“No sé ni cuando, ni por qué, pero mi pareja y yo nos comenzamos a distanciar”
Un malentendido, un portazo, y el silencio que inunda por días y semanas las habitaciones de la casa.
¿Y dónde están sus habitantes?
Cada uno haciendo su vida, mudos e infelices sin saber como vencer al fantasma que cada día los separa más y más. Todas las parejas se pelean y atraviesan por crisis.
Es común que cuando surge un conflicto nos dejemos llevar por el rencor, la desilusión, la desconfianza y los agravios y que le metamos toda la culpa a la pareja por todo lo que está pasando.
Es difícil en medio de la crisis tocar nuestros propios medios y asumir la responsabilidad por nuestros errores.
A menudo en la convivencia percibimos errores en la pareja que no vemos en nosotros mismos.
Nos transformamos en recolectores de defectos y la relación acaba convirtiéndose en un interminable intercambio de recriminaciones, creando un clima de tanta tensión que hasta los comentarios inocentes son mal interpretados.
Además de las pequeñas irritaciones cotidianas, cualquier cambio personal como por ejemplo: un cambio de empleo, volverse de repente rico o pobre, una mudanza o una enfermedad puede desencadenar una crisis de pareja.
HAY TRES ETAPAS PARTICULARMENTE DELICADAS EN LA VIDA DE UNA PAREJA:
- Los primeros años, porque se puede generar lo que los especialistas llaman una “crisis de habituación” que se refiere a que cuando creemos que poseemos a alguien esa persona pierde valor y eso se refleja en actitudes de apatía y desapego que se van intensificando.
- La 2ª etapa crítica llega cuando con el nacimiento de un hijo, porque cambia totalmente la vida de la pareja. Aumentan las responsabilidades y aparecen nuevas obligaciones. La mujer se apega en muchas ocasiones a hijo (s), el hombre en cambio, se aleja, porque no extiende y se crea una brecha cada día más grande.
- El nido vacío que se refiere a cuando los hijos se van y al quedarse solos, los miembros de la pareja no tienen ni que decirse ¡Son como dos extraños! que además de manera independiente están atravesando por la crisis de la edad madura.
Algunas parejas después de años de lejanía se dan cuenta que el problema de fondo era que se habían acostumbrado a vivir en el conflicto y a ser prisioneros de hábitos inadecuados.
YA METIDOS EN ESTA CÁRCEL, ¿CÓMO SE PUEDE SALIR?
A veces se necesita ayuda psicológica para invertir el proceso.
¿CÓMO?
La rutina hace que acabemos dando por hecho y viendo cómo algo normal lo bueno que hace la pareja por nosotros; cosas que podrían fácilmente caer en la categoría y sin darnos cuenta las exigimos como si siempre hubieran sido obligaciones.
Así que el primer paso para invertir el proceso consiste en hacer un esfuerzo permanente de reconocimiento mutuo y reforzar lo positivo, valorando lo que se hace bien.
Es fácil que la falta de comunicación, las interpretaciones erróneas y la crítica permanente se conviertan en discusión.
Hay que dejar de recurrir al juicio como: “eres un quejumbroso”, para expresar el verdadero sentimiento de fondo en la primera persona, ejemplo:
“Cuando te la pasas señalándome lo que se me olvidó, me siento criticada y muy mal porque creo que no reconoces mi esfuerzo”.
El Dr. John Goltman, Director del Centro de Estudios de la Universidad de Seatle, con quien yo me entrene, dice que las reglas de oro para vivir bien en pareja son:
7 REGLAS DE ORO PARA VIVIR BIEN EN PAREJA:
- Mantener el respeto mutuo - mientras que exista, hay esperanza de que la relación continúe.
- Cultivar la amistad - tratar de complacer y conocer a la pareja cada día.
- Afrontar juntos las dificultades - no huir cuando surgen problemas, buscar soluciones por separado y estudiarlas en conjunto.
- Mantener una relación de iguales - aprender a compartir el poder.
- Evitar la crítica - porque de la crítica al desprecio hay un solo paso.
- No intentar cambiar al otro – más bien, solucionar problemas personales.
- Trazar metas comunes - y hacer planes a futuro.
Comentarios
Excelentes las reglas de oro para vivir en pareja, gracias
Así es Lizi, tienes toda la razón, creo que pasé por la dos primeras crisis e iniciaba con la tercera que ya no quise seguir pues con los 20 años de casada que llevaba troné pues mi vida ya no era la que siempre deseaba, la falta de comunicación y entendimiento me llegó a divorciarme de mi pareja se perdió todo lo que debía de tener una pareja y lo mejor fue cortar por lo sano, estoy segura que la próxima persona que llegue a mi vida será muy distinto, nunca me enseñaron a pedir solo a dar y dar y cuando empecé a pedir me llevó al rompimiento de mi relación, cuando se quiere se da sin pedir no esperemos a que la otra persona nos pida lo que debemos de dar por inercia: respeto, fidelidad, apoyo, compañía, confianza, amor, etc., etc.
Pequeños detalles hacen la diferencia en un relación de pareja. gracias los tendré presentes estos consejos a veces no sabemos que hacer en estos conflictos y luego como a mí me pasa ciertos mal entendidos me ocasionan dudas y es más vergonzoso ver que no pasan de figuraciones mías, precisamente por no saber manejar esos detalles.
muy sabios todos los consejos, gracias.
Gracias me ha servido muchísimo!
Me gustaria que hablaras de la crisis de los 40 - 50 en los hombres. Mi esposo esta pasando por ella y no se cual postura tomar.
A veces quiero acercarme a el pero no quiero que me sienta perseguidora y si lo dejo solo me da miedo que busque otra compañia. Ya hemos discutido de una "amiga" muy querida para el que si lo comprende y lo anima. No se que hacer
Muy cirto, lo que comentas igual a mi me llegaron tarde; pero me da la opotunidad de conocer y aprender mas de como debe de ser una relación de pareja y poder llegar a ser mejor persona.
Gracias.