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Las palabras que salen del alma nunca serán suficientes pra transmitir nuestro sentir a los seres que amamos pues siempre brotarán más y mejores de nuestro ser. En esta ocasión,la carta vá dirigida a nuestros queridos padres y madres, pilares importantes en la vida de nosotros, sus hijos.

 "Sábes/n, aveces siento miedo, miedo inexplicable. Aparentemente no hay razón, pero en realidad siento que tengo temor de fallarte porque pienso esperas demasiado de mi. No hay un dia en que no me recuerdes todo el esfuero que haces para que yo estudie, que vaya a la mejor escuela, que tenga lo que tu no tuviste, que haga lo que tu no pudiste hacer. Recuerdo cuando era muy chica/o tu cara de satisfacción al comentar con los demás que yo ya sabia de computación, que ya sabia de natación, etc, aprendí y disfruté muchísimo al ver como se dibujaba la sonrisa en tu rostro por mis continuos esfuerzos para ser el mejor, la super estrella, pero aveces siento que no puedo, que quiero ser simplemente yo.

Hay dias en que el cansancio reflejado en tu rostro me acusa y me llena de culpa porque sé bien que lo que haces, lo haces por mi, y yo no encuentro palabras para decirte algo, nisiquiera gracias y, cómo puedo pagar por lo que haces?¿ empeñando el alma y tratar de ser el mejor?.

Cuando siento que no puedo llenar tus expectativas, cumplir tus sueños, siento que el miedo y la culpa invaden mi alma. Entonces me convierto en el rebelde, el agresivo, el violento/a al que no le importa nada, pero lo cierto es que tengo miedo de fallar, tengo miedo de inventar un camino y que no sea lo suficiente bueno para ti.

A mi edad, siento que llevo lápidas en el alma. No quiero fallarte, ése es el miedo más grande. Me duele que trabajes tanto,me pesan las deudas que te agobian,me duele lo que vives y lo que dejas de vivir, me lo dices a cada dia, a cada rato y yo no sé que hacer.

Ayudame, mamá, ayudame, papá, dime que te puedo fallar, que no estoy obligado/a a ser perfecto, sino sólo a hacer las cosas lo mejor que puedo. Dime que me amas por lo que soy, por quien soy. Dímelo en secreto si te cuesta trabajo hacerlo o en una cartita; colócala debajo de la almohada. Dime que si esperas tanto de mi es porque sabes que en el corazón hay un sueño y un anhelo que juntos podemos hacer realidad, pero no le pongas presión, no lo cargues con cansancio, frustración y trabajo agobiante, porque para eso ni la vida misma me alcanza para pagarte, pero si me pides que sea feliz intentando descubrirme día a día, te aseguro que yo también voy a realizar mi mejor intento para verte feliz. Y aunque sé que nadie puede andar en el camino de otro, ni que es posible hacer feliz o infeliz a alguien, yo voy a poner todo de mi parte para que tus anhelos de padre cristalicen en mí, por ser cada dia una mujer/hombre de bien.

Si me caigo, ayúdame a ver el error, permiteme enfrentarlo, pero dime que me puedo volver a levantar y que puedo seguir adelante; dime que confias en mí auqnue me equivoque nuevamente, aunque me caiga; dime que puedo ser yo sin miedo, sin culpa. Enséñame a conocer a Dios, enséñame a invocarle cada día, enséñame a valorar lo que es bueno y noble. Pónme reglas y límites, porque aveces sin darme cuenta, sin tener bien claro lo que es bueno y lo que es malo, me paso y me siento mal conmigo mismo/a. Ayúdame a construir mi vida y juntos a construir un muendo mejor.

Si esperas demasiado de mi, te pido que no sea por frustración, por lo que tú no pudiste hacer en la vida, porque para mí, lo que tú eres, lo que haces cada día, te hace grande y especial. Tampoco tú tienbes que ser el campeón/ona y el mejor; te amo por lo que eres, por la lucha de cada día, por la sonrisa con la que enfrentas la vida, por tu capacidad de creer, de amar. No tienes que ser perfecto papá, mamá, solamente se tú. Si estamos juntos que sea únicamente un compromiso de amor, sin reclamos, ni reproches, sin promesas que no se cumplen, sin culpas que no alcanza la vida a pagar.

Hoy solo quiero decirles que los amo, que quiero ser el mejor pero la competencia es conmigo mismo, cada día, cada instante. No quiero ser más que los demás, ni menos, quiero ser simplemente yo. Si esperas demasiado de mí, que sea solamente por amor, porque crees en mí y en mi capacidad, como yo también creo en ti".