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Como decíamos hay que fomentar el amor de nuestra pareja para que esto siga funcionando, pues sí porque por desgracia si no lo hacemos, el amor no se cultiva solo, no crece como hierba silvestre, al contrario es un planta demasiado delicada que si no se le cuida con cariño y dedicación no crece.

Y es que para fomentar el amor se necesitan también ingredientes importantes como la comunicación, el interés, el respeto, y la dedicación o cuidado que tengas por tu pareja.

Reiterando lo mencionado en las otras dos partes, es fundamental que después de que nos enamoramos, que tengamos química, y pasión por el ser amado, ingredientes importantes también, aunque no los más notables en el idioma del verdadero amor, debemos de cuidar muy bien a nuestra pareja.

Por eso, es fundamental que tengamos interés en él, que nos ocupemos de su persona, respeto hacia sus gustos y necesidades, dedicación por procurar a esa persona y lo que jamás debe faltar es la comunicación, ingrediente que a mí parecer es el más importante, ya que la comunicación, es la “herramienta” que nos abrirá las puertas del ser amado, nos permitirá conocerlo, podemos echar un vistazo a su alma, podemos conocer día a día lo que hay dentro de nuestro amado.

La comunicación es el vínculo de unión que permite que entre él y ella no se pierda lo esencial, cuando la juventud, la pasión, el sexo, los hijos, la vida misma haya pasado, la comunicación es lo único que seguirá manteniendo viva a esa pareja, porque seguirán descubriendo que seguirá habiendo amor y comprensión.

De esta manera platicar con nuestra pareja en todo momento, el saber conversar, escuchar y seguir ampliando la forma de dialogar, nos hará más felices porque entonces habremos aprendido a fomentar el amor de nuestro compañero de vida.

Por eso dicen que cuando se llega a viejo y se sabe charlar con la pareja, habremos aprendido a bien amar.