hablando mal de otros, los envidiosos siempre están comentando chismes, inventando intrigas y gozan con el sufrimiento de los demás. Te odian porque no soportan ver tu crecimiento, tu belleza ni tu brillo.Y tu, ¿de que hablas cuando estas con tus amigos?¡Que la fuerza del amor nos acompañe siempre!
Enviadme un correo electrónico cuando las personas hayan dejado sus comentarios –
Excelente artículo!!! Estoy de acuerdo en lo que piensas. Me hiciste recordar un grupito de arpías con el que tuve que lidiar hace ya algunos años en la oficina, época dificil pero también aprendí a defenderme, ser fiel a mis convicciones y a no permitir que nadie se interpusiera en mi desarrollo profesional. Saludos!
muy buen articulo la envidia he vivido con esta gratis porque yodo el mundo envidia mi persona, me pasa lo mismo que a ti si llego me ven de arriba a abajo critican si trabajo bien, si termino antes del ahora,si me cuido, me pinto el pelo lo corto y por demas esta decir que jamas se alegran cuando mis esfuerzoz son reconocidos, uno se siente muy mal al menos yo porque soy muy sentimental y me afecta y me pongo super depre, pero sigo adelante y seguire cuidandome y arreglandome y cambiando mi imagen para dar mas que hablar jajajajja que se mueran de la envidia
Gracias sigue escribiendo articulos como esto y animos a todos
Hola,muy interesante tu articulo , en lo personal no soy envidiosa, pero he tenido amigas que hacen comentarios muy desagradables de otras personas, y yo no hacia nada . Esto me incomodaba,asi que opte por alejarme de estas .Todas las personas deveriamos de tener cuidado delo que hablamos o deseamo a los demas. Ya que esto se refleja en nuestra persona.
Adriana:
Hace un tiempo, con mis secretarias inicie un prograna mujeres por las mujeres.
La primera propuesta era dejar de criticar en las demás la ropa, la actitud y la manera de relacionarse con los demás. No es asunto tuyo, no te incumbe. Cada idividuo es único.
La segunda era más difícil: Identifica qué es lo que más te molesta de ella y pregúntate si no es que éso te gustaría poder hacerlo tú misma, con la misma naturalidad. La respuesta solo te compete a tí.
La tercera: Analízala y aprende a hacer lo que ella hace, pero mucho mejor, supérala; si ella es eficiente, tú vuelvete indispensable...
Te puedo asegurar que si trabajas estas tres fases, que por cierto te tomará tiempo hacerlo, cuando tus jefes busquen a quien contarle un chiste la buscarán a ella, y cuando necesiten a alguien en quien confiar por su profesionalismo te buscarán a ti.
Para eso tienes que asegurarte de no hablar mal de nadie, mucho menos de los jefes, de no involucrarte en chismes, ni formar parte de ningún grupito de arpías, ni quejarte del exceso de trabajo.
Te recuerdo como jefa, que fuiste contratada para realizar un trabajo específico. Para resolver problemas en tu trabajo, no para aumentar los que ya tienen.
No te caería nada mal un cambio de look, nada parecido al de ella, por favor.
Mejora tu imagen, mejora tu arreglo personal, aprende a ser delicada y femenina, sin dejar de ser fuerte y aguerrida.
Por favor por ningún motivo, nunca, nunca llores en la oficina. ¡Es patético! Como jefa es horrible salir y ver a tu secretaria moqueando en su escritorio... Nunca, nunca, nunca te hagas la víctima de nadie.
Cada vez que la veas, en lugar de decir " la odio" di, me amo, me admiro y me respeto.
Yo soy yo y ella es ella. Cada una tiene derecho a las misma oportunidades.
Acéptalo y acepta también que cabe la posibilidad de que verdaderamente le guste a uno de tus jefes para algo más que trabajo, y ahí ya no puedes competir. Olvídalo.
Concentrate en tu trabajo y busca otros puntos de crecimiento, cursos de actualización, talleres y shalalá.
Que las mujeres seamos las mejores defensoras y aliadas de las mujeres es algo que no me parece imposible...
en verdad que interesante me gustaria compartir mi experencia en lo personal no me gusta meterme con las demas personas estoy en el proceso de cambio quiero brillar por lo que soy y voy paso a pasito pero en mi trabajo tengo problemillas pues tengo una compañera que entro despues que yo con la misma profesion y su forma de ser sociable cautivo a los jefes de modo que esta sobresaliendo mas que yo pero no se como enfrentar esta situacion en verdad no soy envidiosa pero no se que hacer para que los jefes se fijen en mi lo que quiero es que de igual manera se me de la oportunidad me gustaria que me dieras tu punto de vista gracias
Excelentee articuloo, la verdad me quede con la boca abiertaa ....ay veeces q se nos olvida quienes somoss y seguimos a los demas solo por tratar d estar bien con ellos, y siempre pensamos en complacer a los demas pero muy pocas veces a uno mismo y es ahi cuando nos discriminamos a nosotros mismos.
Gracias por tu articulo!!!!
Qtengas un excelente dia!!!! =)
Hola Marina : Muy buen artículo que auyda a reflexionar y a sentir que hat personas maduras que han superado en la experiencia de la vida situaciones difíciles que han ayudado a lo que ahora nos dices. Gracias
Hola Marina: Me encanto este artículo es tan cierto todo lo que dices, te pone a reflexionar y espero que les sirva a muchas mujeres que se dejan envolver en la envidia, porque las mujeres si que somos barbaras en ese tema...
Que valioso artículo Marina, me has dejado reflexionando mucho. Gracias por compartirlo y gracias por esta lección de vida, ya que esa seguridad que tienes en ti misma es la que anhelo yo, pero ahora sé que estoy segura de que con esfuerzo, constancia, dedicación y amor a mi misma la voy a conseguir. He estado trabajando ya en mi y tienes toda la razón que cuando dejas de observar a la gente y comienzas a observarte a ti, es lo mejor; es la manera en que comienzas a conocerte a ti misma. Te abrazo muy fuerte Marina y nuevamente gracias por ser como eres.
Comentarios
Gracias sigue escribiendo articulos como esto y animos a todos
Mil gracias por sus comentarios.
Adriana:
Hace un tiempo, con mis secretarias inicie un prograna mujeres por las mujeres.
La primera propuesta era dejar de criticar en las demás la ropa, la actitud y la manera de relacionarse con los demás. No es asunto tuyo, no te incumbe. Cada idividuo es único.
La segunda era más difícil: Identifica qué es lo que más te molesta de ella y pregúntate si no es que éso te gustaría poder hacerlo tú misma, con la misma naturalidad. La respuesta solo te compete a tí.
La tercera: Analízala y aprende a hacer lo que ella hace, pero mucho mejor, supérala; si ella es eficiente, tú vuelvete indispensable...
Te puedo asegurar que si trabajas estas tres fases, que por cierto te tomará tiempo hacerlo, cuando tus jefes busquen a quien contarle un chiste la buscarán a ella, y cuando necesiten a alguien en quien confiar por su profesionalismo te buscarán a ti.
Para eso tienes que asegurarte de no hablar mal de nadie, mucho menos de los jefes, de no involucrarte en chismes, ni formar parte de ningún grupito de arpías, ni quejarte del exceso de trabajo.
Te recuerdo como jefa, que fuiste contratada para realizar un trabajo específico. Para resolver problemas en tu trabajo, no para aumentar los que ya tienen.
No te caería nada mal un cambio de look, nada parecido al de ella, por favor.
Mejora tu imagen, mejora tu arreglo personal, aprende a ser delicada y femenina, sin dejar de ser fuerte y aguerrida.
Por favor por ningún motivo, nunca, nunca llores en la oficina. ¡Es patético! Como jefa es horrible salir y ver a tu secretaria moqueando en su escritorio... Nunca, nunca, nunca te hagas la víctima de nadie.
Cada vez que la veas, en lugar de decir " la odio" di, me amo, me admiro y me respeto.
Yo soy yo y ella es ella. Cada una tiene derecho a las misma oportunidades.
Acéptalo y acepta también que cabe la posibilidad de que verdaderamente le guste a uno de tus jefes para algo más que trabajo, y ahí ya no puedes competir. Olvídalo.
Concentrate en tu trabajo y busca otros puntos de crecimiento, cursos de actualización, talleres y shalalá.
Que las mujeres seamos las mejores defensoras y aliadas de las mujeres es algo que no me parece imposible...
¡Que la fuerza del amor nos acompañe siempre!
Gracias por tu articulo!!!!
Qtengas un excelente dia!!!! =)
-
1
-
2
de 2 Siguiente